'Napoleón' - Make Francia Great Again
La crítica de este 'Napoleón' se escribe más o menos sola teniendo en cuenta que su director, Sir Ridley Scott, es también el responsable de 'El reino de los cielos'. Para quien no lo pille de primeras, decir que esta última cuenta con dos versiones: La que se estrenó en salas de cine en 2005 y una versión extendida editada posteriormente en formato doméstico con unos 45 minutos más de metraje. Este 'Napoleón' dura más o menos lo mismo que aquella a su paso por los cines, siendo que el propio Scott ya ha anunciado que en Apple TV+ se estrenará una versión extendida que podría incluir hora y media de metraje adicional... o puede que incluso más.
Es cierto que sobre el papel deberíamos limitarnos a juzgar "sólo" los 147 minutos que se van a estrenar en cines, si bien es inevitable no pensar en dicha versión extendida... cuando la sensación es que le falta "algo" al igual que le faltaba "algo" a 'El reino de los cielos': Una buena película que adquirió su verdadera y notable dimensión cuando se la pudo ver... completa. Porque la auténtica película es la extendida, siendo su versión estrenada en cines una versión "abreviada". O recortada. Y esa es la misma sensación que transmite este 'Napoleón', la de ser una versión abreviada de una obra mucho mayor. Una buena versión... abreviada (o recortada).
Una versión muy entretenida y dinámica a la que sin embargo le falta templanza y profundidad, siendo en esencia una sucesión de acontecimientos que apenas tienen tiempo de respirar entre medias. De esta manera se da forma a una trepidante narrativa entrecortada, por supuesto de muy bella factura que al igual que hoy en día el gran cine épico norteamericano de los años 50 o 60, se ve con mucho más respeto antes que con cualquier tipo de emoción. Como si Scott diese por sentado que el público conoce la historia y fuera directo a los titulares, sin detenerse a dar más explicaciones que las justas y necesarias como para que el último de la clase no pierda el hilo.
Como sin ir más lejos pasaba también con 'Exodus: Dioses y reyes', una historia en la que también todos hablan en inglés y que al igual que la de Napoleón requiere, para darle verdadero volumen y dimensión, de un metraje más cercano a la miniserie (¿cómo se estrenará en Apple TV+?) que al de una película (como la que se ha estrenado en cines). Y es que en el caso de la del militar y político francés hablamos de una película que abarca toda su vida adulta, vaivenes que inevitablemente crean picos de desinterés a lo largo de todo el metraje en función del atractivo inherente a cada uno de estos instantes, a los que un tratamiento críptico y superficial no ayudan.
No al menos a los más dramáticos e íntimos, siendo que por supuesto las batallas o acciones más dinámicas cumplen con las exigencias de la gran pantalla. De sobra, y al nivel habitual de exquisita eficiencia que nos tiene acostumbrado el Sr. Scott. Ahora bien, este 'Napoléon' no sólo se centra en el militar y el estratega, lo que a la postre conlleva una irrelevancia relativa de todo cuanto acontece relacionado con personas de carne y hueso. Pase lo que pase, la vida sigue su curso y cada cambio de escena es como haber pasado página. Y así continuamente, sin que los eventos adquieran una dimensión que los hagan trascender de la pantalla o los libros de historia.
Piensen en 'El reino de los cielos', y más o menos, con suerte, estaremos ante un caso similar, con suerte, porque entonces la versión extendida será una obra tan notable y relevante como para ser lanzada en una edición especial de cuatro discos (que un servidor atesora en su casa como Golum el Anillo Único)... cosa que sin embargo no sucedió con 'Exodus: Dioses y reyes'. El tiempo dirá. De momento tendremos que conformarnos con esta muy entretenida versión de 'Napoleón' que bordea constantemente el notable en todos sus frentes, a la que el tiempo pondrá en las inmortales sobremesas de Semana Santa y que a decir verdad cumple lo que promete...
... aunque sea de la misma manera que un político electo asegura siempre haber cumplido con su programa electoral.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
¿Será el montaje extendido o el montaje de cines?
El de cines. Cuando saquen el extendido, si es que lo sacan, le darán mucho más bombo. Al fin y al cabo es una hora, hora y media más de metraje. Es casi otra película. O serie, si la deciden dividir en capítulos como ha pasado con 'Australia: Faraway Downs'.
Desde su estreno, "Napoleón" ha sido ampliamente reconocida con tres nominaciones a los Oscar en las categorías de Mejores Efectos Visuales, Mejor Diseño de Producción y Mejor Diseño de Vestuario. La película también recibió nominaciones a los Premios BAFTA a Mejor Película Británica del Año, Mejor Diseño de Vestuario, Mejor Maquillaje y Peluquería y Mejores Efectos Especiales.
"Napoleón: Director's Cut" está protagonizada por Joaquin Phoenix en el papel del emperador y líder militar francés. La película es una mirada original y personal a los orígenes de Napoleón y a su rápido y despiadado ascenso al trono de emperador, todo visto a través del prisma de su adictiva y tumultuosa relación con su esposa y amor verdadero, Josefina (Vanessa Kirby). La versión del director profundiza en la historia de Josefina y presenta más vestuarios extravagantes, nuevos y más espectaculares escenarios y la escena inédita de la Batalla de Marengo. El público también obtendrá más detalles sobre el final de Napoleón Bonaparte, desde su intento de asesinato hasta su fallida invasión de Rusia.
Una producción de Apple Studios junto con Scott Free Productions, "Napoleón: Director's Cut" está dirigida y producida por Ridley Scott, y producida por Kevin Walsh, Mark Huffam y Joaquin Phoenix, con Michael Pruss y Aidan Elliott como productores ejecutivos.
https://x.com/AppleTV/status/1829187471306793394
SINOPSIS:
Versión extendida de 'Napoleón' estrenada directamente en Apple TV+ que incluye 48 minutos de escenas adicionales.
CRÍTICA: Make the Movie Great
Creo que la mayoría estábamos más o menos de acuerdo: al 'Napoleón' de Ridley Scott estrenado en cines a finales del año pasado le faltaba "algo"... de igual modo que ya le faltaba "algo" también a la versión estrenada en salas de 'El reino de los cielos'. Una buena película que adquirió su verdadera y notable dimensión cuando al fin se la pudo ver... completa. Porque la auténtica película es la extendida, siendo su versión estrenada en cines una alternativa "abreviada". O más bien recortada, adulterada y/o malherida.
Casualidades o no, a ambas películas les faltaba lo mismo para constituirse en lo que finalmente se les ha permitido ser: los 50 minutos de metraje adicionales de sus respectivos "Director's Cut", una alusión obvia a lo que se supone que su principal responsable creativo tenía en mente cuando las rodó. Era de suponer, pero no está de más poder ratificarlo y redescubrir de esta manera lo que, ahora sí, es un filme notable que se entiende y disfruta más y mejor. Porque ahora se trata de un filme mejor armado y más orgánico y equilibrado.
La clave está en esto último, el equilibrio. El fin último del montaje: dotar a una película de una constitución adecuada y fluida, eficaz y fundamentada. Y eso es lo que hace el "Director's Cut" del 'Napoleón' de Ridley Scott, aportándole al habitual buen hacer del cineasta británico esa templanza, profundidad, encanto y en general oxígeno que echamos en falta en la "sucesión de acontecimientos" estrenada en cines. Es más completa, sólida y/o redonda, y también se hace más llevadera al dotar de estabilidad a su narrativa entrecortada.
Lo mismo que sucede por ejemplo con las versiones extendidas de 'Alien 3' o 'Watchmen', por citar dos de los casos más relevantes y admirados en la materia. Entiendo pero no quiero comprender por qué Apple decidió "capar" a este 'Napoleón' cuando poco antes ya había estrenado la versión -en teoría- íntegra de 'Los asesinos de la luna', de también 205 minutos (incluyendo 10 de créditos). Una duración por otro lado acorde a la (ya) indiscutible condición de ambos largometrajes de imperecederos clásicos modernos.
El cine, en especial el norteamericano, ha hecho carrera gracias a títulos tan robustos y sólidos que logran algo tan innegociable como a veces ingobernable cuando hablamos de tan grandes producciones: estar al servicio de una causa que -ahora sí- está siempre en el centro de toda inquietud. Sin prisa pero sin pausa durante tres breves horas y pico donde hay multitud de puntadas, sin hilo ninguna, tomándose su tiempo para exponer y definir una historia que avanza con firmeza bajo una engañosa apariencia de inexactitud.
Este sólido y firme 'Napoleón: Director's Cut' incluso se nos hace corto y nos deja con ganas de más, en el mismo buen sentido que 'Los asesinos de la luna', toda vez que, aunque fundamenta y define de manera más conveniente la relación entre sus dos protagonistas, apenas sigue teniendo tiempo para dimensionar a todos (y a todo) lo demás. Scott, al igual que Scorsese, no inventa nada ni tampoco se complica, ambos tan clásicos y de la vieja escuela que hasta nos resultan transgresores, aún no sé decir de qué manera.
Este 'Napoleón: Director's Cut' es, en resumen y también en la práctica, la versión del 'Napoleón' de Ridley Scott que echábamos en falta mientras la veíamos en el cine, una versión más sólida, completa, redonda y en resumen satisfactoria que si bien sigue sin poder abarcar todo lo que podría, sí abarca todo lo necesario para funcionar a las mil maravillas dentro de sus propios términos: los del gran, respetable y épico biopic histórico atemporal que combina eficacia, profundidad, espectáculo y agilidad con noble aplomo y prudente gallardía.
Nota: 8.0