Como una adaptación de Robert E. Howard se nos vende esta nueva propuesta. ¿Y eso qué es lo que es? Ni idea, porque no conozco el material original, aunque al menos la promoción me sirve para saber que el autor a su vez tiene mucho que ver con Conan. Así que, en si es o no una buena adaptación de un material del que, por otro lado, no tengo idea alguna sobre su calidad, va a ser que mejor no entraré; un material que por cierto tampoco me invita a conocer su adaptación al formato celuloide, ya sea esta una buena o mala traslación a la gran pantalla.
¿Qué nos ofrece la cinta? Nada nuevo que no hayamos visto ya en producciones de esta índole, un intento europeo y barato de plantarle cara a Hollywood con sus mismas armas, y del que como en la mitad de las propuestas puramente comerciales no cabe esperar sino un más o menos distraído pasatiempo con el que rellenar unos cuantos minutos de nuestras vidas sin preocuparnos de que el recuerdo del film vaya a ocupar espacio en nuestro disco duro del cerebro. Cumple de la misma manera que todos cumplimos años, por compromiso.Como ya he comentado, desconozco que es aquello que hace especial el material de base. En la cinta se nos cuenta la historia de un sádico guerrero al que un buen día el demonio reclama su alma, momento en el que nuestro héroe reconducirá su espíritu hacia menesteres más discretos y pacíficos. Pero he aquí que estamos ante una producción eminentemente de acción centrada en un héroe, así que nuestro protagonista no tardará en volver a las armas pero, para variar, en honor a una buena causa. ¿A que no suena a nuevo? Pues eso.
Sin embargo, hay que reconocer que durante la mayor parte de su metraje la cinta mantiene la entereza, una producción que no deja de ser correcta y que por momentos hasta sorprende al plantearse ser algo más digna de lo que al final resulta. Y es que si nos valemos de la primera ley de la cinematografía universal la cinta se merece aprobar al menos porque entretiene. Lástima que en su tercio final pierda un poco el norte, deje de lado las dobleces de la narrativa que sujetan su metraje y se doblegue sin concesiones a una resolución de un directo a DVD con Steven Seagal de protagonista, y que desvirtúa algunos de los méritos que por el camino había tratado de vendernos como sustento dramático de lo que al final no es sino una producción simplonamente sin ambiciones.
Mejor de lo que parece, pero peor de lo que debiera ser, su visionado no causará ni frustración ni pasión. A recuperar momentos y escenas aisladas, como el interesante prólogo, y algunos apuntes por el camino que dotan de alguna doblez de más evitando así hablar de una producción típica del videoclub de la esquina. No es gran cosa, no, y este ‘Solomon Kane’ no esconde apenas nada nuevo bajo el sombrero, pero al menos distrae lo suficiente como para ser una buena alternativa a un mal partido de fútbol.
Nota:
5.7
por Juan Pairet Iglesias
Spoiler
- Hey papá, te daba por muerto. Por un lado te esperaba encontrar por aquí.....
- Sí hijo sí, he estado aquí pudriéndome en mi castillo 30 años. El demonio, que me la jugó.
- Ya veo ya...
- Por cierto, tienes un hermano muuuy chungo. Lo descubrirás tú mismo.
- Voy a por él que estoy muy loco y tengo la espada caliente. Así de paso mato 3 pajaros de un tiro.
- Pero antes mátame por favor, no puedo soportar más este calvario.
- Ok, no voy a perder esta oportunidad de matar a mi padre a bocajarro.
PUUM !!!
Yo también un 5, venga.
Le faltó algo para destacar, Sr.Solomon al regresar a las "armas" tal vez debió regresar a como era en los 10 primeros minutos de la película, y ahondar más en el problema de "vicio" que eso conlleva, incluso a perder su nuevo y rehabilitado "yo"
No es mala para pasar el rato, pero nada que quede en los recuerdos
Saludos!