Como antiguo aficionado y consumidor de cómics, cualquier película de superhéroes ejerce sobre mí una irresistible atracción difícil de superar. Iron Man no es una excepción.
Conozco vagamente los orígenes del personaje y su vida en los cómics, pero creo que podría decir sin equivocarme, que este hombre de hierro no se aleja demasiado a su homónimo en el cómic.
El punto fuerte de Iron Man, sin duda alguna es su sentido del humor, muy presente durante toda la cinta. Lecciones morales sobre la responsabilidad o qué hacer para sacar provecho a nuestras vidas, tan presentes en otras cintas como Spider-Man o la nueva saga de Batman de Nolan, aquí apenas si pasan de puntillas. Un tanto de lo mismo para las reflexiones sobre la industria armamentística, con las empresas Stark a la cabeza, y eso que la ocasión la pintaba en calva... Desde mi punto de vista todo un acierto, prima el entretenimiento por encima de todo.
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