Con trabajos previos en el área del cortometraje con Las insólitas imágenes de Aurora; Malapata; y XX-XY: Fuera del mundo; o sus previos largometrajes Virgen de medianoche (1993); y Cupo limitado (1999); Ulises Guzmán vuelve con el documental Alucardos: Retrato de un vampiro (México-2011) con el que ha cosechado gran éxito internacional.

De momento, tiene su estreno en la Cineteca Nacional, luego de hacerse con los premios de mejor película y dirección en Cinefantasy del VI Festival Internacional de Cine Fantástico, Brasil 2011, mención honorífica del Zinema Zombie Fest en Bogotá, Colombia 2011, en el Festival Pantalla de Cristal, México 2011: mejor película, director, guión, investigación, película latinoamericana del VI Festival Internacional de Terror y Ciencia Ficción (Montevideo Fantástico), Uruguay 2011; además de participar en muchos más.

En sus 85 minutos, este filme que cuenta con guión del mismo Guzmán junto con Edna Campos; y que es producido por Oniria Films y el apoyo de Foprocine, cuenta con las intervenciones de Manuel Durán, Eduardo Mondragón, Juan Carlos Colombo, Luis Romano, Óscar Olivares, Mikel Mateos, David Castillo, Christina Mason, Claudia Figueroa, Carlos Monsiváis, Tina Romero, Eduardo Moreno, Alessandra Moctezuma, Liliana Ortiz Durán, hijas de Juan López Moctezuma, Luis López Moctezuma, Alexis Arroyo, Xavier Cruz, Eduardo Ruiz Saviñón, Jorge Ayala Blanco, Rebeca Jiménez, Mauricio Matamoros, Jorge Victoria, Eduardo Terán Gilmore, Bertha Ortega, Bertha Sandoval, Roberto Aymes, Carlos Montaño, y Pedro Díaz del Castillo.

En Alucardos: Retrato de un vampiro, se habla terror, transexualidad y un filme de culto eterno. ¿Qué hay en la mente del director de cine de terror Juan López Moctezuma y en la de sus fans, Manolo y Lalo, quiénes no sólo están obsesionados con la película mexicana de horror Alucarda, sino que su corazón les dice que son ellos los verdaderos personajes de la misma? Tras encontrar en un hospital psiquiátrico a su director, ambos deciden raptarlo para hacerlo recordar su pasado gloriosamente retorcido… Un filme inclasificable, que igual recurre a entrevistas, imágenes de archivo y reelaboraciones de un pasado que quizá ocurrió sólo en las pesadillas de sus protagonistas.