'El bosque de los suicidios' - Cuando los árboles no dejan ver el bosque
'El bosque de los suicidios' es un thriller sobrenatural que se desarrolla en el legendario bosque de Aokigahara, a los pies del Monte Fuji, en Japón. Una joven americana, Sara, acude en busca de su hermana gemela, desparecida misteriosamente. A pesar de todas las advertencias de “mantenerse en el sendero”, Sara se interna en el bosque decidida a descubrir la verdad sobre el destino que ha corrido su hermana, pero al hacerlo se enfrentará a las almas atormentadas de aquellos que han muerto en este lugar y que asedian a todo aquel que deambule en el bosque...
"Todo el mundo entra aquí buscando una salida" es la frase con la que se vende en España 'El bosque de los suicidios'. Un thriller de terror que se vale de una frase premonitoria... en el sentido de que se trata de un thriller de terror apadrinado en pleno siglo XXI, de aquellos que confunden "miedo" con "susto". O peor, de los que confunden el fin último de un thriller de terror supeditado, finalmente, al susto de turno que, por más que pueda colar en algún momento, no pasa de ser un susto "de un momento". Una excusa antes que una verdadera historia.
Como saltar a la comba. Y como en tantas ocasiones es una lástima, especialmente por la genuina capacidad evocadora de un lugar como Aokigahara que la cinta logra captar en algunos instantes privilegiados. Y también engañosos, por qué no decirlo... porque igualmente, como en tantas ocasiones, la cinta se "mantiene dentro de un sendero prometedor" durante sus compases iniciales para prácticamente, no empezar a perderse hasta bien entrado un metraje que, para que se hagan una idea, cierra con el típico susto del sinvergüenza (sin vergüenza alguna).
A decir verdad, ni tan mal, si bien ni remotamente parecido al bien. En su debut Jason Zada se obceca en hacer un vulgar "filme de género" en lugar de hacer, simplemente, una película. Y eso es lo que nos ofrece, un "filme de género" bastante corriente y moliente que desperdicia sus posibilidades para, con un fuerte aroma a déjà vu, no ser capaz de rendir el debido tributo a un entorno como el de Aokigahara. Siempre nos quedará Natalie Dormer quién, al menos, gracias a Dios, con su presencia nos evita buena parte del postureo del cine de terror adolescente. Algo es...
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
Ni para empezar a tocarse.
Pues....bajonaso...
Le doy un 5.
Estoy de acuerdo en todo, hasta en la nota. Realmente se queda en tierra de nadie. Tiene buenas cosas pero es como si todo quedara a medias. No sé, no deja buenas sensaciones que digamos.
No tiene nada que destacar, y lo único que tiene interesante (el bosque) no lo aprovecha en absoluto. Al final acaba siendo una producción de terror rutinaria, pero que cae en el ridículo en muchas ocasiones. Es el bosque de aokigahara como podría ser el bosque de 'Blair Witch'. Los sustos son muy previsibles, alargan tanto la "tensión" de la escena que ya sabes por donde te van a venir 30 segundos antes de que pase algo. Lo de los "monstruos" ya lo dejamos para otro momento. Horroroso, maquillaje cutre y cuando hay CGI parece una producción de The Asylum.
Lo peor de todo es que con este bosque se podría hacer algo psicologicamente muy interesante, llevando el terror a lo ordinario. Sin monstruos ni historias. La historia no es interesante, los personajes tampoco y lo único salvable es la conclusión y los toques de J-Horror que intenta darle el director. Pero es, a todas luces, un desastre.