'Dumbo' - Cortita, y al pie
Soy bastante escéptico respecto a los remakes en imagen real que Disney está realizando de sus "clásicos animados"; especialmente, por la sensación de que el público, reducido a esa definición de "masa" propuesta por el sociólogo francés Gustave Le Bon, los recibe con los brazos abiertos simplemente por ser de Disney. La todopoderosa Disney cabe añadir, un gigante que, al menos ahora mismo, parece que es capaz de caminar sobre las aguas si se lo propone.
Buen ejemplo de todo ello es esta 'Dumbo', casualmente, o no, uno de los pocos remakes en imagen real de un clásico animado que podrían tener su razón de ser, lo produjera Disney o cualquier otra. La suma sencillez (o simpleza) de la película original es todo un acicate para acometer lo que, claramente, no es, o no tiene por qué ser un "remake" tan a la ligera como el resto, sino una reinvención en toda regla. Incluso quedando como por desgracia ha quedado.
Incluso en manos de un ex director como Tim Burton que hace ya años, muchos años es la sombra de lo que alguna vez fue un cineasta con nombre y apellido. Poco queda en este 'Dumbo' de aquellla eminencia de los 90, como poco queda de la magia que también residía (y/o reside) en aquellos títulos que convirtieron a Walt Disney y a su compañía en lo que no obstante, sigue siendo a pesar de pesares y no tan pesares. Cría fama, e hínchate a comprar otras compañías.
No deja de ser curioso como esta 'Dumbo' se ha construido convirtiendo a Michael Keaton en una especie de Walt Disney "malvado", absurdamente malvado cabe añadir y a la postre, claramente ridículo. No deja de ser llamativo que Disney se considere a sí misma como "la mala", tanto dentro como fuera de la película, en un acto que eso sí tiene más de posicionamiento de marca o postureo de manual que de algún tipo de consciencia, conciencia, ética o moral.
Ya se sabe, qué malvadas son las compañías que sólo están interesadas en el dinero. Las que hacen películas como esta 'Dumbo', un remake perezoso que da la razón a los que están en contra de los remakes. Una película realizada en punto muerto, mil veces vista y sin intención alguna por sorprender de ninguna manera imaginable que supedita todo su encanto a las orejas de un efecto digital. Que todos los intérpretes pongan buena cara no cambia gran cosa.
Siempre lo he pensado de la misma manera: Las compañías como Disney que viven de alguna forma de los niños, son muy conscientes del escaso bagaje como espectadores de estos. Siempre habrá un grupo muy amplio de niños que no hayan visto una película como este 'Dumbo'. Un grupo de niños para los que será "su primera vez". Y claro, hablamos de Disney. De la todopoderosa Disney. Y de un acabado audiovisual a la altura de una inversión multimillonaria.
De la todopoderosa Disney, pero también de la Disney que ha hecho carrera con ello. Lo peor de este 'Dumbo' no es la pereza con la que se ve que está resuelta, lo falso e hipócrita que se siente su discurso o lo frustrante que es pensar en tanto recurso malgastado en algo tan, tan, tan de estar por casa. No. Lo peor es que aún así, aún siendo plenamente consciente de sus enormes carencias, pecados e incluso alevosía y premeditación, es complicado odiarla.
Quiero decir, es tan indudable que este 'Dumbo' no es buena película como al mismo tiempo, también es indudable de que de alguna manera, funciona. O le funciona. Más que desprecio, es rabia. La rabia de no poder decir que la película es una pérdida de tiempo, por más que cuanto más pienso en ella menos me gusta. De tener que admitir, de mala gana, que aún a pesar de todo el pesar, si bien no puedo decir que la disfrutase tampoco puedo decir lo contrario.
O sea, como un pasatiempo simplón y eminentemente familiar 'Dumbo' no deja de ser "una película de Disney". De esa misma Disney. Cortita, y al pie, y con una de esas moralejas que ante la vida real no tiene ni media hostia. Da lástima, porque elige ser un producto hueco antes que una película, con o sin alma; da rabia, porque hay películas que proponen (o al menos lo intentan) mucho más y reciben mucho menos. Pero claro, si no fuera lo que hay, no sería lo que hay.
Y porque aunque parezca que duele, en realidad no duele mucho. Porque aunque parezca que no, ver volar a 'Dumbo' tiene su punto. Ese "punto" por el que cobra Walt Disney... y también, por el que el personaje de Michael Keaton, visto lo visto, merece arder en su propio infierno.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex