'Un lugar tranquilo' - El miedo a perder un ser querido
Comencemos por un detalle (ir)relevante: 'Un lugar tranquilo' ni forma parte del universo Cloverfield ni Paramount Pictures se la ha encasquetado a Netflix. Pudiendo haber hecho cualquier de las dos cosas, no han hecho ninguna de ellas. Por algo será, por algo es.
Tonterías (y demagogia) aparte, este texto sobre 'Un lugar tranquilo' pretende ser... tranquilo. La película lo merece, las salas de cine y el espectador también. Baste una premisa que se resume con tres míseras palabras, "no hacer ruido". Una premisa poderosa, con muchas posibilidades tanto a nivel conceptual como a nivel icónico. Una premisa con marchamo de clásico a poco que se le sepa sacar partido. La base perfecta para una buena película, ya sea de terror o no; pero especialmente si es de terror aunque no se trate, o no se conforme con ser "sólo" de terror.
'Un lugar tranquilo' tiene las dos mejores cosas que podemos encontrar en una película, especialmente si está adscrita a un género como el del terror, tan fácil de infravalorar, y a la vez, tan proclive a la inmolación. La primera ya la hemos mencionado, una premisa poderosa, rotunda; una premisa tan sugerente como para adueñarse de nuestros pensamientos post-partido. La segunda, valerse de un género para algo más grande que rendir pleitesía a cualquier género existente: La de contar una historia. La premisa es la base pero no es la historia, tampoco el objetivo.
La premisa es la excusa, el marco, el fondo. Y como en cualquier otra película de buen ver, lo importante es la historia. También en el género de terror, especialmente en el género del terror. Que el espectador sufra junto a sus protagonistas, en silencio, en una sala repleta de gente, y que no reaccione salvo cuando el instinto de supervivencia se lo exige. No hay mayor gloria para una película, que el espectador encuentre emoción; no hay mayor gloria para una película de terror, que además encuentre algo de qué asustarse, algo que le mantenga en constante tensión.
No hay mayor miedo que el miedo a perder un ser querido. Y los responsable de 'Un lugar tranquilo' lo saben, perfectamente. El miedo ni es un susto ni una reacción que pueda ser leída en un teleprónter, sino una emoción que nos embarga, que nos atenaza, que nos acojona. Michael Bay lo vió y se la pasó a un John Krasinski con muchas ganas de emular a James Wan. 'Un lugar tranquilo' tiene premisa, tiene historia, y tiene voluntad. Las tres, unidas a un reparto encabezado por una fantástica Emily Blunt, dan lugar a una película, en suma, hecha y derecha.
Una película con alma, y además, con mucha elegancia (y muy poca casquería).
Una premisa con marchamo de clásico a poco que se le sepa sacar partido. La base perfecta para una buena película... como lo es ante todo 'Un lugar tranquilo', una estupenda película además de una estupenda película de terror y un clásico instantáneo. No es la excepción, tampoco la norma pero en cualquier caso un verdadero placer que seguro ha suscitado la envidia del mencionado James Wan. Una película, una historia, un género. 'Un lugar tranquilo' no sólo nos ofrece pasar un buen mal rato, sino que además amenaza con apoderarse de un pedazo de nuestro corazón.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
Aunque creo que en los últimos años, el género de terror nos ha dejado obras notables y parece que hay algo de aire fresco, nos bombardean constantemente con titulares remarcando que "esta sí, de verdad de la buena, es la mejor película de terror del año" o incluso que ha causado traumas y desmayos en las salas. Sin ir más lejos, 'Déjame entrar', vendida con esos titulares y algunos más, llegó sorpresivamente a colarse en los Óscar, cuando realmente (para mí, claro) no era más que una cinta potentemente equilibrada con algún toque original en su planteamiento para sorprender al gran público, pero no un film que cinematográficamente dejara huella.
Esta que nos ocupa, es, sin paños calientes (y para mí, claro), ya no sólo la mejor cinta de terror del año, sino, por ahora, entre las que he visto, la mejor película de 2018. Y lo que es más importante (llamadme exagerado si queréis), un film de referencia para la historia del cine de terror y una de mis favoritas desde y para siempre.
Quien me lea estas afirmaciones y no haya visto el film, puede ir con un hype que irremediablemente acabe en un "no es para tanto, te has flipado". Pero personalmente iba con unas expectativas muy altas y las supera con creces. Tras un potente y desgarrador inicio donde te sitúa en un mundo invadido y silencioso, te pasas la parte central entre el sufrimiento y analizando en tu cabeza los niveles de ruido tolerables y llegas sudando a una parte final con carga extra de sufrimiento y tensión. Una de esas películas a la que es buena idea llegar con las uñas largas. Una mezcla entre Alien y Señales, pero puede que incluso superando a ambas. Esto puede sonar a la exageración y blasfemia definitiva, pero si sirve de algo, soy muy fan de ambas, especialmente de la maravilla infravalorada de Shyamalan.
'A quiet place' se cuela, sin hacer ruido, en lugares importantes de la historia del cine. Y ojalá en unas cuantas galas de premios.
Nota: 8'5
P.D. Se abre un campo imparable y casi obligado (aunque a la vez innecesario) a continuaciones. Quizá más a modo de historias paralelas y precuelas, que una secuela directa de la que nos ocupa. Si sucede, las veré sin duda, aunque van a tener muy difícil repetir con el mismo éxito.
Muy recomendable.
Echando un vistazo a la carrera de John Krasinski no es que haya muchos hitos, salvo la serie 'The Office' (la versión estadounidense). Pero a veces alguien te puede dar una sorpresa y mostrar que es mucho más de lo que se ha visto.
Con Krasinski puede que estemos ante uno de esos casos de "¿y tú donde te has metido todo éste tiempo?". Con 'Un lugar tranquilo' no solo vemos un trabajo más que solvente del propio actor, sino un director con muchas cosas que decir (aunque en esta película no dice mucho, ba dum tss). Su manejo de la tensión y su dirección de actores, sin olvidar su participación en el guión, ha dado la que es una de las propuestas más interesantes del cine de terror de los últimos años.
Una propuesta donde los actores no tenían que ser convincentes hablando sino convincentes gesticulando por la premisa de la historia y la verdad es que tanto Krasinski como Emily Blunt y sus hijos en la cinta lo consiguen. Como espectador agradezco una propuesta así. No es el descubrimiento de la Coca-Cola, mas algo que se salga de sustos, gritos y gore está bien de vez en cuando. Y si sale tan bien como aquí más aún.
Se ha anunciado una continuación de la historia, pero sea como sea (precuela, secuela, una historia independiente dentro del mismo mundo...) habrá que estar pendientes de John Krasinski a partir de ahora. Puede que hayamos estado ante un diamante en bruto que necesitaba su tiempo para pulir.
8