Aunque no será hasta mañana que su distribuidora, Buena Vista, haga público un comunicado oficial sobre qué acciones o medidas tomará en relación a la ya muy comentada calificación recibida por 'Saw 6' en nuestro país, lo que sí es seguro es que mañana, Viernes 23 de Octubre, mientras que la película se podrá ver sin ninguna restricción especial en Estados Unidos, Cánada o Inglaterra, no será estrenada en nuestro país. La distribuidora, que ya llevaba varios días promocionando la película, tenía preparadas 300 copias de la misma lo que a razón de unos 2.000 euros por copia le supondrá un gasto de unos 600.000 euros en principio, para nada; y eso sin tener en cuenta a los 800.000 espectadores que de media han acudido a los cines españoles a ver el resto de entregas de la saga. A partir de ahora se abren dos opciones: o bien recurrir la calificación, o bien resignarse a editarla directamente en DVD.

Existe un precedente similar con la película francesa 'Fóllame', de Virginie Despentes, que fue calificada en un principio con la misma 'X' por su alto contenido sexual, aunque tras el recurso interpuesto por su distribuidora, Alta Films, logró ser estrenada dos meses más tarde con la calificación 'No recomendada para menores de 18 años'. 35.848 espectadores lo agradecieron y pagaron por verla, segun datos del propio Ministerio de Cultura.Así pues, de momento se confirma que habrá que esperar para ver la nueva (y extrañamente polémica) entrega de la franquicia 'Saw', de la cual por cierto se prepara ya una séptima entrega, y en 3D, para el año que viene, otro futuro motivo de suspicacias varias de aquí a su "presunto" estreno. Algunas webs norteamericanas ya han empezado a hacerse eco de este hecho sin duda polémico y que sienta un precedente, todo hay que decirlo, bastante peligroso.

En España, la calificación de las películas depende de una comisión dependiente del Instituto de Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA), cuyo veredicto es inapelable y tan sólo puede ser cambiado a través de un recurso legal. Desde esta página web se están recogiendo firmas para que el film pueda ser estrenado, aunque el gesto no tiene por qué ser necesariamente correspondido independientemente del número de firmas que se recogan ya que no tiene ninguna validez ni legal ni práctica más allá de ser una manifestación pública, sin más.