'Host' - Atrapados en la red
El formato de película basado en el punto de vista de una persona sentada enfrente de un ordenador no es nada nuevo. La duologia 'Eliminado' ('Eliminado' y 'Eliminado: Dark Web') y 'Searching' son los precedentes más populares. Se trata de una variante del tan explotado found footage con la diferencia de que estamos viendo algo que está pasando y no extractos de grabaciones encontradas. Pero la idea es parecida: Que el espectador experimente la película como si fuese un protagonista más, aprovechando los pocos recursos con ingenio. 'Host' se rodó durante el confinamiento global ocasionado por la pandemia del COVID-19, de forma remota y con un grupo muy reducido de personas. El formato parece inventado para solventar los obstáculos que pone en el camino esta época que nos está tocando vivir, y 'Host' juega muy bien todas sus cartas.
Ambientada durante la pandemia del COVID-19, 'Host' trata sobre un grupo de amigos que deciden hacer una sesión de espiritismo a través del programa de videoconferencia Zoom. Y ya está. Cortita y al pie. La premisa es realmente simple, lo elaborado reside en la ejecución. Da la sensación de que toda la película es un plano secuencia, de que no hay cortes, y eso hace que todo sea muy dinámico y fluido. La decisión de que dure únicamente 60 minutos es algo atípico de ver en cines, pero muy acertado para lo que intenta el film. Durante los 60 minutos la tensión está asegurada. Se toma unos pocos para la presentación de personajes (personajes bien definidos y creíbles, tanto individualmente como a nivel de grupo) y para explicar en qué consiste el ritual que van a realizar. Incluso hay hueco para un par de bromas bien metidas. Pero a partir de cierto acto inconsciente, el nerviosismo del espectador va in crescendo y hasta los (originales) créditos finales no deja lugar a la calma.
'Host' te lo hace pasar mal. La pude ver en casa cuando pasó por el festival de Sitges, desde la pantalla de un ordenador portátil y fue aterrador. La he vuelto a ver en cines y aún recordando todo lo que iba a ocurrir, la tensión en los numerosos silencios era muy incómoda. Ayuda mucho a ello la credibilidad de las situaciones y sus personajes. Es un terror serio, olvidaros de ese tipo de terror que te mantiene tenso para romper toda esa tensión con un momento cómico. Rob Savage se toma en serio lo de asustar y mediante multitud de efectos prácticos, filtros de Snapchat y mucho ingenio, consigue un gran trabajo. Es un terror que usa bien los jumpscares y se basa más en silencios largos y pasillos oscuros. Su reparto transmite muy bien el terror que están viviendo los personajes que interpretan, todos hacen un buen trabajo. Curiosamente, y para reforzar la sensación de que lo que estamos viendo es algo cotidiano, los personajes tienen los nombres reales de los actores que los interpretan.
La película tiene una mala decisión. Solo una. El resto de las cosas que se le puede achacar vienen más por el tipo de film que es, o porque está encorsetada en un formato que a veces no da más de si, pero aprovecha al máximo todas las ideas que propone. Esa decisión (similar a lo que le pasó a M. Night Shyamalan con 'Señales') es torpe y ensucia el resultado global. Reduce el miedo del espectador y hace que se le vean las costuras cuando hasta ese momento no había nada que te sacase de la película. Su recta final, en general, no está a la altura del resto. Aun así, no estropea la experiencia y el resultado final sigue siendo positivo y muy recomendable.
Os ánimo a todos a que vayáis a vuestro cine más cercano y no os la perdáis, lo pasaréis mal (pero bien). 'Host' es terrorífica e ingeniosa. Capaz de crear escenas icónicas con un presupuesto ínfimo. Una de las películas a destacar este 2020.
Por Marc Sacristán García
@TheLebowskiMan