'Jungle Cruise' es una película de aventuras que remite claramente a 'Piratas del Caribe'. La idea para Disney es la misma... la misma de siempre para Disney: Tirar de billetera. Pagar 20 euros por un huevo frito porque sí, porque se pueden pagar. Salta a la vista que ha costado mucho dinero, pero aunque ese dinero esté en la pantalla la película no luce en la misma medida. Este su gran problema: El gratuito e innecesario exceso de efectos digitales ya ni tan abrumadores, ni tan novedosos ni para nada discretos que tienden a alejarla de su propio espíritu aventurero.

O cuando menos es más, siendo que sale perdiendo claramente en la comparación con 'Piratas del Caribe', una película en donde sus excesos estaban acorde a las necesidades de la historia. A su favor, también, la pericia de un realizador con encanto y personalidad como Gore Verbinski en lugar de Jaume Collet-Serra, el equivalente a un funcionario que ficha de 9 a 2 y por la tarde se va a la piscina sin mirar atrás. Y aunque 'Jungle Cruise' no es una producción rutinaria, si es el tipo de película que ante la duda tira de billetera y efectos CGI antes que de ingenio.

¿Para qué currárselo si tienes dinero? Esto es, una película "acomodada" para un público "acomodado" que no sorprende ni levanta pasiones y que en cierto sentido, podría ser 'El Hobbit' en relación a 'El señor de los anillos'. O las secuelas de 'Matrix' respecto a la propia 'Matrix'. Fiel al canon de Collet-Serra, desaparece el entusiasmo de quien salta al césped a comérselo y se limita a trotar sobre él, con la actitud de quien se sabe ganador sin necesidad de disputar el partido. En realidad lo esperable. Es Disney. Y Disney no escatima en gastos buscando problemas.

Esto no convierte a 'Jungle Cruise' en una mala película ni mucho menos, y aunque Collet-Serra como director diste de poder ser considerado como un autor, tampoco deja de ser "una película de Jaume Collet-Serra": Esto es, una película entretenida, rodada con cierta elegancia y en suma, efectiva. Lo que cabe esperar, vaya, de una producción de aventuras de Disney que hubiera sido del montón... de no ser por Dwayne Johnson y Emily Blunt, por supuesto, cuyo carisma innato apuntala lo que con la presencia de ambos se convierte en un pasatiempo bastante agradable.

¿Y dónde está el problema? En realidad, no tiene por qué haberlo. Se trata de Disney. Se trata de más o menos lo esperable: Una inocente aventura impulsada a base de millones, efectos especiales y violencia inmadura a lo Bud Spencer y Terence Hill que tira de estereotipos y no se mete en líos; ni aún estando ambientada durante una Guerra Mundial, teniendo a unos desalmados colonizadores españoles como villanos o a un personaje abiertamente gay (aunque ssssh, no se pueda mencionar). Una película digna de Disney, una película digna de Dwayne Johnson.

Como ya lo era 'Piratas del Caribe', película que no obstante hacía valer sus millones para desafiar e imponerse a nuestras expectativas con gracia, alegría y mucho ímpetu. Lo que no hace 'Jungle Cruise', una especie de versión Disney de 'La reina de África' desprovista de todo lo que la hace especial (sin necesidad de efectos). Una ruidosa atracción que funciona en las distancias cortas como plan B cuando hay mucha cola en "las buenas". Algo así como la versión buena de la tercera entrega de 'La momia' respecto a las otras dos de Stephen Sommers.

Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex