Día triste para todos los amantes del cine más experimental... y en definitiva, para todos los cinéfilos. Hace unos momentos se ha confirmado la muerte del cineasta francés Chris Marker, a los 91 años de edad. El anuncio del crítico Jean-Michel Frodon ha sido confirmado posteriormente por Le Monde, dándose por oficialmente empezado el luto por la desaparición de una de las figuras más importantes en el siglo XX no solamente en la experimentación con el lenguaje cinematográfico, sino también en la consolidación del documental filmado.

En activo hasta casi su muerte, Marker, apodado como uno de los más ''famosos entre los cineastas desconocidos'', nos deja títulos para el recuerdo como 'El muelle (La Jetée)', excelente relato de ciencia-ficción que posteriormente contaría con un también destacable remake ('12 monos') a manos de Terry Gilliam; o 'El fondo del aire es rojo', documental en el que el director reflexionó sobre diversos movimientos sociales surgidos durante la década de los 60; o 'Sin sol (Sans Soleil)', otra notable indagación del malogrado cineasta en el terreno de las imágenes y la memoria.

Por ello, y por todos los otros trabajos que conforman uno de los legados más ricos del cine contemporáneo, nuestro más sentido adiós final. Au revoir, y gracias por todo.