'Bohemian Rhapsody: La historia de Freddie Mercury' - Larga vida a la Reina
La icónica introducción de "We Will Rock You", el galopante coro de "We are the Champions", la hipnótica operística de "Bohemian Rhapsody"... ¿quién no se anima al escuchar canciones tan vibrantes y famosas? ¿a que cuerpo humano no le resulta inevitable comenzar a moverse de alguna manera?
Me críe escuchando las canciones de Queen a través de los casetes de mi hermano. Antes incluso de comenzar a conocer el mundo ya conocía a Queen. En aquel mundo en el que no había internet, pensaba que pocos grupos podían ser más famosos que Queen. Puede que no fuera tal que así, pero es bonito recordarlo de esta manera: Queen no faltaba en ninguno de aquellos eternos viajes familiares en coche de los 80 que los millennials, tal vez, considerarán dignos de la época de la Inquisición. Ya no es sólo que sonaban de puta madre, es que además nos gustaba a todos.
Lo mejor y a su vez lo peor de 'Bohemian Rhapsody', la película, es que Queen mola mucho. Una leyenda como la de Freddie Mercury, un repertorio como el del grupo británico es una sombra tan amenazante como lo puede ser la de cualquier supervillano para el superhéroe de turno. Es difícil estar a la altura de Queen (y su legado), como también es difícil que Queen (y su legado) no te aupe al menos, a ojo, unos tres metros por encima del suelo.
Queen eleva a 'Bohemian Rhapsody', la película, por encima de la media del biopic respetuoso y adulador que, a fin de cuentas, es lo que cabe esperar que sea con Brian May y Roger Taylor supervisando la producción. Una suerte de repaso a lo "greatest hits", superficial y mayormente bonito, a lo que fue Queen, pero sobre todo la figura de un Freddie Mercury que, como se suele decir, fue demasiado grande como para que alguien se la hubiera podido inventar.
Lo de siempre cuando se trata de un biopic: La duda entre lo que los fans esperan ver, y que en teoría no puede faltar, o lo que el espectador no espera ver, y que en la práctica no debería estar de más. 'Bohemian Rhapsody' no es 'La red social', tampoco 'Yo, Tonya' aunque por momentos, a ratos, en sus mejores ratos se deje llevar por la incontenible alegría musical que desprendía ese 'El gran showman' del que debería, podría haber tomado más (y mejores) notas.
Queen eleva a 'Bohemian Rhapsody', la película, por encima de su propia irregularidad, y de un excesivo respeto que a falta de fondo, le impiden desmelenarse del todo. Suena bien, por momentos más que bien, aunque le falta esa pasión, energía y devoción que empuja a individuos como Freedy Mercury a sobresalir por encima de la plebe. Le falta garra, y esa loca mirada fan perdida en la corrección de quién ha sustituido la chupa de cuero por traje y corbata.
Decía Mr. Robot que "el magnetismo de Freddie Mercury es indiscutible. Sobre el escenario, con el micrófono en la mano o sentado al piano, se siente capaz de todo. Su magia consistía en el intercambio con el público, en la capacidad de crear un espacio en el que a todos se les permitía sentir lo mismo". En la transmisión de ese "magnetismo" que tan bien ilustra Rami Malek con su actuación es donde 'Bohemian Rhapsody', la película, nos deja a medias.
Siempre nos quedará la música. Porque vaya por delante que si el objetivo era que nos pusiéramos a escuchar de nuevo los discos de Queen, misión más que cumplida. Larga vida a la Reina.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
Bien explicado. Coincido plenamente.
Decir Queen es nombrar parte de la historia de la música del siglo XX, una de las mejores voces de todos los tiempos, canciones hiper reconocibles y energía en concierto; no hace falta ser un erudito musical para verlo y escucharlo. No hay secretos, o apenas los hay, sobre esta mítica banda. Pero mítico no es este filme.
Cuando se empezó a nombrar la existencia de este proyecto, empezó a sonar Sacha Baron Cohen para devolver a la vida a Freddie Mercury. Pensé que sería una gran elección por su parecido físico y por su más que demostrada capacidad actoral; quizás la entrada de Cohen hubiese dado una dosis de energía que tenía Queen y que le falta a este trabajo de Bryan Singer (sustituido por Dexter Fletcher por lo que todos sabemos, aunque no fue juzgado como debía ser, esto es, en un tribunal).
Rami Malek sustituyó al actor previo, y en este aspecto no hay quejas. Se ganó su sueldo al no solo ser muy parecido a Mercury, sino que fue Mercury. Tanto como decir que es la mejor actuación del año sería muy atrevido, al faltar por ver muchas actuaciones, aunque no hay prácticamente nada que objetar a su trabajo.
Por el contrario, hay que sacar más de un pero al trabajo total; a pesar de que se ven situaciones no alegres en la cinta, no excarba del todo en todo el ser del protagonista, tan solo se ven pasajes que ya sabe cualquier aficionado a la música y a Queen. Es un trabajo que intenta evitar mayormente los oscuros de la vida de Mercury que, aún siendo un artista totalmente espectacular, los tiene como cualquier ser humano. No pensaba que fuera a tocar el tema del SIDA al saber del espíritu positivo de la cinta, sin embargo lo hace; si Tom Hanks hizo de enfermo de SIDA en 'Philadelphia' mostrando también los momentos duros que acarrea portar esta enfermedad sin ser demasiado dramático, esta 'Bohemian Rhapsody'. también podía hacerlo.
Ese espíritu positivo es válido para los momentos musicales y los momentos donde Queen eran super estrellas, pero para todo un largometraje la estropea viendo un filme que es muy correcto y que navega con el piloto automático.
No es, en definitiva, un trabajo a la altura de la leyenda de Queen y de Freddie Mercury. Irónicamente, falta lo que siempre tenía la banda: energía, ganas de destacar. No sería una mala idea hacer una secuela sobre los últimos años de Queen y Mercury; no es que haya morbo, creo que quedan cosas por contar.
7
4/10
A mí me encanto, pero no puedo reprochar que la crítica es un descojono.
Me ahorro una crítica, mejor explicado imposible. Y la he disfrutado, sin ser además grandísimo fan ni seguidor de la banda. Pero es la constante sensación de convencional, de dar para mucho más.
Nota: 6'2