Sam Mendes sigue interesado en hacerse cargo de la nueva película de la franquicia de James Bond; no obstante, tampoco quiere perder el tiempo, de ahí que ante la demora en la espera de una posible solución a los problemas económicos de la Metro-Goldwyn-Mayer que desbloqueen la hoy paralizada producción de 'Bond 23' haya decidido tantear mientras tanto otros proyectos entre tanto.

Al margen de su posible regreso a los escenarios a finales de 2011 con una nueva adaptación teatral de 'Charlie y la fábrica de chocolate', el realizador de 'Revolutionary Road' estaría interesado en la adaptación de la novela publicada en 2007 'On Chesil Beach', de Ian McEwan, cuyo otro de sus trabajos ya sirivó de base para la cinta de Joe Wright 'Expiación: Más allá de la pasión'. El propio novelista es quien está escribiendo su traslación a la gran pantalla de la mano de Focus Features, con quienes el cineasta ya colaboró en 'Un lugar donde quedarse'. Para el papel protagonista de la cinta, se habla de que el ex-marido de Kate Winslet estaría interesado en la ascendente Carey Mulligan, quien aún no ha confirmado su participación en la versión norteamericana de la saga Millenium que dirigirá David Fincher.Este proyecto, a su vez, podría ser el causante de que Mendes haya rechazado finalmente la propuesta de Disney de hacerse cargo de la cinta 'Oz, the great and powerful', para la que en su lugar se habría tanteado al realizador ruso Timur Bekmambetov, responsable de 'Wanted (Se busca)', y quien a su vez también se encuentra disponible ante los retrasos de una posible secuela de este título protagonizado por James McAvoy.

El argumento de 'On Chesil Beach', tanto del libro como de la película, lo podemos encontrar en la página web de la editorial Anagrama, responsable de su publicación en nuestro país: "Tienen poco más de veinte años y se conocieron en una manifestación en contra de las armas nucleares. Florence es una chica de clase media alta. Edward, en cambio, pertenece a una familia que vive en la zona baja de la clase media. Ambos son inocentes, y vírgenes, y tras un largo cortejo se han casado. Es un día de julio de 1962, y el tsunami de la revolución sexual no ha llegado a Inglaterra. Edward y Florence van a pasar su noche de bodas en un hotel junto a Chesil Beach. Y lo que sucede esa noche es la materia con que McEwan construye su chejoviano, terrible mapa de una relación, del amor, del sexo, y también de una época, y de sus discursos y sus silencios".