'The Boogeyman' - Que viene el hombre del saco
Se nota que 'The Boogeyman' está inspirada en un relato corto. A la película le falta "chicha" y se le acaban haciendo algo largos sus 90 minutos de duración, siendo que después de un inicio de lo más estimulante y prometedor acaba pidiendo la hora. Es sobre todo un problema de guión, excesivamente estándar, aunque el director Rob Savage hace lo que puede para compensar unas carencias que se hacen evidentes en su tercio final. En el momento de la verdad.
Hasta entonces, Savage juega muy bien con la puesta en escena, sugiriendo con elegancia y sutileza la presencia de "un hombre del saco" al que intuimos en lugar de ver. De esta manera la película nos regala varios momentos realmente inquietantes. Pero, a pesar de sus evidentes pretensiones, a pesar de estos logrados momentos, la película no logra romper la barrera del artificio y armar un discurso dramático que respalde con emociones su retahíla de sustos finales.
A 'The Boogeyman' le falta el refinamiento de otras películas similares como 'Smile', no necesariamente mejores pero sí más redondas, concluyentes y/o efectivas. Su clímax carece de la fuerza necesaria para calar e impulsar una historia que se siente una excusa demasiado oportuna, convirtiéndose en una chirriante sucesión de escenas resultonas pero fortuitas que después de todo, aunque le guste aparentar lo contrario, no tienen gran cosa que compartir.
Al final sus méritos se diluyen y acaban haciéndose valer menos de lo esperado, siendo que la sensación es la de un filme tan apreciable como vacío. Apreciable, y también admirable en su apuesta por el miedo antes que por los sustos; pero, a su vez, esta relativa y pequeña ambición amagan con darle una consistencia de la que carece. Así, nos queda un filme que, aunque disfrutable y más que respetable, se antoja demasiado anecdótico para causar un revuelo perdurable.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex