'Mickey 17' - Que no cunda el pánico

Bong Joon-ho nunca ha tenido la intención de encajar dentro de un molde, ni tampoco la de repetirse. Es uno de esos cineastas cuya ambición, parece obvio, es que cada una de sus películas sean distintas, especiales, reconocibles. Tanto entre sí, como respecto a otras. Películas, además, mutantes, que no sean fáciles de describir o resumir en pocas palabras. Y 'Mickey 17' no es la excepción.
Tampoco la película que uno esperaría del ganador del Óscar por 'Parásitos', una constante a lo largo de una carrera basada en sortear "lo que se espera del director de". De 'Memories of Murder (Crónica de un asesino en serie)' a 'The Host', de 'Mother' a 'Snowpiercer (Rompenieves)' pasando por 'Okja' y la propia 'Parásitos'. Todas ellas, películas "mutantes" y sobre todo, muy suyas.
'Mickey 17', lo dicho, ni es una excepción ni su primera película en inglés, en lo que sobre el papel y como introducción, podríamos describir como una suerte de reinterpretación del 'Moon' de Duncan Jones mezclada con el espíritu del 'Avenue 5' de Armando Iannucci. Se trata, obviamente, de ciencia ficción, pero, no menos obviamente, también de una sátira. Sobre todo de una sátira.
De un componente satirírico, o más bien paródico, que se adueña de la función, siendo no menos obvio un subtexto que, no obstante, y al igual que puede ocurrir con títulos como '¿Teléfono rojo? Volamos hacia Moscú', queda a merced de lo caricaturesco. Que es un poco de lo que se trata. De trazo grueso, pasarse algo de rosca y dejando de lado dobles lecturas, pasárselo bien.
De hecho tendremos muchos problemas si nos tomamos 'Mickey 17' en serio. Tantos como si 'Parásitos' permanece entre ceja y ceja como LA referencia, cuando estaría más cerca de, no sé, 'Guía del autoestopista galáctico'. Buena prueba de ello la encontramos en la excelente doble labor de Robert Pattinson haciendo de Martin Freeman... o de Peter Sellers. A su manera, por descontado.
Como ocurre con Bong Joon-ho, y con la propia 'Mickey 17', una sátira de ciencia ficción "muy suya" que por desgracia acaba teniendo más en común con 'Okja' que con cualquier otro film suyo. Y es que si bien el cineasta coreano nunca le pierde la cara a este caprichoso marrón a nivel comercial, hablamos de un film algo errático al que le pesa un tercio final tosco y poco pulido.
Una película un tanto anárquica y de poca delicadeza que no cierra el partido. Como si atacase con once pero defiendese con nueve. Algo no cuadra, y es una resolución que no pone orden ante su posible irregularidad e inconsistencia; su exceso de metraje o de personajes desaprovechados; o la sensación de que el propio Bong no se siente del todo suelto o cómodo con el dólar americano.
No son cosas relevantes, no al menos si 'Mickey 17' hubiera contado con un tramo final más rotundo y/o logrado. No por ello deja de ser una película mayormente disfrutable, pero a diferencia de la mayor parte de su filmografía, ni parece tan bien escrita, ni tampoco resuelta con el mismo desparpajo. No deja de ser una (falsa) producción de estudio de autor de unos 100 millones.
No todos son Denis Villeneuve, y aunque sea lo más fácil no quiero tampoco echarle la culpa a "esos malditos yanquis trumpistas", el villano perfecto. Pero 'Mickey 17' está algo afectada por cierta indeterminación dubitativa, como si no creyese del todo en sí misma y no terminase de apostar por la victoria, sino más bien por evitar la derrota. Como si se la hubiese escapado de las manos...
... antes de madurar o por el camino. Ahora o nunca. De perdidos al río.
Como si fuera un capricho o compromiso mil millonario, el peaje a pagar por el éxito de 'Parásitos' y Bong Joon-ho asumiera, per se, que la de "después de" será una decepción que no tendremos en cuenta. Y con la que después quizá no le insistirán desde Hollywood. Porque aun con todo, 'Mickey 17' desprende un inquieto y elegante inconformismo que visto sin grandes expectativas...
... resulta acogedor y tentador. Porque al menos no se ajusta a un molde.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex



A mí sin embargo me ha gustado Mickey 17 pese a su evidente irregularidad y ese desenlace que se alarga en exceso, me parece un blockbuster divertido y caótico que no reuye de su condición sin renunciar por ello a la crítica social de trazo grueso edulcorada con humor ácido, además visualmente resulta muy atractiva y nos regala uno de los mejores papeles de Pattinson como protagonista con una actuación que transita entre el drama y la bufonada, en resumen una película a reivindicar vistas algunas críticas y que estoy seguro que ganará con el paso del tiempo hasta situarse entre las 'imprescindibles' del director surcoreano.
El triunfo del director surcoreano Bong Joon-Ho con 'Parásitos' creo que fue mayoritario. Yo mismo me subí en el tren de sus fans después de verla y se llevó multitud de premios, entre ellos 4 premios Oscar (Película, Director, Película Internacional y Guion original). Parecía que su siguiente proyecto estaría a la vuelta de la esquina, pero se hizo esperar...para ver esto.
Quizás, después de una cinta tan dramática como 'Parásitos', al bueno de Joon-Ho se le pasó por la cabeza no ser tan serio y buscó una comedia sin perder melodrama, lo cual es perfectamente comprensible. El problema viene cuando la comedia no es una comedia refinada, sino que parece (con todos los respetos, que algunas de ellas son muy buenas) de 'Scary Movie'; y si yo quisiera ver 'Scary Movie', me pondría 'Scary Movie'.
En 'Mickey 17' hay también espacio para lo serio cuando se ve que los gobernantes de aquella expedición (interpretados por Mark Ruffalo y Toni Collette) no tienen todos los patitos en fila y se creen con el derecho de hacer lo que les dé la gana y cuando salen ellos, el filme gana un poco pues se toma un poco más en serio a sí misma; sin embargo, cuando Robert Pattinson es el que toma las riendas, 'Mickey 17' se impregna de comedia tonta con la que no me hace precisamente entusiasmar. La voz que le han puesto en castellano a su Mickey 17 (de profesión, Prescindible) no ayuda tampoco, aunque lo importante reside en la vis cómica de la historia.
Una vis cómica que yo no termino de captar entre tanta situación disparatada que me hacía causar una sensación de "¿qué cojones estoy viendo?" Que impedía que me tomase al largometraje en serio y en su lugar estuviese pidiendo al árbitro la hora poco después del comienzo del partido. Y, aún con todo, la premisa estaba bien pensada, es en la ejecución donde falla. En dirección artística y vestuario no le pondría peros, ni en la fotografía del reputado Darius Khondji. Es en una de las patas fundamentales de cualquier producción, como es el guion, donde falla estrepitosamente y hasta afecta a un reparto de campanillas con nombres como los ya mencionados Pattinson, Ruffalo y Collete más Steven Yeun o Naomi Ackie, cuyo personaje (Nasha) pasa de ser de las mejores a ser de las peores, cuando se transforma en una listilla repelente.
No tengo dudas de que Bong Joon-Ho quiso hacer esta película con toda la buena intención, pero hay muchas veces, en el cine y en la vida, que las buenas intenciones no bastan y hay que plasmarlas con ideas efectivas.
4
Creo que el concepto está bien pero no hay mucho más que una premisa original. Seguramente el espectador aporte más con sus teorías sobre de qué es alegoría el film, que el director se haya trabajado o desarrollado su historia. Con un humor que no acabo de entender qué pretende y con un reparto de lujo pero tan caricaturizado e histriónico como su sátira. Me ha recordado de alguna forma a 'Megalópolis', la que incluso prefiero a esta.
Es algo muy subjetivo pero para mi no aprueba. Aunque tiene un algo, aunque yo no lo haya apreciado, que entiendo que pueda gustar mucho a otros.