'La Mif', del slang francés para denominar "familia", nace del deseo de comprometerse con un cine social y de la frustración hacia el sistema de protección juvenil. Fred Baillif, cineasta suizo autodidacta, nos trae una historia a caballo entre la ficción y el documental, con su estilo 'cinéma vérité' y tras un largo proceso de inmersión en un hogar para niñas.

La historia, que narra la experiencia de un grupo de chicas adolescentes que han sido alojadas en una residencia con asistentes sociales, nació a medida que Fred Baillif fue entrevistándose con jóvenes y empleados de un centro de acogida en Ginebra. Ellas, que tras dos años de talleres de improvisación y preparación terminarían siendo las protagonistas de la película, fueron quienes, dándole acceso a su realidad, se convirtieron a la vez en coautoras del guión.

El resultado es sorprendente, Una película rodada in situ en tan sólo dos semanas y antes siquiera de haber logrado financiación. Construida en una sólida base de realismo, con diálogos improvisados y una estructura narrativa que se terminó conformando en la fase de montaje, el relato nos brinda una pluralidad de voces que son dignas de escuchar.

Por Aina Riu
@aina_rv