'Pokémon: Detective Pikachu' - Café descafeinado
Es bien sabido que las adaptaciones de videojuegos no gozan precisamente de buena salud al dar su salto al celuloide. Si nos paramos en pesar en la cantidad de títulos que han sido adaptados, y cuales de ellos pasan el corte de resultar un producto mínimamente decente veremos que nos puede costar sudores encontrar tan solo un par de títulos que puedan merecer la pena salvar de la crema. Ni el credo de asesinos, ni la valiente arqueóloga, ni tan siquiera el fontanero más famoso del mundo han sabido encontrar su éxito en su conversión al medio cinematográfico. En este aspecto, los fans de la franquicia Pokémon pueden darse por satisfechos.
Cuando el joven Tim (Justice Smith) llega a Ryme City, una ciudad única dónde humanos y Pokémon conviven y trabajan en perfecta harmonía -pues aquí no está permitido el uso de Pokeballs ni los combates Pokémon- éste acaba encontrándose con un peculiar Pikachu al que tan sólo el logra entender y con el que acabará colaborando para resolver un suceso cuyas piezas no terminan de encajar. Bajo está premisa, Rob Letterman ofrece lo que podría resumirse rápidamente como una "Buddy cop movie" con Pokémons. Una versión más simple y descafeinada -quién lo diría- del clásico 'Quién engañó a Roger Rabbit'.
'Pokémon: Detective Pikachu' destaca por la calidad y fidelidad con la que se ha tratado el material original -algo que no suele ser muy habitual en este tipo de adaptación-. Empezando por los diseños de las criaturas con ese acabado realista sin apenas alejarse de su dibujo original -que pueden llegar a causar hasta cierta adicción cuando se muestran en pantalla-, siguiendo por unas localizaciones llamativas, repletas de vida y con una cantidad de detalles abrumadoras. De la misma manera, no se puede si no aplaudir la decisión creativa de dotar al protagonista CGI de la función, Pikachu, de la voz y carisma de Ryan Reynolds, siendo esta posiblemente el mayor acierto de todas las decisiones creativas comentadas hasta ahora, todo y que aquí se nota que la calificación por edades le ha limitado cambiando su taza de café largo por una de café descafeinado. Por la suma de estos aspectos, 'Detective Pikachu' debería convertirse desde ya en el ejemplo a seguir de cómo se debe -y se puede- tratar y adaptar el material original de cara a futuras producciones similares, ya traten sobre monstruos de bolsillo o erizos supersónicos.
Por contra parte, 'Detective Pikachu' no logra destacar con igual nota en la parte narrativa, ofreciendo una historia tan simple como, a su vez, confusa, provocando que resulte difícil involucrarse del todo en el caso a resolver y llegar a cuestionarse por momentos si lo que nos están contando tiene realmente algo de sentido.
La banda sonora a cargo de Henry Jackman ofrece reminiscencias a unos sonidos electrónicos propios de una GameBoy y alguna pieza que recuerda directamente a orquestaciones escuchadas en la serie de televisión. Eso si, no tiene ningún tema original que destaque en especial, ni un tema identificable para ningún personaje.
'Detective Pikachu' es un contraste entre un ejemplar acabado visual y un guión y narrativa que no lo es tanto. Eso no le impide terminar siendo una película entrañable y divertida dónde especialmente los seguidores de la franquicia, encontrarán un aliciente adicional gracias a la multitud de detalles (tanto visuales como sonoros) con una cantidad considerable de referencias y guiños, algunos más evidentes que otros, que tal vez les invite a volver a ver la película por si, de una vez, pueden hacerse con todos.
Nota Entrenador Dominguero:
Nota Entrenador Pokemaníaco:
Por Alex Martín Fernández
@fenometrix
Una producción en líneas generales simpática y resultona que, como película, no supone ningún antes y después. Eso sí, la integración de los pokemones digitales en la imagen real es estupenda. Para un 6 y un pico muy decente.
Nota:6.5
PD: Mr. Mime y Psyduck se roban la función
Un 7.
A su favor hay que decir que, sin ser un gran espectáculo, la película luce genial visualmente. Su CGI está muy bien integrado, algo mucho más importante que tener muchísimo detalle (que también lo tiene). Y durante sus primeros 30 minutos, la fotografía de John Mathieson y la dirección de Rob Letterman está por encima de lo esperado. A ambos se les nota que les encanta jugar con las luces de neón y la atmósfera del cine negro. Luego, ya deriva en lo que (supongo) Warner Bros y Legendary Pictures querían. Algo más familiar y menos arriesgado, con una puesta en escena muy plana y genérica que solo consigue remontar en su clímax. La banda sonora de Henry Jackman está bien, a la altura del producto (incluso por encima en ciertas escenas). Hay algún momento de inspiración pero el nudo del film está rodado con muy poca personalidad.
Personalidad que, como no podía ser de otra manera, le debe mucho a los Pokemon. Han escogido a varios de los más carismáticos y los han plasmado a la perfección. Vemos ataques característicos de estos bichos y comportamientos que figuran en la Pokedex. Las escenas en las que son los protagonistas (aunque sean breves) son lo que más recordaremos del film. Han hecho un trabajo de documentación estupendo y es algo raro de ver en este tipo de producciones. Nunca he sido un gran fan de Pikachu por lo sobreexplotado que está, pero aquí es imposible no enamorarse de él. Mucha expresividad y un carisma arrollador que Ryan Reynolds se ha encargado de darle. El reparto cumple, y Justice Smith como protagonista resulta más empático y convincente que en su papel más famoso hasta ahora, el del tío gritón de 'Jurassic World: Fallen Kingdom'.
Creo (y espero) que esto haya sido el comienzo de la franquicia Pokemon en cines, y que consigan recaudar el suficiente dinero como para, ya con una base de fans grande, den un paso hacia adelante e intenten algo menos conformista. Ha estado bien, podría haber estado mejor de ser tan irónica como aparentaba en los tráilers. Pero como fan, estoy satisfecho. Como cinéfilo, conforme.
Un 6.