'Ip Man 4: El final' - Más... de lo mismo
Donnie Yen es Ip Man de la misma manera que Keanu Reeves es John Wick. Da igual que los dos hayan hecho bastantes más cosas aparte, algunas incluso bastante buenas (y algunas otras bastante malas...).
Y cualquier parecido con la realidad es pura ficción.
La saga de 'Ip Man' llega a su final con esta cuarta entrega que no hace sino explotar, aún más si cabe lo que ha venido explotando a lo largo de los tres títulos anteriores. A estas alturas hacerse los sorprendidos no cuela, porque ni falta que hace ninguna sorpresa. A la cuarta, más de lo mismo, en lo que bien puede ser visto como un ejercicio de lógica aplastante: Si viste la primera, si viste la segunda, y si viste la tercera... ¿por qué no una cuarta?
La lógica es la misma detrás de la franquicia que ha desplazado a Neo a un segundo plano: ¿Qué esperar de la cuarta entrega de 'Ip Man', sino más o menos lo mismo que de la cuarta entrega de 'John Wick'? Película tras película repite el mismo equipo encabezado por un Donnie Yen al que da igual por qué le conociese en el pasado que ya es y será Ip Man para siempre: El invencible maestro de Wing Chun. El hombre. El mito. La leyenda.
Y cualquier parecido con la realidad, repito, es pura ficción.
Porque eso es la franquicia de 'Ip Man', pura ficción, y la cuarta no es una excepción. El patrón está claro, más o menos el mismo que hay detrás de películas como 'Karate Kid'. Da igual que Yen se enfrente a Sammo Hung, Mike Tyson o como en esta ocasión a Scott Adkins, que no ha firmado para perder, ni mucho menos para perder la compostura. Es un maestro, dentro y fuera del combate. En la vida y en las artes marciales.
La primera siempre será la mejor aunque sólo sea por ser la primera, pero ni la segunda, ni la tercera ni ahora la cuarta le van a la zaga: Donnie Yen vuelve a satisfacer con una película que ofrece lo que cabe esperar, no más de diez minutos sin alguna exhibición marcial. El resto, lo que hay de fondo, es un lujoso sota, caballo y rey tan bien aplicado que acaba resultando tan emocionante como la primera vez, y también, como la última vez.
Donnie Yen es Ip Man de la misma manera que Keanu Reeves es John Wick. Esta cuarta entrega simplemente ratifica lo que en esencia es una más, en la práctica una tan buena (o disfrutable) como las demás.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
La segunda, tercera y cuarta mantienen el tipo y están a un nivel similar. Eso sí, como dices, las tres un peldaño por debajo de la primera. En cualquier caso, es el tipo de película que ya sabes con lo que te vas a encontrar, por lo que a su vez es difícil que te decepcione.