'La isla de las mentiras' está libremente inspirada en hechos reales. De fondo y a menudo en primer plano, el hundimiento del buque "Santa Isabel" frente a las costas de la isla de Sálvora en 1921. El llamado "Titanic gallego", dicen. Este es el punto de partida de un thriller donde lo más interesante no es el naufragio en sí mismo, siempre de fondo aunque a menudo en primer plano, sino las consecuencias que tiene en un microcosmos tan cerrado y peculiar como el de la isla de Sálvora de aquel entonces.

Sus consecuencias, y también las de un crimen cometido esa misma noche, en una premisa de lo más interesante que sin embargo no se ve reflejada en una película igual de interesante. Como vulgarmente se dice, "le falta algo". Quizá veteranía a la novel Paula Cons, de cuya irregular labor se desprende la embarazosa sensación a filme remontado sobre la marcha. Lo esté, o sea sólo que tanto pretende abarcar que al final es tanto lo que se queda a medio camino de ahogarse, es posible, que para nada.

Quizá sea el guión co-escrito por Luis Marías, al que dudo que alguna vez pueda perdonarle ese naufragio llamado 'Fuego', película de la que algo hay (o queda) en 'La isla de las mentiras'. El acento es y los actores están, como también lo es y está ese desbarajuste narrativo que tanto desluce a vivos y muertos. Una falta de contundencia y de claridad de ideas que no hunde el barco, pero sí desluce el desarrollo de un planteamiento cuyos diferentes mimbres narrativos se entorpecen y molestan unos a otros.

No es que 'La isla de las mentiras' sea una mala película, es que no llega a ser la película que apuntaba que podría ser. Ya sea por una cosa o por la otra, la abundancia de posibilidades queda reducida a un guiso aguado por unos ingredientes que lejos de añadir sabrosura, se reducen a lo bien, vale, gracias por haber venido. Y a por la siguiente. Como si esta historia según la película poco conocida mereciera realmente ser poco recordada. Como si en lugar de una paella fuera un arroz con cosas, que dicen.

Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex