Ése era el “grito de guerra” que durante ocho años utilizó Harvey Milk en las manifestaciones por la defensa de la comunidad gay y la libertad. Y eso es en lo que se basa esta película para llegar al público.
Siempre que una película trata temas de libertad, de exclusión y de lucha por la dignidad del hombre, nos toca muy de lleno porque no nos resulta extraño. Hoy en día, en pleno siglo XXI, seguimos teniendo los mismos problemas, por eso merece la pena ver películas como estas, a parte de por más cosas.
Desde los primeros tres minutos de la película, director y guionista, tenían claro lo que querían mostrar y lo que el público iba a ver: la comunidad gay.
“Y si no te gusta, te sales de la sala, pero si te quedas verás una gran historia de valentía”. A partir de ahí empieza, de una forma rápida, a mostrarnos como fue el principio de la lucha de Harvey Milk por juntar a una sociedad que no era aceptada y contraatacar contra las injusticias de un gobierno que debía favorecer al individuo y no maltratarlo. A pesar de las amenazas y los insultos, luchó incansablemente por lo que creía justo. Mezclando imágenes reales de archivo e imágenes de la película, se nos presenta una historia que va cobrando más verosimilitud. Por eso creo que las imágenes de archivo es algo muy acertado.
La segunda parte, desde el momento en que pierde por última vez las elecciones, empieza a ser más lento porque lo que interesa ahora es que comprendas cómo fue la lucha y la vida política que tuvo que hacer Harvey Milk renunciando a parte de su vida privada. Se ve cómo busca apoyos, cómo se ayuda de la prensa, cómo convence a la gente de la calle…
La ambientación de la película está muy bien, así como la interpretación de Sean Penn que me parece que muestra bastante bien cuándo está contento, cuándo está cansado, sus ganas de luchar y de no perder la ilusión por lo que hace. Está a gusto en el papel y se nota desde el momento en que aceptó el papel sin perder tiempo. James Franco también es creíble en su papel de compañero de Harvey Milk y una gran ayuda para él. Así como todos los ayudantes que tuvo a lo largo de su carrera y que han ayudado a hacer la película porque todavía recuerdan y luchan por lo que luchaba Harvey Milk.
Yo siempre he creído que las películas sirven para que lleguen al público, emocionen, alegren…pero sobre todo, para aprender. Con películas como “Mi nombre es Harvey Milk”, aprendemos algo más de la historia del hombre y conocemos a personas que hicieron grandes cosas por cambiar la injusticia que los hombres nos hacemos entre nosotros.
No es una gran superproducción porque no le interesa. Sólo quiere mostrarnos que hizo Harvey Milk durante sus últimos ochos años de vida, ante de que le asesinaran.
Por todo esto, recomiendo que la gente vea la película, ya sea en casa o en el cine. Pero que la vean y aprendan.
por Krimhild
(+ Críticas...)
Lo triste del caso es que un gay,un negro,un discapacitado...sean considerados 'minorías'.¿Qué tienen ellos que yo no tenga?,¿qué tengo yo que ellos no tengan?.
No soy fue un político gay sino uno de los pioneros de la lucha por los derechos de los homosexuales. Este film es escupirle en toda la cara a la ignorancia, a aquellos que prejuzgan, condenan o cometen barbaridades contra alguien simplemente por ser distinto. No es solo un film sobre el "movimiento homosexual" , es un grito por la lucha de los derechos fundamentales, por todas las minorías sociales y por la lógica, que aunque pueda parecer simple muchas veces no es la que predomina. Y quizá aunque la mayoría nos escandalicemos con los sucesos narrados, la lástima esque muchas cosas se han logrado pero muchas otras siguen igual o similares.
Debería ser un film de visionado obligado es institutos y servir de enseñanza para aprender sobre derechos humanos. Lo malo es que los que más necesiten ver este film o sus prejuicios no les permitirán verlo o saldrán asqueados del mismo y sin haber aprendido nada aunque igual alguno sale asqueado de si mismo y con que solo en uno de los que lo vea cause ese efecto, yo si fuera el director, estaría satisfecho. Me ha quedado un poco rollo "miting político"
Destacar como no, el gran papel de Sean Penn, que le valió para mi un merecidísimo Oscar.
Pero vamos, que la disfruté, y Sean Penn como siempre, genial. Aunque para mi, el Oscar se lo mereció más por Yo Soy Sam que por esto.
Nota: 6'75/10
Por cierto, merecidísimo Oscar para Sean Penn, en la versión original se nota un huevo que hace un papelón. Mención especial también para Brolin, que está sensacional. Ah y gran final, desde que pasa "eso" hasta que se acaba la cinta es fantástico todo, incluyendo el cosquilleo que te recorre al final y que demuestra que has visto una muy buena película.
Un 7