Los Increíbles 2 (Incredibles 2)

[Wanchope]

Los Increíbles 2
(Incredibles 2)

SINOPSIS:
Regresa nuestra familia favorita de superhéroes.


CRÍTICA: Como si no hubiera pasado el tiempo

Recuerdo perfectamente cómo, a finales de 2004, salí de ver 'Los Increíbles' con una sonrisa de oreja a oreja. Con ese entusiasmo vital que te puede llegar a proporcionar una película como 'Los Increíbles'; sobra decir, a la altura de las expectativas como tres años más tarde lo estuvo también 'Ratatouille'. A la altura de las expectativas generadas por el ya, a esas alturas, buen nombre de Pixar. Pero sobre todo, a la altura de las expectativas generadas por 'El gigante de hierro', película que el tiempo ha ido colocando en el lugar prominente que se merece.

El tiempo, que pasa al mismo tiempo que nos da perspectiva. El tiempo, que igual nos arregla que nos estropea todavía un poco más. Han pasado 14 años desde la ahora primera entrega, y mi admiración por Brad Bird no se ha visto empobrecida ni por 'Misión: Imposible. Protocolo Fantasma' ni por 'Tomorrowland: El mundo del mañana'. Al contrario. 14 años, más que suficientes como para que de cara a una secuela como esta, los pueda cargar el diablo. 14 años, más que suficientes como para convertir el culto en religión, y el respeto en negación.

Para la hemeroteca, para el recuerdo: Salí de ver 'Los Increíbles 2' tan contento, alegre y feliz como a finales de 2004 de ver 'Los Increíbles'. Como si hubiera sido ayer, como si no hubiera pasado el tiempo; como si aún siguiera siendo aquel chaval al que la vida aún no había dejado en mal lugar. De nuevo esa sonrisa de "¿a qué huelen las nubes?", de oreja a oreja. De nuevo esa alegría acompasada por la melodía, una vez más, retumbando insistentemente, de un Michael Giacchino que estás en los cielos, santificado sea tu nombre y nuestros oídos.

No se me ocurre mejor halago posible que el emocional: Ser capaz de reeditar esa misma sensación tantos años después, y de hacerlo con un poderío arrollador virtualmente idéntico. De lograrlo de tal manera que no parezca que ha pasado el tiempo que si ha pasado para nosotros, que no para la familia Parr: 'Los Increíbles 2' comienza exactamente allí dónde acabó 'Los Increíbles'. 14 años que de pronto, en un suspiro, desaparecen en ese mismo pliegue del tiempo que permitía a la Event Horizon de Sam Neill saltar de un punto a otro de la galaxia.

Da lo mismo que esta secuela, que cualquier secuela sea mejor o peor que la película que la antecede cuando las prestaciones son, como en este caso, virtualmente las mismas. Es un debate tan absurdo cómo elegir cuando puedes quedarte con todo. Esta victoria es la más importante, hagamos o no uso del comodín de un efecto sorpresa que, dicho sea de paso, no siempre tiene por qué jugar de local. Pero si 'Los Increíbles' fuera un solomillaco envuelto en papel de regalo (para quien lo quiera así), 'Los Increíbles 2' sería otro solomillaco, sólo que sin envolver de regalo.

Y a buen seguro que un buen, o al menos mejor entendedor le sabría sacar muchos más matices que un servidor que a la hora de la verdad, prefiere, simplemente, limitarse a disfrutar de lo que no deja de ser un solomillaco que alimenta como si fuera el mejor. 'Los Increíbles' llevan en nuestras vidas tanto tiempo como para que sea innecesaria una presentación formal. Como para que baste decir que 'Los Increíbles 2' está a la altura de lo que cabe esperar de una familia que arraigó en nuestros corazones antes de que muchos de los poderes de Jack-Jack se pusieran de moda.

'Los Increíbles 2', al igual que las sucesivas entregas de 'Toy Story', no hace sino enriquecer nuestro respeto, así como un universo que amplía, y de uno a cien años en lugar de estirar. El bien se vuelve a imponer al mal, por supuesto, y también, las ganas de volver a verla que surgen inmediatamente después a cualquier mínima cascarrabieta de un sujeto de laboratorio que nunca tuvo infancia. Se podría hilar mucho más fino, claro, pero no me da la gana. 'Los Increíbles 2' es esa misma sonrisa, esa misma alegría, ese mismo espíritu festivo de hace 14 años.

Tan sencillo, práctico y rotundo como eso. Y como si no hubieran pasado el tiempo (salvo por los pelos de menos y los kilos de más).

Nota: 8.5


Lo Mejor:
- Que sea capaz de reproducir las buenas vibraciones de la primera

Lo Peor:
- Nada relevante

[andreina139]

Los increíbles 2 me ha parecido la mejor película de Disney Pixar actualmente, es divertida y entretenida de principio a fin. Creo que es importante el mensaje que nos deja acerca de la familia, la sinceridad y los buenos momentos con nuestros seres queridos, es una excelente comedia familiar para ver con los más pequeños de la casa y pasar un rato agradable

[Wanchope]

CRÍTICA: Como si no hubiera pasado el tiempo. Parte 2

En su momento salí de ver 'Los Increíbles' con una sonrisa de oreja a oreja. Con ese entusiasmo vital que puede llegar a proporcionar una película así, sobra decir, a la altura de las expectativas generadas tanto por el ya en aquel entonces buen nombre de Pixar como por 'El gigante de hierro', estupenda película que el tiempo, y el sentido común, ha ido colocando en el lugar prominente y privilegiado que merecía desde el principio.

El tiempo, que pasa al tiempo que nos ofrece una perspectiva. El tiempo, que igual nos arregla lo que igual nos estropea un poco más. Han pasado 14 años desde la ahora primera entrega. 14 años, más que suficientes como para que de cara a una secuela como esta, los pueda cargar el mismísimo diablo. 14 años, más que suficientes como para convertir el culto en una religión, y el respeto en obstinada negación.

Para la hemeroteca, para el recuerdo, para mi configuración como persona de ahora en adelante: Salí de ver 'Los Increíbles 2' tan contento, alegre y feliz como lo hice a finales de 2004 de ver 'Los Increíbles'. Como si hubiera sido ayer, como si no hubiera pasado el tiempo; como si aún siguiera siendo aquel chaval al que la vida aún no había dejado en mal lugar. De nuevo esa sonrisa de oreja a oreja.

De nuevo esa alegría, incontenible, acompasada por la melodía, una vez más, retumbando insistentemente, de un Michael Giacchino que estás en los cielos, santificado sea tu nombre y nuestros oídos. De nuevo esa sonrisa en la cara al rememorar aquel visionado que ocurrió hace ya mes y medio, toda una vida en una sociedad digital parapetada tras un teléfono móvil y el "gol de Señor" como mantra.

En aquel entonces no se me ocurría mejor halago posible: Su capacidad para reeditar esa misma sensación, tantos años después y con un poderío arrollador virtualmente idéntico. De lograrlo de tal manera que parezca que no ha pasado el tiempo para la familia Parr como si lo ha hecho para el resto de los mortales. Ahora, que mes y medio después la alegría residual de su visionado sigue estando muy presente.

Da lo mismo que esta o cualquier otra secuela sea mejor o peor que la película que la antecede mientras las prestaciones sean virtualmente las mismas. Es un debate tan absurdo cómo elegir una sola película cuando como hace Tom Cruise, se puede elegir el cine por encima de cualquiera de ellas. Cuando como sucede con películas como 'Los Increíbles' (uno o dos), el paso del tiempo no supone el olvido.

La familia Parr arraigó en nuestros corazones antes de que muchos de los poderes de Jack-Jack se pusieran de moda y Marvel Studios reescribiese las normas del género a su gusto. Y 'Los Increíbles 2', al igual que las sucesivas entregas de 'Toy Story', no hace sino reverdecer ese recuerdo, esa cálida gratitud; ese respeto de un público adulto igualmente entregado y sin vergüenza por ir solo o sin niños a ver "una de dibus".

El bien se vuelve a imponer al mal, por supuesto, y también, las ganas de volver a verla que surgen inmediatamente después a cualquier mínima cascarrabieta de un sujeto de laboratorio que nunca tuvo infancia. 'Los Increíbles 2' es esa misma sonrisa agilipollada; esa misma alegría instintiva infantil; ese mismo espíritu festivo del siente todos, coño, que aquí se viene a disfrutar de hace 14 años. O de hace mes y medio.

Tan sencillo, práctico y rotundo como eso.

Nota: 8.5

[Wanchope]

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— flantasma (@Flantasma1) 5 de agosto de 2018

[KellerDover]

Puede sentirse orgullosa. Después de tantos años ha salido una secuela bastante original y con un tono muy similar.
Como pegas, básicamente una: Jack-Jack. Haciendo referencia a 'Gru', el bebé de la familia ha sido "minionizado", abocando su personaje a una caricatura inverosímil y que por momentos me saca fuera de la película, convirtiéndolo en su juguete para hacer reir sin importar si es coherente o no.
El villano está bastante bien llevado, aunque por desgracia Sindrome dejó el listón muy alto.
Y el tramo final como se ha comentado por ahí deja un poco que desear.

... Joder, es que la primera es épica en cada escena.

7.5

[URBI]

Me ha parecido inferior a la primera, aunque eso no significa que no me haya gustado. El villano aunque cumple, es claramente inferior a Síndrome en carisma y motivaciones, además ha habido algunas ocasiones en que he desconectado, cosa que no me ocurrió en la primera.
Si tomamos el ejemplo de Wancho podríamos decir que si al salir de ver la primera iba con una sonrisa de oreja a oreja, al encenderse las luces hoy sólo tenía dibujada una media sonrisa. Satisfecho, SI. Pero NO maravillado
Nota: 7

[jescri]

Espectacular. Es imposible no empatizar con estos personajes ya seas padre, hijo o lo que seas. Yo sí la veo al nivel de la primera, o al menos muy próxima, pues no se puede dudar que la película es disfrutable desde el primer al último minuto. Un 8,5.

[Guillermolawe]

Muy bien hecha, escenas de acción maravillosas... Pero falta de sorpresas...

Para mí bastante por debajo del nivel de Píxar... Un 6.

Por curiosidad, ¿alguien fue con niños? ¿Les gustó?

[jescri]

Muy bien hecha, escenas de acción maravillosas... Pero falta de sorpresas...

Para mí bastante por debajo del nivel de Píxar... Un 6.

Por curiosidad, ¿alguien fue con niños? ¿Les gustó?

A mis hijos les encantó, sí   

[Turbolover1984]

La 1ª me gusta mucho mucho. Y no lo digo desde la nostalgia lejana ni tenerla en un pedestal de cuando se estrenó, sino que la he visto varias veces más en años más recientes y me siguió pareciendo igual de buena. Esta 2ª parte es entretenida, con mucho ritmo, con momentos divertidos y en general un film de animación bueno. Pero le falta un plus para estar a la altura de la 1ª o de las pelis top de Pixar. Carente de sorpresas y de esa magia especial de la factoría.

Nota: 6'5