'La seducción' - Género minúsculo
'La seducción' de Sofia Coppola se resume en tres cosas: fotografía, vestuario e iluminación. Básica o no tan básicamente, pero sí muy ricamente. Pocas bromas sobre la elegancia preciosista de su puesta en escena. La misma que tan bien la definen como a su vez, tan mal termina por hablar de ella. Al fin y al cabo no deja de ser el envoltorio, y un envoltorio, por más que sea bonito, no deja de ser solo eso, un envoltorio.
'La seducción' de Sofia Coppola vendría a ser, a ojos de quién esto suscribe, como una película de Blumhouse rodada de forma presuntuosa. Y también, con una elegancia preciosista que marca unas distancias para consigo mismo que juegan a la contra de su aparente ambición. Concretamente, me viene a la cabeza 'Déjame salir', película a la que un oportuno componente racial aupó allí hasta dónde sus otros valores no alcanzaban ni a mirar.
'La seducción' de Sofia Coppola acaba sin voz dentro de su propio discurso, bajo la parsimonia de un desarrollo anémico que no extrae inquietud, ni perversión de su coqueteo genérico. Un círculo vicioso, formal e incluso espiritual que la arremolinan sobre sí misma decayendo, con el paso de los minutos, en una indiferencia rutinaria a la que sólo dignifica la innata elegancia preciosista de su directora, así como el talante de su solvente reparto.
'La seducción' de Sofia Coppola, a la postre, te deja frío. A pesar de una caligrafía objetivamente impecable, o por culpa de una presencia tan impoluta como a la vez ingenua que carece de cualquier tipo de contundencia. Bonito, pero frío. Bonito, pero apagado. Bonito, pero superficial. Bonito, pero indoloro. Y fue bonito mientras duro, que para cuando desenvolvió el presente se encontró que en realidad desenvolverlo era el presente.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
Yo debería, pero la de Sofia Coppola ha hecho que me de mucha pereza.
Con títulos reconocidos como Las vírgenes suicidas y Lost in Translation , se ha convertido este 2017 en la segunda fémina en ganar la Palma de Oro a mejor dirección en Venecia por la cinta The.Beguiled
El filme es un remake de "El seductor", dirigida por Don Siegel en 1971.
Año 1864. Durante la guerra civil norteamericana, la tranquilidad de una escuela femenina de Virginia donde sólo viven mujeres se ve alterada con la llegada de un apuesto soldado confederado herido.
Para aquellos que esperaban una versión pasional, carnal y gráfica , se sentirán defraudados , pues la propuesta se aleja de la crudeza de Siegel.
La directora sustituye lo perverso por la sutileza de imágenes hermosas , la estética de The.Beguiled está respaldada por una fotografía elegante y la magistral dirección artística.
Es una película contemplativa más que emotiva, no hay fotogramas con aspectos de gore , a ratos tengo la sensación de estar frente a una pintura del barroco.
The.Beguiled ha sido clasificada de fría, incluso de inferior a la original , a mi modo de ver simplemente es diferente y respeta la trama aun cuando cambia algunos detalles , entre ellos el recorte del metraje.
El discurso de Sofía Coppola generalmente se ha inclinado a ser feminista y ha quedado claro que sus trabajos sobresalen por la excelencia en el vestuario, la ambientación y el movimiento de cámara, recordemos María Antonieta
En las actuaciones actores muy conocidos y algunos que repiten con la directora.
Colin Farrell, asume el rol que interpretara Clint Eastwood y consigue un personaje más frágil , quizás porque como dijera en una entrevista esta película parte de la mirada de las protagonistas.
Nicole Kidman, en un papel en los que hace tiempo no la veíamos y que la reafirma como una actriz versátil, soberbia
Kirsten Dunst y Elle Fanning también demuestran sus potencialidades actorales
The.Beguiled es una clase de cine y aunque puramente técnica sobresale por la imponente dirección y puesta en escena , además de la calidad de su elenco
Le doy un 6.