Día 3: Un Billy Elliot de Georgia y un Martin Eden de Nápoles
Domingo cargado de dinamita para el habitante sevillano. Primero por unas elecciones presidenciales con un resultado que tiene tanto de sorprendente como de esperado; segundo, porque la ciudad se paraba para presenciar el choque de los dos equipos más grandes de la ciudad en el derbi sevillano; y tercero, porque era un domingo de títulos sumamente apetecibles para...