El Festival Internacional de Cine Fantástico de Sitges cumple 52 años en este 2019. De ocho en ocho. Brevemente, y de ocho en ocho películas.

'Judy & Punch' - Demasiada "Judy" y poco "punch". El inicio promete y la banda sonora acompaña, si bien van pasando los minutos... y nada, que no arranca. Una comedia negra sin gracia y con claros problemas de ritmo que, al final, sucumbe ante lo impostado de un discurso feminista tan subrayado como para usarlo como defensa ante su clara falta de mordiente. No, lo siento pero no cuela. ****

'Luz' - No recuerdo otra película durante la que estando yo presente, se marchasen tantas y tantas personas de la sala. Un pastiche en torno a las posibilidades enfermizas de cualquier ultradevoción religiosa, ya sea voluntaria, impuesta o interesada. Es toda ella, el conjunto o la suma; como si nos metiéramos tres polvores enteros en la boca, que hacen bola. ***

'Corporate Animals' - Comedia muy americana, en el sentido que deja el humor en manos de su reparto antes que en los gags. Un reparto eficiente que tampoco puede hacer milagros con un material tan poco trabajado. Es entretenida, corta y tiene sus puntos. Pero es una más que se limita a cumplir con el mínimo imprescindible. *****

'Bliss' - Si su segunda película era una especie de versión alternativa del 'Scanners' de David Cronenberg, la tercera película de Joe Begos es una especie de versión alternativa del 'The Devil's Candy' de Sean Byrne. Algo parecido. Bergos va mejorando, y en esta ocasión sus inquietudes estilísticas están más en sintonía con el que es su argumento. Una serie B de una ruidosa solvencia muy apreciable, especialmente en un lugar como Sitges. ******

'It Comes' - Lo nuevo de Tetsuya Nakashima, responsable de 'Confessions' y 'El mundo de Kanako'... pero también responsable (en lo que parece otra vida) de 'Kamikaze Girls' o 'Conociendo a Matsuko'. Una nueva muestra de su exquisito y sobrado dominio del montaje. Y una obra muy intensa hasta que en los últimos 30 minutos se le pira la pinza... y se transforma en una locura y/o tontería que hay que ver como lo que es: Todo un pletórico órdago a la japonesa. *******

'El faro' - Calma y virulencia, frenesí y desasosiego. Una pesadilla expresionista inspirada en el mito de Prometeo que va mucho más allá del ejercicio de estilo. De la apariencia, y que abraza lo añejo con tanta convicción como para que parezca de lo más moderno. Una experiencia intensa, visceral y asfixiante apuntalada por un excelso acabado audiovisual convenientemente acompañado de dos brillantes interpretaciones. ********

'Synchronic' - Es hasta la fecha la película menos lograda, y también la menos interesante de Benson & Moorhead, amén de que a nivel personal... o no, no hay forma humana en la que me pueda creer ni su postulado ni el desarrollo de su historia. Mi teoría viendo el reparto (o el final), que han intentado hacer un producto comercial que sin embargo, no termina de cuajar. Ni a los actores se les ve cómodos dentro de una producción, en realidad, muy poco ambiciosa. *****

'Bacurau' - Algo más de dos horas de una especie de "western brasileño" capaz de utilizar a un grupo de norteamericanos como villanos. El estallido de violencia final resulta un tanto light (para lo que parecía que se avecinaba), pero no importa: Es una película con un contexto más social que pulp, más Costa-Gravas que Tarantino. Es más, incluso uno se queda con ganas de estar más tiempo con los habitantes de Bacurau, en una película coral con un discurso muy estimulante que en Estados Unidos podría dar para probablemente, una estupida franquicia como la de 'La purga'. *******

Continuará...

Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex