New Line Cinema se ha impuesto en la pelea por la distribución mundial de 'Don't Worry, Darling', la que será la segunda película como directora de Olivia Wilde. Una pelea en la que ha participado prácticamente todo Hollywood, y en la que la compañía subsidiaria de Warner Bros. se ha impuesto gracias a lo que será uno de los grandes acuerdos del año, puede que también de los últimos años.

Según THR, la garantía de su estreno en cines, la experiencia de la compañía en el género de terror -con las dos entregas de 'It' o el Universo Expediente Warren como grandes valedores- o la libertad creativa han sido algunas de las razones que han inclinado la balanza a su favor.

Pero quizá la más importante ha sido la económica, y es que según el citado medio sus principales responsables creativos podrían haber llegado a un acuerdo para repartirse hasta el 50% de los futuros beneficios de un filme que contará con un presupuesto de unos 20 millones de dólares.

Un "raro acuerdo" para los tiempos que corren y al que Warner Bros. no había recurrido desde que en 2009 aceptó que el director Todd Phillips y su equipo se llevasen un 30% de los beneficios de 'Resacón en Las Vegas', sobra decir que un acuerdo redondo para el mencionado director y cía (pero más que posible razón de que el estudio no hubiera vuelto a recurrir a un acuerdo similar).

Wilde además protagonizará este relato de terror del que apenas se sabe gran cosa, salvo que estará ambientada en torno a 1950 y que girará en torno a una ama de casa que descubre una "inquietante verdad" sobre su aparente vida perfecta.

La película parte de un guión original escrito por Shane y Carey Van Dyke ('Atrapados en Chernóbil') que será posteriormente re-escrito por Katie Silberman, no por casualidad guionista de 'Súper empollonas', la ópera prima de Wilde.

La película, estrenada el pasado 26 de julio en nuestro país, ha causado un gran impacto en la industria y público norteamericanos a pesar de no haber sido un gran éxito comercial, generando un pequeño "boom" que ha situado a Wilde como una de las cineastas del momento.

Además Silberman también ejercerá de productor junto a Roy Lee (de Vertigo Entertainment) y la propia Wilde.