'The Creator' - Cuando la belleza está en el exterior
La cuarta película de Gareth Edwards me provoca sentimientos fuertemente encontrados. Por un lado me encanta e incluso fascina su elaborado y poderoso envoltorio visual, pero por el otro me molesta e incluso desagrada su forzada y torpe deriva argumental. La comparación con Neill Blomkamp le va que ni pintado, con 'Elysium' como inevitable hermano de otra madre en la que también una estación espacial marcaba el inevitable rumbo de colisión.
Es como si Edwards quisiera hacer una película de James Cameron, pero para ello contase con la mitad del talento, del guión, del tiempo y de los recursos necesarios para poder rematar la jugada de una manera contundente e incontestable. Como le suele ocurrir a Blomkamp, la técnica está muy por encima de la letra, apoyada en un ideario simplón y reduccionista que responde a muy pocas preguntas, al tiempo que plantea demasiadas dudas.
Es un matrimonio de conveniencia, en el que lo estimulante de su incuestionable poderío audiovisual choca de frente con una forzada imposición populista y relativista que sume su inercia en lo mecánico y artificioso; en especial, durante un tercer acto torpe, atropellado y poco emocionante. Es como el propio John David Washington, que puede dar el pego como persona pero no tanto como actor. Y como película 'The Creator' se resiente de y por ello.
Por más que sea una voluntariosa y esforzada película de ciencia ficción ORIGINAL (en 2D) que en cualquier caso, se merece aprecio y respeto. En especial como experiencia a ser disfrutada, a ser posible, en pantalla grande, donde su escaleta tiende a verse beneficiada al alza. Y es que como ya demostró en todos sus trabajos anteriores, Edwards sabe cómo hacer para que a nivel formal, cualquier inversión respire como una ficción realista y palpable.
Así, 'The Creator' es una buena iniciativa lastrada por un esquelético y simplista andamiaje que limita el alcance de lo que bajo su estupenda y a la vez sobria y modesta apariencia es un autómata. Igual que la humanidad de un buen intérprete, también le falta un guión que no se deje impresionar y además de atender sus necesidades básicas, impulse su narrativa por encima del populismo demagogo y pusilánime planteada por una IA sin apenas imaginación.
Ni por asomo, la misma de aquellos que se han encargado de su muy convincente, estimulante y cercana apariencia visual.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
No es necesario que las películas inventen algo nuevo, se han hecho muchas que recuerdan a cosas ya hechas pero funcionan e incluso aportan frescura. Pero 'The Creator' carece de personalidad propia o al menos yo no conecté con ella. Parece todo el rato un popurrí bastante predecible de trozos y sucesos de otras películas del género. 'Yo Robot', 'Avatar', 'Distrito9' y un largo etc, además de la sensación de saltar de suceso a suceso de forma excesivamente rápida, sin tomarse tiempo y mimo para casi nada. Incluso sus giros o revelaciones son narrados con pereza, sin darles importancia. Y supuestamente su historia te debe emocionar, pero a mi me dejó frío. El inexistente carisma del protagonista (a camino entre una versión de su padre y de Will Smith de Hacendado) tampoco ayuda. E incluso hay momentos de meterle "chistacos" que en su gran mayoría, no funcionan.
Gareth Edwards hace un corta y pega de vestidos de otros pero se le ven las costuras. Aún así, es entretenida y más que disfrutable para la vista. Además, su cierre me parece muy acertado. Y al menos, por una vez, los americanos son los malos.
Nota: 5'5
Gareth Edwards regresa ocho años después a la dirección de un largometraje con 'The Creator', un filme en el que las expectativas en general diría que estaban no por las nubes, aunque sí lo suficientemente elevadas para ser una de las películas a seguir durante este año 2023 que ya atraviesa sus últimos coletazos.
Ciertamente, el mundo desplegado por Edwards técnicamente no le pondría ningún pero. Los paisajes urbanos y montañosos más la unión de persona con partes cibernéticas están muy conseguidas. Todo aquello de los simulantes (híbrido entre humano y robot) me parece un gran concepto, más que como idea, que ya se ha explorado previamente, como ejecución final con un acabado impecable. Además, no abusa de megalópolis hipertecnológicas, dando también espacio a paisajes más naturales y alejados de la civilización, lo cual se agradece porque no abusa del cliché de población urbana masificada viviendo en condiciones deprimentes que ya llevó a la categoría de excelencia la grandísima 'Blade Runner'.
Mientras que en campos técnicos y visuales hay poco que decir en contra, es en su término narrativo donde más peros hay que poner, porque esta historia de "persona se encariña con desconocido/conocido/familiar" ya se ha hecho antes y con más gancho. El mismo padre del protagonista (John David Washington) rodó un filme del estilo con más alma y acción bien rodada como es 'El fuego de la venganza' donde uno se implicaba con la historia de los personajes de Denzel Washington y Dakota Fanning, mientras que en este largometraje protagonizado por su hijo se puede empatizar si eso con la niña que trae de cabeza a casi todo el mundo, interpretada eficazmente por Madeleine Yuna Voyles, a quien le auguro un gran futuro si sigue en este nivel. Diría que aquí podría ser la mejor actriz y en general del reparto.
Los temas de fondo de la inteligencia artificial y la resistencia de Occidente ante la cada vez más pujante Oriente (llamado aquí Nueva Asia) son temas bastante atractivos de tratar, mas apostar buena parte del filme en un relato de protector y protegida que no es precisamente un invento de ahora y que se plasmó en otras obras de mejor forma es un error que lastra la valoración final. Aún así, es una cinta del que no desanimaría el darle la oportunidad, pues tiene aciertos más que evidentes.
6
Le doy un 6.
La película, protagonizada por John David Washington, Gemma Chan, Ken Watanabe, Sturgill Simpson, la debutante Madeleine Yuna Voyles y Allison Janney, está ambientada en medio de una futura guerra entre la raza humana y las fuerzas de la inteligencia artificial. Joshua (Washington), un curtido ex agente de las fuerzas especiales que sufre por la desaparición de su esposa (Chan), es reclutado para cazar y matar al Creador, el arquitecto de IA avanzada que ha desarrollado un arma misteriosa con el poder de poner fin a la guerra, e incluso a toda la humanidad. Joshua y su equipo de agentes de élite viajan a través de las líneas enemigas hasta el corazón oscuro del territorio ocupado por la IA. Una vez allí, descubren que el arma que acabará con el mundo y que les han ordenado destruir es una IA que ha adoptado la forma de un niño pequeño.
La película está dirigida por Gareth Edwards, con guion de Gareth Edwards y Chris Weitz a partir de una historia de Gareth Edwards. Los productores son Gareth Edwards, p.g.a., Kiri Hart, Jim Spencer, p.g.a. y Arnon Milchan. Los productores ejecutivos son Yariv Milchan, Michael Schaefer, Natalie Lehmann, Nick Meyer y Zev Foreman.
, superflua, vaga, vamos como el agua , incolora, inodora e insipida
4/10