No pudo la crisis financiera que atraviesa el mercado mundial frenar el consumismo en algunos lugares de diversión y esparcimiento en muchos lugares del país. Sin embargo, es el tan mencionado brote de influenza o gripe de carácter porcina, la que ha logrado mermar a lo ancho y largo del país, las actividades de entretenimientos masivos en lugares públicos y privados. De esta manera, conciertos, premieres, inauguraciones, exhibiciones, ferias, presentaciones y demás, han sido cancelados, y varios establecimientos permanecen y permanecerán cerrados, hasta nuevo aviso. Así, encontramos discotecas, bares, auditorios, escuelas, estadios de futbol, catedrales, restaurantes, y cines, con lo que disminuye seriamente el consumismo de varias urbes a nivel nacional debido a la alerta sanitaria de la que México es hoy día, noticia en el mundo.

Y aunque muchos establecimientos siguen abriendo sus puertas como normalmente se ha hecho, en lugares como Ciudad de México y Área Metropólitana, Aguascalientes, San Luis Potosí, Chiapas, Querétaro, Estado de México, entre otros; muchos ya han sido cerrados al público para evitar el contagio masivo de este tipo de virus que es muy resistente. Entre los establecimientos, se han visto vulneradas las filas para entrar al cine por ejemplo. A petición expresa de varios ayuntamientos ante el brote de influenza Cinemex fue la primera cadena de cines en cerrar uno de sus complejos cinematográficos. Después, seguirían los anuncios de Cinépolis, Cinemark y otras cadenas, haciendo pública la decisión de cerrar todas sus salas hasta nuevo aviso. Cinemex se sumó entonces con más salas.

Ahora bien, y aunque visto por el lado de la responsabilidad de las cadenas, y la petición de las autoridades, lo cierto es que era esto ya una decisión casi obligada si se tomaba en cuenta que además, su afluencia de espectadores había bajado considerablemente tras el brote de influenza, ahuyentando de las salas a los cine espectadores. Por su parte, la Cineteca Nacional anunció la suspensión de servicios hasta que las autoridades sugieran otra cosa. Por ejemplo, algunos de los eventos de carácter cinematográfico que han sido ya sea cancelados o pospuestos por este brote de influenza, son el evento de la Asociación de Periodistas Cinematográficos de México, A.C. (PECIME), las Diosas de Plata que habría de realizarse en el Centro Cultural Telmex este martes 28 de abril, misma que ante las medidas tomadas por el Gobierno Federal y local, decidieron anular, esperando fecha para reprogramar. También se confirma, que el actor Hugh Jackman no estará presente para el estreno de X-Men Orígenes: Wolverine (X-Men origins: Wolverine, EUA-2009) en la Ciudad de México. Esto lo dio a conocer la distribuidora 20th Century Fox, quienes oficializarán la suspensión de las actividades del actor. De igual manera puede que el estreno del filme que estaba programado para el 30 de abril, será aplazado por lo menos diez días, desde luego que con fines comerciales esta última decisión.

Entre que la situación se controla, es un momento para poder explorar esa dinámica efectiva vía cinematografía, que ha tenido a bien establecer temas delineados en cuanto a lo que son epidemias y pandemias, y hasta algunas enfermedades que se llegan a complicar, y pues aunque en el cine abundan cintas dedicadas a ello, vamos a recordar ejemplos recientes de algunas producciones que exploran tématicas como estas; cintas que desde luego aún se encuentran frescos en la memoria de los cinéfilos, que si nos remontamos a más, encontraríamos para escoger.

Comencemos con Exterminio (28 days later, Ing-2002) de Danny Boyle, que trata sobre un poderoso virus que se desata en Inglaterra y en menos de un mes provoca una epidemia que deja miles de personas infectadas que los convierte en una especie de zombies. Esta cinta retrata las consecuencias fatales de una epidemia, que logra mermar la población drásticamente. En la misma vertiente encontramos Soy leyenda (I am legend, EUA-2007), de Francis Lawrence, donde un brillante científico, no ha podido impedir la expansión de un terrible virus imparable, incurable y creado por el hombre. Y aunque este hombre es de alguna manera inmune al virus; no está solo, víctimas mutantes de la plaga merodean y están al acecho.

El síndrome de ébola (Yi boh laai beng duk, HoKo-1996) de Herman Yau, es ubicada en África. Allí un psicótico se contagia del peligroso virus del ébola, luego de tener relaciones con una señorita nativa. Ahora él está contagiado, y quienes corren peligro ahora, son quienes viven en los EUA, hacia donde se dirige con el afán de diseminar su enfermedad. Por ejemplo, Ceguera (Blindness, Can/Bra/Jap-2008) de Fernando Meirelles, trata sobre una extraña epidemia que provoca ceguera en toda la población, a excepción de una mujer que se convertirá en los ojos de un grupo confinado de la sociedad, toda vez que la epidemia ya se ha extendido demasiado y se desconocen las causas de la misma epidemia. Niños del hombre (Children of men, Jap/Ing/EUA-2006) de Alfonso Cuarón, no habla precisamente de una epidemia, pero si de un futuro, en el cual hay una inexplicable esterilización que provoca que las mujeres no puedan procrear; hasta que sucede un extraño caso de una mujer embarazada, lo que podría significar una nueva esperanza en un futuro incierto y que parece destinado a la ruina absoluta.

Al otro lado del mundo (The painted veil , Chin/EUA-2006) de John Curran donde luego de descubrir la infidelidad de su esposa, un bacteriólogo inglés se marcha a una aldea en Shanghai, China, donde estudia y trata de luchar contra una epidemia de cólera que surge en un ámbito de pobreza extrema y de falta constante de previsión sanitaria. De esta misma enfermedad que ya ha sido erradicada, podemos también mencionar El amor en tiempos del cólera (Love in the time of cholera, EUA-2008) de Mike Newell donde, tras un brote en las costas caribeñas de Colombia, los síntomas del amor se confunden con los de esta enfermedad que dejo miles de muertos décadas atrás.

Son solo pequeños ejemplos de una lista cinematográfica que se antoja enorme; pero sea varicela, viruela, sida, septicemia, sarampión, pestes, fiebres, influenza, ébola, difteria, influenza, cólera y cantidad diferentes de nombres, lo cierto es que como sociedad no debemos alarmarnos y si atender a las indicaciones que dejan de lado las alarmas y aludir al cuidado colectivo. Al igual que muchas películas que dejan mucho que desear, es probable olvidar este mal trago que se está viviendo, pues como sociedad ha de ser superado, toda vez que el pánico no estalle, y sí esperemos ansiosos recapitular estos eventos pero sólo en la pantalla grande.