... porque de todo tiene que haber, 'Invasor' es cine 100% comercial, una categorización que a pesar de la mala fama que puede arrastrar no tiene por qué ser para nada mala... como tampoco lo tiene que tener la consideración de "arte y ensayo". Como todo dependerá de cómo esté resuelto el enigma para dar credibilidad a un discurso como otro cualquiera, ya sea mejor o peor, ya esté más o menos logrado, ya sea propicio para un momento o para otro. La mente abierta y el culo apretado. Al fin y al cabo el cine comercial es el que suele ver la mayoría de la gente una y otra vez, el mismo por el que se suele optar para evadirse de una realidad que aunque sólo sea por ser la nuestra suele ser peor que la de cualquier otro ser humano, incluso peor que la de un soldado español quien, citando a Will Dormer aunque sea cambiando el cuerpo, "no puede dormir porque le falta una pieza del rompecabezas... o porque no tiene la conciencia tranquila".El soldado al que interpreta ese proyecto de estrella -si las hubiera en España- que es Alberto Ammann en realidad le suceden las dos cosas: ni tiene la conciencia tranquila... ni tiene todas las piezas en su mano. Por eso no duerme, o lo hace con un ojo abierto y la mosca (cojonera) detrás de la oreja en forma de Karra Elejalde, detonante para ofrecernos a nosotros como espectadores un modélico y efectivo thriller concebido para conducir su argumento del punto a al punto b de forma sencilla, directa y práctica. Sin complicaciones, o sólo las justas. Un poco a la manera del 'Argo' de Ben Affleck, un filme algo superior pero igual de superficial (y mainstream), el cada día un poco más especialista en la materia Daniel Calparsoro apuesta por el entretenimiento como arma para seducir a la audiencia en detrimento de la posible densidad de una historia que, llegado el caso, se resume en el consabido sota, caballo y rey. Causa y efecto. Se sugiere, se intuye, se deduce una casa grande y bonita que sin embargo sólo percibimos a través de la ventana.
Dicho esto, expresado de forma más o menos sencilla, directa y práctica lo que viene a ser una producción en donde priman los valores industriales a los valores artísticos, a un servidor siempre le viene a la cabeza el misma referente que, supongo, ya habré nombrado en anteriores ocasiones (y que es personal y transferible): 'Doble traición', thriller de suspense dirigido por Bruce Beresford en 1999 con Tommy Lee Jones y Ashley Judd de protagonistas. ¿Y qué tiene de especial este título puramente alimenticio? Nada, en realidad, salvo la profesionalidad con la que está resuelto... y bueno, que resulta de lo más entretenido por más que su tráiler ofrezca mucho más en menos tiempo y no quede twitteable decir que las has visto para captar followers. Cada cual tiene los suyos. E 'Invasor' viene a ser más o menos lo mismo, a los puntos, un filme que nos quitará el sueño mientras dura para luego dejarnos dormir como si nada, como si el buen nombre de la patria allende los mares estuviera en buenas manos...
Porque de todo tiene que haber... 'Invasor' es una producción más bien sencilla, que como bien comentaba el que se sentó a mi derecha en la sala "parece que cuenta algo importante", más uno termina sin sentir por ello que le han contado nada nuevo, o si acaso algo peor, nada que realmente tenga mucho fundamento más allá de servir como coartada... o mejor dicho, nada que realmente tenga mucho interés en ir más allá de servir como coartada, arrojando la mano y escondiendo la piedra (¿o era más bien al revés?). Sencilla, más no por ello menos efectiva en su evidente apuesta por ofrecer cine comercial hollywoodiense a la española y de primera, puede que no tan ruidoso o llamativo como el producido en Estados Unidos que por aquí no tenemos a un Joel Silver o a un Jerry Bruckheimer para que lo produzca (ni sus medios ni su industria ni sus espectadores), pero igualmente resultón y convicente a la hora de lucir con orgullo localizaciones, personajes y argumentos de la tierra, para que no se diga, y de presentar batalla en ese traicionero campo de guerra que es cada semana la taquilla... nacional.
Nota:
6.5
Por Juan Pairet Iglesias
Le doy especial mérito a las escenas en Iraq, bastante curradas y tremendamente duras. Por contra, la relación del protagonista con su mujer y su amigo no me han terminado de convencer, las vi como demasiado superfluas. Y no creo que sea por culpa del protagonista, Alberto Ammann, de lo mejor de la peli
Por lo demás bastante de acuerdo con Wancho, incluso en la nota: 6,5.
· Las actuaciones del reparto no me han convencido (exceptuando a Alberto Amann pero tampoco es para tirar cohetes).
·La historia me ha parecido inverosímil y eso que cuenta con ingredientes de sobra para podertela creer pero a mí no me ha llegado esa sensación de credibilidad.
· Es de las pocas películas que considero que debían de haber sido más largas. No suelo apoyar la incursión de muchos subtramas a la historia pero en este no le hubiera venido mal para haber mejorado la historia y la película en sí.
· Perdí el interés un par de veces hasta incluso llegar a cerrar los ojos ciertos instantes.
Un 4.