'Asteroid City' - La crónica Chinchón
Al grano: quien nunca haya sido capaz de entrar en el mundo de Wes Anderson, tampoco lo hará con 'Asteroid City'. Un capricho fílmico que cuenta con todas y cada una de las señas de identidad habituales del cineasta norteamericano -salvo Bill Murray-. Obviamente, como es la costumbre, no hay ni un solo segundo durante el que no luzca y actúe como una obra de Wes Anderson... pero de las que son sólo una bonita y acartonada apariencia.
Al igual que ocurría en sus dos peores trabajos, 'Life Aquatic' y 'Viaje a Darjeeling', todo en 'Asteroid City' acaba por resultar demasiado artificial, gratuito, fortuito, caprichoso... y en resumen, banal e intrascendente. El cineasta norteamericano pierde en esta ocasión la batalla con el niño pijo y mimado al que todo se le consiente, y entrega una obra teatralmente fascinante, por descontado, por supuesto, pero que no va a ninguna parte de provecho.
Una peonza que gira, y gira, y gira, y que vuelve a girar sobre más o menos lo mismo: el ser una obra de Wes Anderson. Una obra más parecida a un programa de sketches que a una película, con una exquisita caligrafía marca de la casa que sin embargo, dado su exacerbada, fría, distante, rematadamente calculada y críptica intelectualidad y la ausencia de un argumento o personajes bien definidos, su propósito ya ni sorprende, ni impacta, ni engancha.
No en esta ocasión, al menos, siendo un filme decorativo que incluso parece poco imaginativo en comparación con sus mejores trabajos; aquellos que contaban con algún tipo de emoción respaldando su obsesivo esteticismo. 'Asteroid City' es un frío e impasible artificio cuyo desfile casi interminable de rostros famosos, la gran y amplia mayoría de ellos como NPC (aka, personajes no jugables), acaba haciéndose pesado. Bastante pesado y aburrido.
Después de cuatro grandes películas como 'Fantástico Sr. Fox', 'Moonrise Kingdom', 'El gran hotel Budapest' e 'Isla de perros' es como si Wes Anderson se hubiera estancado en su propia y hierática realidad alternativa. El cineasta ha pulido y perfeccionado tanto su estilo que con 'Asteroid City' le ha costado encontrar con qué sostenerlo y a su inspiración estar a la altura de su propio genio. De dotarla de fundamento, sentido, valor... en resumen, de chispa.
Algo que ya se intuía con la todavía muy disfrutable 'La crónica francesa' y que ahora, aparentemente, por desgracia y a falta de la siguiente, que ya se verá, parece confirmarse.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
A mí me da rabia odiarla por su exquisita escenografía, pero más allá del cualquier posible mensaje lo que la veo es hueca y vacía, no aburrida.
Podría decirse que la historia resulta anecdótica y la mayoría de los personajes tampoco cuentan con el trasfondo necesario para que nos impliquemos en lo que les ocurre, obviamente mantiene nuestro interés y goza de algún que otro momento de lucimiento aunque siempre de manera discontinua, por ello la cinta no termina nunca de despegar dejándonos la sensación de estar desaprovechada pese a que la idea gozaba de potencial para habernos hecho disfrutar mucho más, una lástima aunque no deja de ser otro interesante acercamiento al peculiar cine de su director.