En 1972, Mari y Phylis quieren celebrar el cumpleaños número 17 de la misma Mari, asistiendo a un concierto de un grupo musical; pero antes de ello, serán raptadas por un trío de desquiciados, quienes terminan violándolas y matándolas de una manera salvaje. Después de abandonar los cuerpos se dirigen a una casa cercana, donde después de unos momentos los dueños tomarán venganza contra ellos. Sin saberlo se han metido a la casa de Mari. Y los padres están enojados.

Ese es el argumento de 'La Última Casa a la Izquierda (The Last House on the Left)', del año 72, cinta que le dio al director Wes Craven despunte en el género de terror junto con otros títulos como 'Las Colinas Tienen Ojos (The Hills Have Eyes)', en cintas de terror que tienen como indicador común, la masacre de persona a persona. Y es que Freddy Krueger hacía lo propio, pero era un terror de carácter muy fantástico. El pertenecer a inicios de la década de los 70’s, el estilo de la misma cinta nos pone de frente algo muy parecido a la serie B; donde las interpretaciones son bastante pobres, y el aspecto técnico poco desarrollado. Tristemente la historia era fuera de lo realmente salvaje, aburrida en muchos tiempos muertos; y para la época era muy visual. Con un título un poco más decadente que otro al pasar de los años, de cualquier manera Craven era y es ya un referente en el llamado terror moderno a pesar de sus múltiples fracasos cinematográficos.

Por qué hacer entonces un remake de una cinta que no es para nada su mejor trabajo, y que no es el primer título venido a mente de esa década. Nunca entenderemos lo que mueve la mente de los productores, pero tenemos la respuesta vía express. Primero que nada, urdir la cinta y su trama en los tiempos actuales, con un público más abierto y acostumbrado al terror excesivo, puede traer buenos resultados, y es una muy buena puesta al día. La segunda, es que el mismo Craven produce.

Con eso por delante, y aunque Craven no dirige, se puede esperar que se quite la espinita de algunos aspectos en los que se pudo haber quedado limitado en 1972. 'La Venganza de la Casa del Lago (The Last House on the Left, EUA-2009)' no nos aleja mucho de la historia original; en esta ocasión la noche en que llegan a una casa a orillas de un remoto lago, Mari (Sara Paxton) y su amiga son secuestradas por un preso fugado de la cárcel y su banda. Ésta abandona a Mari creyendo que está muerta y sabe que su única posibilidad es llegar hasta su padre John (Tony Goldwyn) y su madre Emma (Monica Potter). Por mala suerte, los secuestradores se refugian en el único lugar donde podría estar segura. Cuando sus padres se enteran del horror por el que pasó su hija, harán que los tres delincuentes maldigan el día en que llegaron allí.

Ahora bien, la cinta no es novedosa así ya de inicio. No podemos esperar más de lo que podemos imaginar; pero hay una gran sorpresa en la reelaboración del filme, y es que Carl Ellsworth elabora un guión bastante sutil en la línea de las emociones, y en como esta se ve rota por las misma emociones dañinas cuando la venganza es el común denominador; y también pone a prueba la decantación o no de la misma a través de una justicia personal justificada, pero que no deja de ser bastante arriesgada como propuesta en una cinta que se atreve a mostrar más de lo que debería. Para lo anterior, se cuenta con Sara Paxton con una medida actuación, pero sin duda alguna quienes destacan son Goldwyn y Potter, haciéndose creíbles en una situación extrema que fácilmente pudo llegar a lo ridículo, y que sin embargo aunque no es explotado, si es convincente.

Dennis Iliadis como director logra entonces salir airoso evitando hasta el discurso de las comparaciones, puesto que por donde se le vea logra mejores adeptos que la original, provocando a lo largo del filme emociones y sensaciones que van a arrastrando la inquietud de los acontecimientos por varios niveles a veces molestos, a veces aún más molestos. Un remake saturado de tanta venganza que se hace hartamente exquisita. Pero sólo en relación con la anterior.

por ÁngelNeg