'Marte (The Martian)' - Al mal tiempo, buena cara
Creo que no me equivoco al afirmar que 'Marte (The Martian)' es uno de los proyectos de Ridley Scott que más expectación está levantando, seguramente, desde la un tanto fallida 'Prometheus' (2012), suponiendo la vuelta al género estrella que supuso el camino para consolidarse como el gran director que es. Pero, cómo decía, se tarda mucho tiempo en ganarse la confianza y sólo un segundo en perderla, así que, posiblemente, desde aquel film de 2012 no haya habido un proyecto haya generado tanto interés como con la que aterriza ahora en los cines de nuestra tierra.
Una vez vista podemos asegurar que 'The Martian' es un film mucho más sólido que su anterior mencionado trabajo Sci-Fi, pero a su vez, no podemos confirmar que vaya a cumplir o gustar con todo el mundo, dado que su mejor virtud puede ser, a ojos de otro, su maldición. Y es que éste marciano, aún en un género tan aparentemente machacado y utilizado con tantas cintas habidas y por haber sobre el espacio, la exploración, y demás aventuras cósmicas, consigue tener un altísimo grado de personalidad que la convierte en una cinta única. De primeras a uno le puede sugerir cierta similitud con 'Gravity', por momentos con 'Interstellar' y por qué no, incluso en algún momento recordar a 'Prometheus', entre otras. Pero que no nos engañen las apariencias, ni nos confundan los comentarios o tuits que puedan resumirla como una mezcla de todas; 'The Martian' es un film único y radiante de personalidad, con lo que consecuentemente pueda llegar a representar éste término.
Ésta historia, basada en la novela homónima de Andy Weir, nos presenta la espeluznante situación en la que el astronauta -botánico ingeniero- Mark Watney (Matt Dammon), se encuentre abandonado, absolutamente sólo, aislado, sin comunicación en un planeta a 225 millones de kilómetros de nuestro hogar con una previsión de recursos y alimentos que no llegan para mucho más allá de los 100 días. Pero contra todo pronóstico, en lugar de convertirse en una dura, agobiante, y sobre todo, desesperante situación ante semejante panorama, éste se convierte en viaje personal, alta y extrañamente optimista, dónde lo último en lo que se piensa es en tirar la toalla. A partir de aquí, la película se convertirá en un gran despliegue, en una enorme misión en la que cada uno de los participantes tendrán que poner de su parte para intentar conseguir un un final lo más feliz posible. Con ésto, nos embarcaremos en cada una de las acciones y decisiones, dónde tanto del equipo en la tierra de la NASA -y demás organizaciones- así como el resto de equipo astronauta del compañero -desafortunadamente- abandonado en su larguísimo viaje de vuelta a casa, y por supuesto, el "marciano" solitario en busca de cada mínima posibilidad existente para dar un paso al frente cada día con optimismo y buen humor a ritmo de música disco de los 70.
Entonces, ¿Es 'The Martian' una comedia espacial? No. Aunque algo tenga. ¿Es una historia de supervivencia? No. Aunque algo tenga. ¿Un thriller? No. Aunque algo tenga. ¿Un drama? No... y así se podría formular prácticamente hasta el infinito. Extrañamente, lo que personalmente creo que mejor define la película es prácticamente el eslogan que veremos en la mayoría de los pósters, además, escrita y colocado de forma bastante evidente; TRAEDLE A CASA. Todo gira en torno a ésta idea, sin atarse necesariamente a un solo género o referencia, absolutamente directa, repleta de detalles que la convierten en una experiencia altamente creíble, sin la profunda metafísica que presentaba 'Interstellar', sin la intensidad agobiante y dramática en la que se vio atrapada Sandra Bullock (Ni el mismo despliegue visual), ni una -molona- americanada espacial al más puro estilo 'Armageddon', aunque si pueda contener esa esencia de toques de buen humor y sobre todo, una sorprendente buena cara y optimismo ante lo que podría ser la peor de las situaciones para cualquier terrestre... o marciano.
PD: ¡SPOILER! ¡Sean Bean no muere al final!
Por Alex Martín Fernández
@fenometrix
Creo que se me ha entendido, que no todas las películas que entrega llegan a ser ni siquiera dignas, sea de la culpa que sea.
Yo creo que todas son muy dignas. Las hay mejores o peores, pero todas son muy dignas. Lo que pasa es que da la sensación de que, una vez hechas 'Blade Runner' y 'Alien', no volverá a hacer ninguna gran película. Y puede ser cierta dicha sensación, pero a mí películas como 'El consejero' o la propia 'Marte' me parecen de lo más reivindicables.
El personaje principal interpretado por Matt Damon, Mark, tiene toda la culpa. Él no solo se toma con humor la desgracia que le ha ocurrido, sino que además, contagia a todos los demás de ese peculiar sentido del humor. Aunque es cierto que este tono desenfadado nos quita casi todo el drama de la supervivencia planetaria, es lo que la diferencia de otras películas sci-fi por el estilo. Sin ese tono, la película habría sido una más de Scott, de eso no me cabe la menor duda. De esta forma pasa por ser, como mínimo, una curiosidad dentro de su filmografía. Y en mi caso, una de las más memorables (teniendo en cuenta que es un director que no está entre mis favoritos).
Además de la gran labor de Scott detrás de las cámaras, la película cuenta con un reparto en el que todos cumplen y hacen que todo sea más natural, aunque el único que destaque sea un gran Matt Damon. El guión, a parte de tener ese rollo "feel-good", también nos explica todo con términos más técnicos de lo habitual y consigue que el espectador se entere de todo sin tratarlo como a un idiota, como ocurriese en 'Interstellar'. Creo que plasma muy bien lo que ocurriría si esto llega a ser algún día una historia real. Las partes en la Tierra, son muy creíbles.
Spoiler
Por otro lado, la banda sonora es genial, tanto la instrumental como los grandes temas que suenan. Me quedo con el Starman, de David Bowie, en una de las mejores escenas del film. El final, en primera instancia me decepcionó un poco. Esperaba algo diferente, más dificultades. Pero lo cierto es que la esencia de la película es otra, y tenía que acabar tal y como lo hizo. Fantástico me parece:
Spoiler
Un 7. Quizá la falta de ambición y esa ENORME transición final (un poco forzada y muy bruta) sea lo único que me eche para atrás a la hora de valorarla más.