El 28 de junio fue el día en que para México llegó a salas la cinta ¿Qué pasó ayer? Parte III (The hangover. Part III), la tercera entrega de la franquicia iniciada en 2009. Una cinta veraniega que era esperada desde meses atrás por cientos de fans que querían ver el desenlace de las aventuras y desventuras del trio protagonista.

Sin embargo, llegado el día en el que compartió cartelera con Guerra mundial Z; Sobre ella; Buscando a Sugar Man; y El gerente de recursos humanos, resultaba curioso que Cinépolis, la empresa mexicana de exhibición cinematográfica más grande de Latinoamérica y la 4ta. a nivel mundial, no la tenía dentro de su programación en ninguna de sus salas.

La cinta, en cambio, sí la exhibían el resto de las cadenas como Cinemex, Cinemark, MMCinemas, y hasta los pequeños cines no pertenecientes a complejos. Lo anterior, para quienes son asiduos a los complejos de Organización Ramírez, o para quienes solo hay Cinépolis en su ciudad, han tenido que buscar otras opciones, como acudir a la competencia, o descargarla de Internet en una calidad ínfima R6; incluso, quienes cuentan con su membresía prepagada, han tenido que invertir dinero por un título de peso, al acudir a otros cines.

Sin embargo, una cadena del tamaño de Cinépolis no solo ha tenido que lidiar con el hecho de que está perdiendo varios millones de pesos por no exhibirla, y cuando decimos varios, nos estamos viendo cortos. Sino que también, la autonombrada La capital del cine, está siendo insistentemente cuestionada por la ausencia de la cinta en carteleras por centenares de fans que en redes sociales como Facebook y Twitter, se encuentran más que decepcionados y molestos.

Desde luego, sabemos que las razones que llevaron a Cinépolis a no estrenar la cinta, fue porque hubo complicaciones en las negociaciones en cuanto a los precios de copias que son distribuidas por Warner Bros. Cinépolis pedía precios más accesibles para su cadena pero la distribuidora se negaba. El resultado fue visible este pasado 28 de junio, Cinépolis no aceptó las condiciones de Warner Bros.

Si hacemos memoria, no es la primera vez que estas dos compañías tienen un conflicto de intereses en cuanto a las ventas de copias de los filmes. Recordemos el verano de 2010, en la cual el esperado filme El origen (Inception) corrió con la misma suerte en Cinépolis y Cinemex al no querer pagar a Warner Bros. el 50% de la recaudación en taquilla, cuando sí lo hicieron Cinemas Lumiere y Cinemark; aunque posteriormente, ya se podía encontrar el filme en carteleras, posible fruto de una renegociación.

Lo que es muy cierto, es que si Cinépolis desea renegociar y sacar fruto de la exhibición de ¿Qué pasó ayer? Parte III, debe hacerlo a la brevedad, antes de que desista el interés de los cinéfilos, aunque por el candor de sus comentarios lo dudamos. Si bien es cierto representaría también ganancias para Warner Bros., toda vez, que el no tener su cinta en las pantallas de Cinépolis, ha generado que no alcance grandes niveles de recaudación en taquilla, por la aún escasa presencia de los otros complejos en el resto del país.