'Ágora' - Aburridas clases sobre religión y astronomía
Hablar de 'Ágora', es hablar de Amenábar. Entendiendo al autor se puede explicar más o menos bien que la película resulte pretenciosa en tan altas dosis, que sea dispersa en sus reflexiones argumentales y que contagie más frío que un helado en la Plaza Roja en invierno. Que sea presuntuosa no me sorprende demasiado. Puede haber varios tipos de genios....