'Your Honor' es una de esas series que lo tienen todo para ser mejor que "buenas sin más". Hasta el punto de estar obligadas a ser mucho mejor que simplemente "buenas". Sobre el papel, desde luego, está de sobra capacitada para ello. Por algo decimos que lo tiene todo. Como para que lo notable parezca tan sólo suficiente, y no más que suficiente. Cuenta con dinero, el respaldo de la cadena, buenos creativos y una base sólida, una serie de prestigio como la israelí 'Kvodo', así como la imponente presencia de Bryan Cranston, un estupendo actor que llena la pantalla con su sola... presencia.

Lo dicho, sobre el papel todo pinta tan bien como luego todo luce tan bien en pantalla.

Así es como (más o menos) comenzaba mi crítica de la que poco después se convertiría en la primera temporada de 'Your Honor'. Lo que se dice una buena serie. Una serie tan "honorable" como al menos en apariencia lo es cualquier juez que así es presentado por el aguacil de turno. Su... señoría. Pero un error, un pequeño, simple e inocente error te puede costar la apariencia o la carrera. También te puede costar a tus seres queridos o incluso tu propia vida. Un simple e inocente error que no necesariamente tiene por qué ser importante o relevante, ni tan siquiera un error, te puede costar todo.

Esta segunda temporada es más, pero no de lo mismo. Es a la vez lo bueno y lo malo que tiene, siendo que aquí cada espectador dictará su propia sentencia sin tener por qué tener razón... o estar equivocado. Más que una segunda temporada, esta nueva entrega de 'Your Honor' se podría considerar una secuela. Son los mismos personajes, el mismo estilo, la misma estupenda apariencia... pero el juego y también las dinámicas son distintas. Es pero no es la misma serie, y más que una continuación se siente una consecuencia. De muy buena apariencia, pero sobre la que sobrevuela una duda:

¿Era necesaria?

A ver, no hay nada estrictamente necesario. 'Friends' podría haber durado cinco temporadas más o haber durado tan sólo cinco. ¿Eran necesarias las diez que tuvo? Lo cierto es que la mayoría de historias siempre dejan algún cabo suelto. Es muy, muy difícil cerrar por completo todos los frentes, al menos cuando hablamos de una historia como la de 'Your Honor'. Siempre nos quedará Nueva Orleans y algún pariente lejano que hasta entonces no había estado allí. La duda no es tanto si es necesario como si merece la pena. Y por ejemplo, las diez temporadas de 'Friends' sin duda merecieron la pena.

¿Merece la pena una nueva temporada de 'Your Honor'? Sí, pero a la vez puede que no del todo. Al igual que la primera, presenta una apariencia notable que transmite la imagen de ser (y de creerse) una serie "más que buena". Pero no pivota sobre un detonante tan claro y evidente como el de la primera, el accidente que tenía lugar en su primer episodio, sino sobre las consecuencias de lo que serían las consecuencias de dicho accidente. Se trata por supuesto de cerrar el círculo imaginario que vertebra todo, pero se podría afirmar que dicho círculo ya se cerró -de manera espiritual- al final de su primera temporada.

De esta manera 'Your Honor' continúa con una de las muchas opciones que podría tener, la cual puede no ser la que el espectador tuviera en mente. Puede que no sea incluso la más adecuada, de ahí que no se sienta tanto una continuación como una secuela. Lo uno no quita lo otro y lo importante sigue estando presente. Se sigue tratando en esencia y en la práctica de lo que se dice una buena serie, incluso de una serie notable al menos en sus formas y maneras. De una que merece la pena. Pero no se siente necesaria, en la medida en la que ni se siente la misma serie ni se siente tan imprescindible... o irrechazable.

Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex