'Black Mass (Estrictamente criminal)' - La mirada Acero Azul de Johnny Depp
¿Hay vida en 'Black Mass (Estrictamente criminal)' más allá de la mirada tuneada de Johnny Depp? Pues sí, bastante además, si bien la oportunidad que este clásico relato criminal inspirado en hechos reales le brinda al actor para reivindicarse ante cierto sector del público tras títulos tan popularmente fallidos y/o decepcionantes como 'Piratas del Caribe: En mareas misteriosas', 'Sombras tenebrosas', 'Tusk', 'Into the Woods', 'Transcendence' o 'Mortdecai' sin duda acapara de buenas a primeras casi todo el protagonismo que, sin ir más lejos, el propio cartel de la cinta le brinda.
Ya de forma consciente o inconsciente, lo que más destaca de 'Black Mass (Estrictamente criminal)' es Johnny Depp. Y a diferencia de lo que sucedía en algunos de sus últimos trabajos anteriormente mencionados, en el buen sentido. Por primera vez en mucho tiempo Depp deja aparcados tanto a la estrella como el traje de excéntrico guiñol para permitir que aflore el intérprete, a quién realmente logra "esconder" tras un personaje al que aborda con mesura, contención y bastante honestidad. Incluso a pesar de una caracterización algo tal vez excesiva que, como la de Steve Carell en 'Foxcatcher', tiende al despiste no necesariamente de la manera o en los momentos más oportunos.
Pero 'Black Mass (Estrictamente criminal)' cuenta con suficientes argumentos como para no necesitar "ocultarse" o "justificarse" a través del reflejo de dicho personaje, permitiendo que su presencia dote de fuerza a todo un conjunto que destaca, precisamente, como un buen conjunto que cumple y más que de sobra con el cometido que cabe esperar de un buen Made in Hollywood hecho en equipo. Sin ir más lejos, la práctica totalidad del reparto está a la altura de las circunstancias aunque no todos gocen de las mismas oportunidades para brillar como Joel Edgerton, el acertado contrapeso al personaje de Depp sin cuya presencia no habría película, al ser la relación entre ambos lo que le da cuerda a la misma.
Porque si algo define a 'Black Mass (Estrictamente criminal)' es la solidez a prueba de cualquier actividad delictiva en dónde la experiencia juega a su favor. Un solvente relato criminal con claros ecos a los años 70 que, a pesar de la posible sensación a déjà vu que pueda transmitir, y de no alcanzarle las fuerzas como para al igual que a James Gray sentarse a comer en la misma mesa de los referentes habituales (dónde estaría sentado sin duda Martin Scorsese), resulta sumamente disfrutable bajo la férrea batuta de Scott Cooper, quién al igual que J.C. Chandor con 'El año más violento' se confirma como un serio aspirante al ascenso a la Primera División estadounidense.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
Eso de que no sea Scorsese es una pamplina. ¿Quién es Dan Gilroy? Nadie, pero ahí está Nightcrawler, brutalérrima y con un gusto interesantísimo por los planos desde abajo en Gilroy.