'Chavalas' - And all la gente in the barrio
Como película 'Chavalas' tiene varios problemas; los dos más importantes una historia mil veces vista a la que no le mete ningún meneo esencial, y que bajo su apariencia de cine "de barrio" parece hecha por alguien que nunca se ha bajado del coche para pisar uno. Todo es demasiado bonito como para parecer de verdad, menos aún para que nos la tomemos más en serio que a un stand temático de IKEA.
No todo tiene por qué ser tan miserable como en una película de Ken Loach, vale, de acuerdo, pero entre eso y el buenismo pijo progre de resaca post-mojito hay un abanico muy grande de posibles realidades, a cada cuál más o menos creíble y no tan supeditadas a la postal turística para guiris.
Si la película se sostiene es por Vicky Luengo y sobre todo Carolina Yuste, actriz llamada a jugar en las grandes ligas. Y eso que sólo la primera tiene lo que podríamos considerar un papel: El resto de personajes son títeres, oportunos apoyos de una sola pieza, como todo en esta película tan aséptica y sin alma a la que sobre todo, y ante todo le falta "sabor". A 'Barrio', a vida. Le falta autenticidad, sentirse real.
Y le sobra el artificio de una plantilla de guión cumplimentada a kilómetros de un barrio. Un amago de fábula vitalista difícil de creer cuando quien te la cuenta no siente ninguna pasión, siendo 'Chavalas' el equivalente fílmico a ayudar a un mendigo mientras posas sonriente para el Instagram con unas Ray-Ban.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
Le doy un 6,5.