Sed de mal (1958)

Iniciado por replicante, 01 de Agosto de 2009, 01:59:07 PM

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replicante

                                 
                                                       SED DE MAL




Ficha


Director : Orson Welles
Guión : Orson Welles, basado en un relato de Whit Masterson
Fotografía : Russell Metty
Música : Henri Mancini
Montaje : Virgil Vogel, Aaron Stell y Edward Curtis
Dirección artística : Alexander Golitz y Robert Clatworthy
Producción : Albert Zugsmith(1958)
Productora : Universal Picture

Orson Welles (Hank Quinlan), Charlton Heston (Miguel Vargas), Janet Leigh (Susan Vargas), Joseph Calleia (Pete Menzies), Akim Tamiroff (Joe Grandt), Marlene Dietrich (Tanya), Valentin de Vargas (Pancho), Joseph Cotten (El superintendente), Joanna Moore (Marcia Linnaker), Ray Collins (Adair), Zsa Zsa Gabor (La dueña del cabaret), Mercedes McCambridge (La jefa).


         


Sinopsis


Un agente de la policía de narcóticos llega a la frontera mexicana con su nueva esposa justo cuando explota una bomba. El policía decide emprender la investigación con el apoyo del jefe local, el obeso Quinlan, muy reputado en la región por sus métodos, pero brutal y ávido. Una lucha feroz se desata entre los dos hombres, cada uno de ellos tiene pruebas contra el otro.


                   


                   


                   


Acerca de Sed de mal


                  Cine policiaco made in Orson Welles con todo lo que ello conlleva: fuerza dramática, modernidad y buen análisis de los personajes, aunque éste no sea demasiado introspectivo, con sus defectos innatos que los llevan a actuar en ocasiones a impulsos, a veces con mezquindad, otras  maquiavélicamente, como Hank Quilan, jefe local de policía interpretado por un obeso y desaliñado Orson Welles que a pesar de ser, no digo pura maldad, sino maldad ambigua(donde el componente noble de justicia se podría apreciar, pero muy lejano y como si de una ensoñación se tratara), tiene una intuición que le ha dado fama y un componente de leyenda viva, pero ya entrada en años y muy deteriorada. Quilan no acepta que se metan en sus asuntos; su autosuficiencia asusta y atrae a un tiempo. Es una especie de "dios" que estaría siempre por encima del bien y del mal y este "don" que tiene le valdría para señalar, como haría cualquier otro "dios"(con ese dedo acusador) a los que son culpables de algo y deben ser castigados; lo que ocurre es que su forma de hacer justicia es particular porque va en contra de lo que él mismo debería defender: la ley, conflicto permanente en películas de este tipo(policíacas, de cine negro) en las que su cumplimiento en ocasiones va en contra de lo que debería ser la auténtica justicia( pensemos en otras películas con el mismo tema, aunque contadas de una forma muy diferente, por ejemplo Harry el sucio, o en series de televisión, como la transgresora Dexter).

                    Pero, ¿qué hace del personaje que interpreta Wells ser un hombre malo? Creo que es muy claro: que los métodos que utiliza para encerrar a un asesino o delincuente de cualquier otro tipo son tan, o más, delito que los delitos mismos que comenten los hombres a los que persigue; Quinlan es otro ángel justiciero, pero conchabado con el diablo, es ángel y demonio a un tiempo.

       
Spoiler
Pero el ser ángel no te libera de lo que hace el demonio (él después de todo, según se interpreta en la película, lleva a los malos a la cárcel; y en un final absolutamente impactante te das cuenta de este hecho, con la gran ironía que supone tomar finalmente conciencia de ello)
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                   Cambio de tercio. Ya el inicio de la película nos parece deslumbrante, hay un dominio técnico y de puesta en escena total, con una primera toma sin corte alguno que dura aproximadamente 4 minutos(me recuerda en la puesta en escena a los primeros planos de la película Río Bravo, sin diálogos, pleno virtuosismo en el manejo de la cámara y de los encuadres, sólo que en Sed de mal hay más movimiento ya que esta escena se desarrolla en la calle y la de Río Bravo en el interior de una cantina) en la que vemos por primera vez a la pareja protagonista: Miguel Vargas(Charlton Heston, que está más moreno que de costumbre para que lo creamos más en su papel de mexicano - hay algo de prejuicio aquí; también hay mexicanos rubios-) y su esposa Susan Vargas( como una atractiva y sensual Janet Leight - Psicosis-). Aquí la cámara nos centra en la acción misma, es una cámara curiosa que poco después se precipita en lo que será el objeto de la investigación, este suceso está rodado con un movimiento de cámara que puede parecer muy actual y que, por ser una película del año 58, puede llevarnos a confundir que se pueda tratar de un fallo técnico sin demasiada importancia por la falta de medios presupuestarios, pero que no creo que lo sea ya que desde el punto de vista cinematográfico Welles era de un virtuosismo descarado. Este movimiento de la cámara Wells lo hace para darle más realismo y precipitación a unas escenas en las que este estilo es el que mejor encaja, como no se podía esperar menos del autor de Ciudadano Kane.

               En la película también se mezclan otros personajes a parte de Quinlan, Vargas y su esposa; un mafioso mexicano llamado Joe Grandt y su clan, la mayoría parientes, acechan a Vargas por motivos que tienen que ver con el tráfico de drogas y un hermano de Joe acusado por este motivo.

Spoiler
Cuando se ve acorralado por Vargas, Quinlan tratará de hacer un arreglo con el jefe de la familia Grandt, a sugerencia de éste, para sacarse a Vargas de encima. A los dos les vendría bien tenerlo bajo sospecha y trazan un plan para conseguirlo; pero Quinlan tiene una sorpresa final reservada para el jefe mafioso. Quinlan lo utiliza para conseguir un fin de algún modo noble, pero con unos procedimientos que lo condenan.
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              Sed de mal es puro virtuosismo cinematográfico, con personalidad propia marcada por el genio de Wells, es una película especial por muchos motivos, uno de los cuales sería el lugar donde se desarrollan los acontecimientos: la frontera entre Mexico y los Estados Unidos; un lugar donde se junta lo peor de los dos países, como dice en una escena el personaje interpretado por Charlton Heston.

             Muchos de los rasgos personales de algunos personajes y su forma excéntrica de actuar, con una atmósfera que agobia y parece dejarte sin demasiado aire, se dan, o se parecen, a situaciones y personajes de algunas de las películas de la filmografía de David Lynch, sólo que con menos dosis de locura;  fijémonos sino en las escenas del motel donde la gente del clan de los Grandt acechan a la esposa del jefe Vargas: aquí se aprecia un evidente vapuleo emocional hacia la mujer de Vargas, parecido al que le hacen muchos de los personajes de las películas de Lynch a sus víctimas...

              Si hablamos de su estructura, la película tiene para mi tres partes claramente diferenciadas; en la primera se nos ofrece el acontecimiento que provocará la investigación y los conflictos que surgen entre los Vargas (acoso a su mujer) y los Grandt. En la segunda parte Quinlan acecha a su presa, el presunto culpable del suceso clave de la trama. Se podría decir que "el acechador acecha", como suele ser costumbre en Quinlan y sus "víctimas culpables".
Spoiler
Y en la tercera y última parte "el acechador es acechado", osea: Vargas, que se da cuenta del tipo de policía que es Quinlan por el claro engaño y manipulación de las pruebas con el sospechoso, lo acecha para descubrir sus asuntos negros y destapar toda la corrupción.
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         La música misteriosa de Henry Mancini mezcla diversos estilos, entre ellos el jazz y el rock ´n roll en un conjunto bello y muy sugerente, pleno acierto de Wells en la elección, como suele acertar de pleno Tarantino escogiendo la música de sus películas; este es un añadido que se agradece porque parece liberar de cierta opresión  por la densidad de algunas de las escenas de la película.

       El brío, la contundencia y ese fluir continuo que no nos abandona, a veces como a tirones que te hacen sobresaltar un poco, son otras de las peculiaridades del estilo que Wells le ha dado a esta joya del cine negro, todo condimentado con una recreación de las situaciones que sugieren mucho más de lo que explicitan y que le dan a Sed de mal ese aire tan especial y misterioso, como una ensoñación  parecida a una pesadilla que angustia por momentos, pero de la que tienes esperanza de salir ileso, aunque con algunos rescoldos quemándote allá en lo profundo...

                   9.60/ 10







                                       




- No sólo ve películas, se las come
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Guevara

Es una película que volví a ver hace menos de 3 semanas. Tenía previsto realizar un  comentario sobre ella cuando tuviera tiempo, pero te me has adelantado, HispanO, así que voy a colocar las notas que ya tenía sobre ella y mis impresiones.

Basada en la novela "Badge of Evil" de Whit Masterson, ésta fue la primera película que Welles rodó en Estadios Unidos tras estar 10 años en el exilio, y fue también la última que hizo allí antes de marcharse del país de nuevo. Charlton Heston había insistido ante los productores para que le contrataran para escribir el guión, dirigir la película y reservarse uno de los papeles protagonistas, y Welles aceptó también a cambio de cobrar únicamente su sueldo de actor y sin haber leído aún la novela en la que se basa la película que, en inglés, se llama "Touch of Evil" y, francamente, no entiendo a cuento de qué viene el título es español.

El visionado se inicia con un rótulo que advierte: "En 1957 Orson Wells terminó el rodaje de "Sed de mal" y realizó la primera versión de la película. El estudio pensó que se podría mejorar. Rodaron escenas adicionales y realizaron una nueva versión. Welles la vio y en unas horas escribió un informe apasionado de 58 páginas en el proponía modificaciones. Esta versión supone un intento de respetar dichas modificaciones y de mostrar "Sed de mal" tal y como él habría querido". Lo digo a modo de aviso porque de esta película existen tres versiones, el montaje planeado por Welles en 1957 que no se llevó a cabo, el que  realizó los estudios, que fue el que se estrenó en 1958 y, finalmente éste que es el que yo he visto, la restauración que de la película se realizó en 1998, que contiene la famosa secuencia inicial en un único plano y libre de los títulos de crédito y, además, aprovechando el material rodado que aún se guardaba en los estudios, se realizaron la mayor parte de las 15 modificaciones expuestas por Welles en su informe.

El rodaje se realizó en California, en exteriores de Los Angeles y platós de los Estudios Universal, con un ínfimo presupuesto propio de una película de serie B. Todo él supuso un pulso entre Welles y los productores. Éstos le habían prohibido rodar en el lado mexicano, por lo que Welles tenía que hacerlo de noche. Además, durante el día iba reescribiendo el guión y dejaba improvisar bastante a los actores. Fue en el montaje de la película donde se desencadenaron todos los problemas.

La acción de la película se sitúa en una pequeña localidad de la frontera de Estados Unidos con México, Los Robles, a lo largo de un par de días de 1957.  Un hombre corre, agazapado, para colocar una bomba en el maletero de un coche. Unos segundos más tarde, una pareja sube al automóvil y se alejan del lugar. El coche con sus alegres ocupantes circula por las calles de una ciudad por la que pasean y se mueven infinidad de personas y, todo ello acompañado del ritmo de una sugerente música. ¿Cuándo va a explotar la bomba? Ésta es la famosa secuencia inicial en un único plano de la que todo el mundo habla y que, al parecer, si no lo está ya, debería figurar en todos los manuales de cine.

El inspector de la policía mexicana Ramón Miguel Vargas, Mike (Charlton Heston) y su flamante esposa estadounidense Susan (Janet Leigh), cruzan a pie la frontera de Estados Unidos con México. El coche con la bomba está detenido justo junto a ellos, esperando también para pasar la frontera. Finalmente la bomba explota y como lo hace en el lado estadounidense, se hace cargo de la investigación el capitán Hank Quinlan (Orsen Wells), pero como gran parte de las pesquisas han de hacerlas en suelo mexicano, Vargas también se ve implicado en el asunto, con lo que los caracteres y formas de ser y de trabajar de ambos hombres salen a relucir. Vargas es joven, honesto y fiel seguidor de la ley en su lucha contra el narcotráfico, de las normas y de la justicia. Quinlan es perro viejo, despótico y totalmente carente de escrúpulos, capaz de usar cualquier tipo de tretas o artimañas con tal de resolver los casos a su gusto, creído de estar por encima del bien y del mal, soberbio y odioso y, además, tremendamente obeso.

La primera frase que Welles dice al ver a Vargas es "no parece mexicano", que es justamente lo que seguramente pensamos todos al ver a Heston en el papel, muy a pesar del maquillaje para ponerle la piel mucho más morena, el teñido del pelo y los pedazos de cejas que le plantaron al pobre.

Es ésta una película típica de cine negro sin algunos de los clichés típicos de éste. No hay mujer fatal, no hay un detective que nos va contando las cosas con voz en off. Pero sí tiene una fotografía oscura, ambientes de luces y sombras que a mí tanto me gustan, una atmósfera sórdida y corrupta y, por el lugar en el que se desarrolla, muy calurosa, agobiante, uno también suda junto a los personajes de la ficción. Corrupción al descubierto, de eso estamos hablando, y de mantener el prestigio a toda costa, incluso a costa de la vida de un inocente. Y para rematar un poco más la faena, también se colocan sobre el tapete los prejuicios raciales.


Personalmente me choca un poco la música que acompaña a las imágenes. No es que esté mal, pero... es un poco extraña, no sé cómo definirla, no a la música que es una mezcla de jazz, rock & roll, mambos o música de pianola, si no a su conjunción con las imágenes. Pero es que toda la película resulta un tanto extraña, con una narración un tanto caótica, sobre todo al principio, para una historia en general bastante errática y complicada, de ésas en la que cuesta "entrar" y que han de pasar más de treinta minutos para que el tema cobre, de repente, gran interés.


Heston y Welles están francamente bien los dos, en unos papeles perfectamente "dibujados" por el segundo, que lógicamente se reservó el mejor, al menos para mí, que siempre me gustan más los "malos". Janet Leigh tiene un papel bastante simplón, sin grandes registros dramáticos que explotar, y de nuevo en peligro en un motel. Bueno, en realidad no de nuevo, porque su pase a la historia del cine en un motel, en "Psicosis" de Hitchcock, aún tardaría dos años en producirse. Yo no sé cómo esta mujer se atreve a entrar en un sitio de éstos. Yo desde luego, llego a uno y veo que está ella, y me largo con viento fresco pero sin despedirme, vaya.   :poss

También podremos ver a una Marlene Dietrich caracterizada como una gitana zíngara, Tanya, con más pinta de travesti que nunca, con un pelucón moreno que no la favorece absolutamente nada a la pobre, en un breve pero estelar papel que, sin embargo, atesora algunas de las mejores frases de la película. Se dice que grabó toda su participación en una única sesión, que no me extraña en absoluto porque parece que aprovechó a echar un cable en el rodaje en una visita que hizo a los amigos en el plató. Al parecer, los productores supieron de su trabajo cuando comenzaron a ver las proyecciones de lo rodado.

Para mí, lo mejor de la película y para no mencionar de nuevo la buenísima secuencia inicial, es la iluminación, especialmente en los interiores, que convierte al juego de luces y sombras en un personaje más de la historia. También me gusta mucho la escena casi en el final, cuando Heston está siguiendo a Orson Welles para intentar grabar su confesión.

En esta versión que yo he visto, la que quería el director, los títulos de crédito van al final, como en las películas modernas. Y en ellos, Marlene Dietrich figura como "estrella invitada" junto a Zsa Zsa Gabor, a quien yo, la verdad, no reconocí en ninguna parte, como no fuera el fugaz papel de la ciega, o el de la chica que muere al principio, en el coche con la bomba. No sé, yo no la vi.

"Sed de mal" no es una de mis películas favoritas, pero es una obra interesante y a mí me parece que es de esos títulos que todo aficionado al cine ha de ver, al menos una vez. Eso sí, os aconsejo que intentéis conseguir una copia con el montaje que realmente quiso hacer el director.
Los japoneses no miran... sospechan (Woody Allen)
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jescri

Jo no la vi, pero tiene una pinta excelente   :si
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ZesT

¿¿Faltaba esta?? A mi me gustó mucho, aunque la ví ya hace tiempo. El plano secuencia del principio es una auténtica maravilla.  :obacion
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Mai

Tengo muy buen recuerdo de esta película,pero la verdad es que sólo la he visto una vez y hace ya...

Buena crítica HispanI :guiñar


"Me despierto muy temprano.Mi vuelta del campo de los sueños es brutal al entrar en el país de lo cotidiano" (Léolo)
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Zátopek

Como dice Guevara es una película que no tiene ninguno de los clichés de este género, o casi ninguno, y esto me gusta. Es una película especial con un encanto especial. La atmósfera que recrea es inigualable, y el guión y  todo lo que puede sugerir da mucho de sí. Peliculón sin duda al que le meto un 9 como mínimo


                            La locomotora humana
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alpope72

 :obacion  :obacion  :obacion  :obacion Hispano y Guevara,  dejaís sin palabras ante una película que me encanta. Es adorablemente caótica y más de una vez no tiene mucho realismo, da igual, Orson  :obacion es un genio. El y Marlene  :obacion son suficiente para que ese ambiente oscuro, corrupto pero humano atrape a quien la vea. Ambos son tan grandes que aunque se vistan grotescamente brillan y se comen la cámara. No como el disfrad de Heston que es ridículo y a la ilusa de la Janet esperas que le pase algo para que espabile. El cine negro no siempre tiene esos clichés (mujer fatal, detective y voz en off). Son personas que arrastran pasados grises,  y no tienen un final feliz.   
Ya lo pensare mañana.
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Jason

Pues yo no guardo un gran recuerdo de la misma. No sé si tendría un mal día cuando la vi o qué, pero al margen de ciertas cosas interesantes y las interpretaciones, me aburrió más que lo contrario.

Tendrá revisionado, claro está, aunque no es una prioridad por el momento.
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Mai

Cita de: Jason en 18 de Agosto de 2009, 03:16:35 PM
Pues yo no guardo un gran recuerdo de la misma. No sé si tendría un mal día cuando la vi o qué, pero al margen de ciertas cosas interesantes y las interpretaciones, me aburrió más que lo contrario.

Tendrá revisionado, claro está, aunque no es una prioridad por el momento.

Está claro que a veces mis recuerdos me fallan.Tenía muy buen recuerdo de ella, sin embargo el otro día la eché otro vistazo y a la horita la quité,me estaba aburriendo muy,mucho...
No sé,igual cuando la acabe cambia mi impresión,pero de momento me está resultando cansina.


"Me despierto muy temprano.Mi vuelta del campo de los sueños es brutal al entrar en el país de lo cotidiano" (Léolo)
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Guevara

Cita de: Mai en 19 de Agosto de 2009, 11:49:03 AM
Cita de: Jason en 18 de Agosto de 2009, 03:16:35 PM
Pues yo no guardo un gran recuerdo de la misma. No sé si tendría un mal día cuando la vi o qué, pero al margen de ciertas cosas interesantes y las interpretaciones, me aburrió más que lo contrario.

Tendrá revisionado, claro está, aunque no es una prioridad por el momento.

Está claro que a veces mis recuerdos me fallan.Tenía muy buen recuerdo de ella, sin embargo el otro día la eché otro vistazo y a la horita la quité,me estaba aburriendo muy,mucho...
No sé,igual cuando la acabe cambia mi impresión,pero de momento me está resultando cansina.
No, no te fallan los recuerdos, Mai. A mí me pasó lo mismo. Tenía mejor recuerdo de ella que cuando he vuelto a verla. Ya dije en mi comentario que no es de mis favoritas, precisamente. De hecho, puse este párrafo:

Personalmente me choca un poco la música que acompaña a las imágenes. No es que esté mal, pero... es un poco extraña, no sé cómo definirla, no a la música que es una mezcla de jazz, rock & roll, mambos o música de pianola, si no a su conjunción con las imágenes. Pero es que toda la película resulta un tanto extraña, con una narración un tanto caótica, sobre todo al principio, para una historia en general bastante errática y complicada, de ésas en la que cuesta "entrar" y que han de pasar más de treinta minutos para que el tema cobre, de repente, gran interés.

Tiene cosas excepcionales la película, pero sí, es difícil entrar en ella y su ritmo es muy cansino, así que si pasada ya una hora no lhas conseguido interesarte, pues igual deberías dedicar tu tiempo a otra cosa. Es una sugerencia...   :disimu

Yo no es de las películas que aconsejo cuando me piden algún título de "una que esté bien y entretenida", pero claro, conozco los gustos de los que me lo piden, que eso también ayuda.

Yo de la película destacaría lo que ya puse en mi comentario y que te lo pongo para evitar que tengas que leerte el peñazo:

Para mí, lo mejor de la película y para no mencionar de nuevo la buenísima secuencia inicial, es la iluminación, especialmente en los interiores, que convierte al juego de luces y sombras en un personaje más de la historia. También me gusta mucho la escena casi en el final, cuando Heston está siguiendo a Orson Welles para intentar grabar su confesión.
Los japoneses no miran... sospechan (Woody Allen)
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replicante

#10
Para mi más que cansina es densa, y este tipo de pelis mejor verlas en momentos adecuados; eso tampoco quiere decir que tenga que gustar, para nada
- No sólo ve películas, se las come
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princesadelguisante

Pues a mí se me pasó volando. Estaba delante de la pantalla babeando con esos planos imposibles y complejos que hace Welles, en donde te parece que la cámara se va a chocar con algún actor o caer al suelo, pero ¡no!, porque Welles lo tiene todo estudiado al milímetro. Qué planos secuencia, qué travellings... y la escena inicial, pura joya.

Destaco también como Guevara las luces y la fotografía, pues son un personaje más de la historia que juegan a mostrar y a esconder, así como la dirección de actores y puesta en escena, sobre todo en la secuencia en la que todos los policías/inspectores están en la casa del yerno del asesinado, donde llegan a haber más de 6 personajes en plano al mismo tiempo y es una delicia ver cómo entran y salen del plano según les toque hablar o no.

Welles está tremendo y Dietrich también me gustó mucho. Ah, Guevara, y Zsa Zsa Gabor es la rubia despampanante que sale en el local donde trabajaba la que acompañaba al asesinado, sólo tiene un par de frases:



Lo que menos me ha gustado es la historia en sí, porque, en realidad, no nos importa un pimiento quién ha sido el asesino, sino ver la rivalidad creciente entre Vargas (Heston) y Quinlan (Welles).

Por último, repli yo cuando ví la escena del motel (por cierto, con la actriz que hacía de hermana de Rock Hudson en "Gigante" :flipando ), inmediatamente me vino a la cabeza "Corazón salvaje" de Lynch, así que hasta en eso coincidimos.

Un 9'25
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cicely

Yo tenía muchas ganas de verla y hace como un año la vi al fin,y la verdad es que me aburrió un montón,se me hizo bastante larga y no me gustaron nada ni la dirección ni las actuaciones.Volveré a verla dentro de un tiempo a ver si es que tenía un mal día o que lo que vi realmente no me gustó.


Un día sin sonrisa,es un día perdido.
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Sullivan

Cita de: cicely en 06 de Septiembre de 2010, 11:37:55 AM
Yo tenía muchas ganas de verla y hace como un año la vi al fin,y la verdad es que me aburrió un montón,se me hizo bastante larga y no me gustaron nada ni la dirección ni las actuaciones.Volveré a verla dentro de un tiempo a ver si es que tenía un mal día o que lo que vi realmente no me gustó.


A mi me paso lo mismo.

En un talller/curso de cine que hice nos enseñaron el principio (que es magistral  :obacion), y entonces me decidi a verla aver si era todo asi pero la verdad esque tambien me aburri y no pude ni acabarla de ver. Aver si yo tambien le doy otra oportunidad
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El Nota

Buena película, sí señor. Obviando la magnánima escena inicial (qué despliegue, por Chuck) nos encontramos ante una película sobria en todos los sentidos, dónde parece que cada plano está hecho para el recuerdo. Si bien es cierto que desde la escena inicial, la primera media hora es muy irregular y peca de poco interés, la historia después sigue increscendo hasta un final más que digno. Lo dicho, me quedo con el principio y el final de la peli especialmente. Después hay escenas muy buenas por entremedio, pero hay otras que son para echarse una buena siestecita. No me ha disgustado en absoluto el ritmo, la narración. A destacar también la dirección de Orson. Eso sí, a mi me da la sensación en todo momento, de ser una película autofelatoria del propio Welles. No sigo, porque estoy tan espeso como la atmósfera de 'Touch of evil' :poss
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