'Enganchados a la muerte' es una de esas películas que parecen empeñadas en patinar sobre hielo cuesta arriba, así como uno de esos remakes que parecen estar concebidos para ensalzar al filme original. La propia elección de su título español parece arropar esta hipótesis. También se trata de una de esas producciones que uno intuye, ha sido víctima de los inescrutables procesos de una maquinaria industrial como la de Hollywood.

Las cosas como son: Un remake de 'Línea mortal' tiene potencial. Es más, la mayor parte de los remakes por muy mala fama que puedan tener, tienen potencial por una cuestión de pura lógica: Trabajan a partir de algo que ha sido probado en el mundo real. La clave está en hacer aquello que hicieron David Fincher o Matt Reeves con los remakes de 'Millennium: Los hombres que no amaban a las mujeres' o 'Déjame entrar': Hacerlo mejor.

Todo esto muy a grosso modo, claro, y dicho de tal manera que parece tan sencillo... como obvio. Uno piensa en 'Enganchados a la muerte' de la misma manera que piensa en otros fallidos remakes, como "una revelación espontánea" que ha surgido en la cabeza de alguien durante el visionado del filme original. La pregunta, una con tantas posibilidades como para servir de base a unos cuantos episodios de 'Futurama': Y si... esto, y si... aquello.

'Enganchados a la muerte'... pero condenados a vivir. El encabezado de esta crítica improvisada sobre la marcha se refiere a ese proceso industrial que desfigura por completo la idea original. Que transforma una inquietud en rutina, probablemente, por un puñado de dólares. De cómo se apuesta por la comodidad de un sistema binario en dónde como escribió un tal William Shakespeare todo se resume a un "ser o no ser".

Uno es igual a uno, como en aquella empresa en la que un trabajador es igual a otro trabajador indiferentemente a sus méritos como empleados. Porque la matemática puede ser tan compleja como sencilla, y porque a la hora de la verdad el miedo es más poderoso que el amor. Es posible, tal vez, puede ser que bajo la apariencia de 'Enganchados a la muerte' hubiera, en un principio, una película capaz de atraer según qué interés artístico sobre ella.

Es posible, tal vez, puede ser. Lo aparentemente visible es que Hollywood, esa versión de Hollywood que asociamos con los peores males de la humanidad, se ha cebado con ella. Que no ha tenido piedad con lo que en otra vida podría haber... sobrevivido, pero que en esta no es más que un pobre zombi como los de The Walking Dead: un cadáver condenado a vagar de un lado a otro a la espera de poco más que la nada.

Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex