Hay un dicho que dice algo así como que al que madruga Dios le ayuda. Pues hoy ha sido uno de esos días en los que te gustaría hablar cara a cara con quién lo dijo por primera vez. La culpa la tiene 'Métamorphoses', visionado tras el cual "molesta" haberse despertado pronto. Molesta mucho.

Dando por sentado que la pretenciosidad es algo inherente al chovinismo francés, la cinta de Christophe Honoré es una "authentique conneries prétentieux français". Una adaptación del poema épico latino de Ovide que emplea tetas, culos y pollas como parches narrativos de una bacanal disfrazada de ensayo metafísico. O sea, "ordures intellectuelle par auteur" que si nos empeñamos tiene tanto sentido como 'Furia de titanes' (pero sin ser tan entretenida).

El panorama mejora considerablemente con 'Respire', segunda película como directora de la actriz francesa Mélanie Laurent que la confirma como un valor al alza. En realidad un buen filme que aúna pulso, energía, caligrafía, voluntad... pero a la que lastra (no de gravedad) algunas licencias argumentales muy forzadas, y sobre todo un abusivo empleo de la cámara al hombro.

Algo no funciona cuando el plano final -que noy a desvelar- provoca el efecto contrario al pretendido, lo que no es obstáculo para apreciar una obra que sin ir más lejos cuenta con un primer tercio fantástico. Por no mencionar el descubrimiento que supone Lou De Laage...

Por contra el discurso de 'Les combattants' es mucho más ligero. Y la verdad, se agradece mucho dicha ligereza pues, a pesar de ser francesa, en este caso no hay ni rastro de pretenciosidad en el debut de Thomas Cailley, y si bastante de ese modelo hollywoodiense tipo 'Intocable' que tan bien funciona cuando se hace como hay que hacerlo, bien. Una producción muy equilibrada que funciona, y que con humildad se gana al respetable a base de un buen humor que no pretende sobrevivir al apocalipsis. He aquí el gran acierto de esta cinta al servicio del espectador, una ligereza amena y simpática que entra de primeras y sin raspar. Un filme que, repito, sencillamente funciona (pero muy bien).

Gijón ha podido con Bill Plympton. Así nos han presentado a continuación 'Mutant Aliens', filme al que el animador estadounidense le puso punto final en 2001. Una lástima no haber podido contar con su presencia (como si ha ocurrido en las otras proyecciones del ciclo dedicado a su persona), porque por lo demás la cinta se resume de igual manera que toda su obra: es una película 100% de Bill Plympton; directa y sencilla, y también muy divertida. Y quién le conozca ya sabe lo que eso significa màs o menos; quién no... ya está tardando, siendo que dedicarle más palabras es del todo irrelevante.

Cerramos la jornada con 'Atlántida', producción argentina de la debutante Inés María Barrionuevo que se queda en medio de ninguna parte. Aguanta en pantalla y cuenta con algunos valores como la solvencia de su reparto, pero depende de unas intenciones un tanto aleatorias que no quedan nada claras -empezando por su título- y da la sensación de ser, en última estancia, un corto/mediometraje alargado sin mayores aspiraciones que pasar por ser una película. De ahí que a pesar de su corrección formal cause y se suma en la indiferencia.

Continuará...

Por Juan Pairet Iglesias