Películas como 'Locke', 'Enterrado' o 'The Guilty' están construidas en torno a una serie de llamadas de teléfono. Literalmente, dependen de una línea telefónica. Y posiblemente, podríamos seguirlas con los ojos cerrados, como si fueran un podcast. El resultado puede que no fuera el mismo, pero sí podría ser casi el mismo. Porque si una imagen puede valer más que mil palabras, mil palabras también pueden dar forma a esa misma imagen (en nuestra cabeza).

'Calls' es una propuesta de lo más original y curiosa, y una vez superada la posible resistencia inicial, también verdaderamente adictiva y muy estimulante. Nueve capítulos de entre 13 y 21 minutos de duración, aparentemente independientes pero con algo en común que dan forma a una experiencia inmersiva como pocas. Imposible no pensar en la mítica retransmisión de 'La guerra de los mundos' realizada por Orson Welles en octubre de 1938.

¿Es entonces 'Calls' una especie de podcast? No exactamente, aunque podríamos seguirla con los ojos cerrados y el resultado puede que no fuera el mismo, pero sí podría ser casi el mismo. Esta expresiva sucesión superpuesta de múltiples locuciones está acompasada y respaldada por la sobreimpresión de cada una de las palabras sobre un minimalista y fluido torrente de gráficos conceptualmente abstractos que crean un hipnótico y dinámico punto de fuga.

Lejos de ser una especie de socorrido fondo de escritorio para evitar que el espectador se sienta como un gilipollas mirando a la nada, esta característica en apariencia trivial y superflua proyecta y apuntala el alcance de una narrativa que se hace fuerte, tremendamente fuerte en su desarrollo aparentemente anecdótico y fortuito. 'Calls' nos atrapa mediante el sibilino uso de una palabra que poco a poco va dando forma en nuestra cabeza a lo que hay entre líneas.

De pronto, lo que podría ser un 'The Twilight Zone' episódico y pasajero para escuchar en el Metro de camino a casa se torna en un inquietante todo sutilmente despiezado. Un todo de claro cariz fantástico, en la línea de obras como 'Coherence', y que con tan sólo el uso de la palabra -refrendada por ese particular soporte visual- es capaz de proyectar en nuestro interior una serie de sensaciones que valen tanto como tanto podamos llegar a entrar en trance.

El guionista y director Fede Álvarez logra a partir de un original del francés Timothée Hochet que efectivamente, la palabra sea más fuerte que la espada. Magistralmente interpretada, 'Calls' es sin duda uno de los thrillers más personales, creativos, originales y estimulantes que ha dado la televisión. Una obra virtualmente única, y que demuestra que a menudo el arte audiovisual no depende de lo que se muestra, sino de lo que se insinúa.

Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex