'Toro' - Como en casa
'Toro' es lo que se dice una buena ración de ese cine del que emana cinefagia en la mayor parte de los fotogramas que aparecen en pantalla. Por supuesto poblado de múltiples referencias, que a estas alturas de la vida se trata de reformular a ser posible de manera descarada pero también estilosa. Y efectivamente, 'Toro' es un estilizado y apesadumbrado ejercicio de estilo con el que Kike Maíllo ha querido, con la impagable complicidad de Luis Tosar, José Sacristán y en menor medida Mario Casas, dar el golpe sobre la mesa que no consiguió dar con 'EVA'.
A mitad de camino entre el thriller asiático y el cine de Nicolas Winding Refn, más sin por ello perder de vista la herencia depositada en nuestra memoria por los quinquis de los 70 y los 80, lo mejor que cabe decir de 'Toro', al margen de su buen pulso y la convicción en sí misma, es que dentro de su clara adhesión a una corriente de claro talante internacional nunca pierde de vista su identidad territorial ni su vocación de elegante servicio (al) público. Algo que la aporta una especie de humilde y convincente contorno propio dentro de lo que, no obstante, remite constantemente a un déjà vu.
'Toro' recuerda a la estupenda 'Sicarivs: La noche y el silencio' vista el año pasado, si bien enfocada dentro de su vertiente más comercial y por qué no decirlo, de cara a la galería. Solo la falta de mimo en los pequeños detalles, ahí donde se marcan las grandes distancias, así como por las incongruencias que posiblemente no lo parecen tanto cuando vienen de fuera, evitan rematar la embestida de este "toro". Algo que no es problema para disfrutar de ella como el modélico clon de gestos brillantes y acento castellano cuyo orgullo patrio sitúa un peldaño por encima de la barrera.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
Le doy un 7.
Aún con todo, como digo, tiene cosas y me cuesta suspenderla.
Mi nota : 7,8.