Día 4: El mejor lunes del año
Inicio de semana. Para muchos una cruz, para otros un alivio el volver a la rutina, y para todo el ambiente del SEFF, gloria bendita. A priori, mirando el calendario de proyecciones, parece uno de los días más flojos del festival, pero ni por asomo lo iba a ser, a pesar de desechar las opciones que presentaba la mañana.
Última oportunidad para ver 'Mustang' y la sala 3 así lo expresa. Lleno absoluto para, 1º, presenciar la proyección de la película (ópera prima además) francesa dirigida por Deniz Gamze Ergüven y, 2º, para aplaudirla en una sonora ovación sin vacilar un segundo, la cual la convierte en, hasta el momento, LA película de este festival. No se puede enamorar más narrando una historia de opresión juvenil en una sociedad represiva y retrógrada.
A través de la pequeña Lale, la más chica de 5 jóvenes hermanas, se denuncia con rigor pero sin dureza a la Turquía más anclada en un ideal machista y totalitario. La película aprovecha todos los recursos de los que dispone, incluida la música, obra de Warren Ellis (colaborador de Nick Cave en películas de innegable calidad), que rezuma libertad y ansia de vida. No tiene fallos ni peros que poner, solo disfrute y amor por un film inolvidable que a buen seguro seguirá asomando por crónicas, críticas y análisis hasta el final de la temporada de premios.
Hora y media después, y todavía con el adorable final de 'Mustang' en la cabeza, toca viajar a Irlanda para ver una historia que ya se ha mostrado antes pero que seguramente no con la calidez con la que se relata 'You’re Ugly Too'. La película de Mark Noonan, otra ópera prima (la única referencia de este director es un corto en 2011), funciona por la química casi familiar entre tío, Aidan Gillen (todos sabéis quién es, bribones), y sobrina, Lauren Kinsella, y porque gracias a su simpleza, embriaga.
Sin embargo, una torpe resolución de un conflicto amoroso, que queda sin respuesta coherente, y un final que duele en el alma por propiciar un cierre dulce e idealizado, acaban por arrugar el resultado de una cinta que es buena, linda y simpática, que se narra con cariño y transcurre esperanzadora, pero que tiene parches que apagan esa sonrisa fija que se va formando con la historia.
El día, comandado ya por la noche que se cierne sobre la zona de cine del C.C Nervión Plaza, está sucediéndose entre aplausos, sonrisas y emociones, y Stephane Brizé, con 'La loi du marché', ponía a prueba todo este cúmulo de positividad a eso de las 22:30 en la sala 1. No estaba muy por la labor el público, pues a la sala le faltaba un poco para conseguir la media entrada, pero si la intención de Brizé era reforzar ese sentimiento, lo ha conseguido y con creces.
La manera en la que su película golpea en el espectador es impresionante. 'La loi du marché' es un retrato realista (y muy necesario) de cómo la crisis y sus efectos tambalean la entereza de un hombre al que da vida Vincent Lindon, que regala una cátedra de actuación al gremio. La monitorización de su personaje incrementa una tensión que se palpa y se percibe de manera constante. Como hicieron los Dardenne con Marion Cotillard en 'Dos días, una noche', Brizé se obsesiona con el personaje de Thierry para dramatizar una realidad agotadora y angustiante de un modo sublime.
Este lunes ha brindado las dos mejores películas del festival hasta el día de hoy. Una pura alma, otra pura humanidad. Una denuncia con emotividad, y otra con contención. Y es lunes, el peor día de la semana para medio mundo y el que más sentimientos negativos aúna. ¿Cómo se puede odiar un lunes de SEFF?
That´s what I say.
Por Jesús Sánchez Aguilar
@JesAg_
1. Las 1001 noches (Gomes)
2. Suite armoricaine (Breton)
3. Lohnbuchalter Kremke (Harder)
4. L'étrangleur (Vecchiali)
5. Wonder Boy (Vecchiali)
6. In the Shadow of Women (Garrel)
7. John From (Nicolau)
8. One Floor Below (Muntean)
9. La academia de las musas (Guerín)
10. Mon amie Victoria (Civeyrac)
Eso tiene muchísimo más de bueno que de malo, por no decir nada de lo último.