El cineasta vasco Julio Médem, responsable de títulos clave del último cine español como "Tierra" o "Lucía y el sexo", dio más detalles en Madrid del que será su próximo proyecto. Ambientada en la Atenas del siglo V a.C., recorrerá la vida de Aspasia de Mileto, prostituta primero y mujer de Pericles después. "Es lo más grande que me ha pasado nunca", confesó entusiasmado el realizador durante la rueda de prensa de presentación de la 13 edición del Festival de Málaga, certamen que clausura él mismo con su ya penúltima película: "Habitación en Roma".

Después de la Roma del siglo XXI, ahora le toca el turno a la Atenas clásica. Y 'Aspasia' es el nombre de este proyecto, con el que lleva ya cuatro años en fase de documentación, y que sigue descubriéndole nuevas e interesantes facetas de la época clásica. "Es probable que me queden dos años más", explicó. "Voy a acabar siendo todo un experto". "Todas las películas que ruedo se llevan algo de mí. Soy madre de todas ellas. Es un proceso de gestación y parto, que incluye también el desgarro", aseguró este cineasta licenciado en Medicina y experto en diseccionar las emociones.

Y así, tras llevar el amor a los confines árticos en "Los amantes del círculo polar" busca ahora la génesis del mundo occidental. Para ello, elige Grecia porque "así como en Roma se vivieron cinco siglos de esplendor, en Atenas se puede sintetizar todo en cincuenta años". Esta época, entre las Guerras Médicas entre Atenas y Persia y las batallas del Peloponeso de Atenas contra Esparta, concentra "nombres del pensamiento como Sócrates y Platón; la tragedia griega con Sófocles, Eurípides y Esquilo".

Médem también cita el nacimiento de la Historia con Heródoto -"alguien decidió que había que contar los hechos", reflexionó- y artistas como Fidias.

Todos ellos hilados a través de una heroína: Aspasia, que es título provisional de un proyecto todavía por definir. "Era una prostituta, pero entonces era la única manera que tenía una mujer de ser libre" y, no en vano, se casa con Pericles, abanderado de "una democracia radical pero maravillosa".

"Es una época, un lugar, unos paralelismos... Surgimos de allí, y estoy hablando de lo mejor de Occidente", dijo resumiendo el que consideró el mayor proyecto de su filmografía.

Medem, que habló también hoy de las dificultades de exhibición en salas comerciales y de la búsqueda de nuevos soportes y nuevos espacios de difusión, no limita el recorrido de este proyecto al cine.

"Cuando acabe de entender esta época decidiré qué hacer con todo esto, porque da para más que una película", aseguró.

En cualquier caso será "un viaje para deleitarse, para aprender y emocionarse", prosiguió. "Es mi gran reto y hay que hacerlo. Y os aseguro que voy a sacar algo maravilloso", concluyó.