'Swiss Army Man' - Los cuescos mágicos
'Swiss Army Man' es una película verdaderamente singular; también la valiente y muy prometedora ópera prima de los Daniels, una pareja formada por Dan Kwan y Daniel Scheinert a la que habrá que seguir muy de cerca. Y es que no es fácil convertir lo que podría ser una retahíla de gags de dudosa moral a lo Adam Sandler en una buena, elegante y respetuosa comedia existencial con tanto corazón como, atención, tantas son las flatulencias que se tira el que diera vida a Harry Potter, que son unas cuantas... muchas... una barbaridad.
Todo ello sin que resulte grosero, tampoco deshonesto. Todo ello sin que parezca una película de Adam Sandler, en lo que bien podría ser una película de Adam Sandler hecha con cariño, amor, pasión y un verdadero interés por hacer algo que sobreviva al día de su estreno. Todo ello de tal manera que a uno le vengan a la cabeza títulos buenrollistas distribuidos por Fox Searchlight tan satisfactorios como 'Pequeña Miss Sunshine' o 'Ruby Sparks', ambas no por casualidad protagonizadas por el hermano gemelo perdido de Lionel Messi.
Una mezcla imposible, inolvidable, irresistible en lo bueno y en lo malo, entre lo absurdo y lo extravagante que funciona extrañamente bien desde un primer instante y se desarrolla con un temple y finura verdaderamente encomiables... lástima que sus últimos diez minutos y una resolución bastante poco atinada, junto al menosprecio de su distribuidora española, afean el resultado final rebajando el impacto de una cinta, por demás, con el indudable encanto de lo que es tan peculiar como para ser virtualmente distinto a todo lo demás.
O lo que es lo mismo, un clásico instantáneo de culto que muchos amarán ante la incompresión de otros tantos "haters". La vida puede ser maravillosa, desde luego. Y en cualquier momento.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
También decir, que aunque está claro que tras su superficie hay mucha complejidad y reflexión sobre la sociedad, el individuo dentro y fuera de ella, la soledad y alguna que otra cosa más, le sienta mejor cuando tira a volar su imaginación que cuando se pone a dar discursos sobre la vida, en los que en algún momento divaga. Pero entiendo que con algo tienen que "rellenar" 95 minutos o hubiera dado para un cortometraje resultón y ya. Conseguirlo es meritorio porque para ser justos, con sus limitados recursos no se hace realmente pesada. Eso sí, cualquiera que la haya visto coincidirá seguro en qué momento exacto, que secuencia, es su clímax, para enmarcar y recordar.
Como originalidad y como concepto le daba un 10. No creo que entre en el top de mejores films de 2017 pero fijo que en lo más alto del top de las más originales que se han entrenado en salas. Como film, en conjunto y redondez, no tengo claro que número darle. Por ahora, lo que sí hago es recomendarla encarecidamente para todos aquellos que les guste ver algo apartado de lo convencional.