El Luchador (The Wrestler)

Iniciado por Jalex, 04 de Febrero de 2009, 11:38:42 PM

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Jalex

El Luchador (The Wrestler) (2008)



Love. Pain. Glory.

Sinopsis

Robin Ramsinski es un luchador que ha vivido sus mejores años en el cuadrilátero ya hace mucho tiempo. Ahora viviendo del recuerdo y al borde del retiro, una serie de sucesos le hacen reflexionar acerca de que hay para él fuera del ring.

Crítica

Darren Aronofsky es un director sin miedo a dirigir lo que resulte desafiante para su cámara. Ya sea desde la polémica Pi (1998) o la obra psicológica Requiem for a Dream (2000), todo es posible mientras él este atrás del lente. Esta vez la juega de una manera más segura, sin innovaciones con una historia sólida y lineal entregando un largometraje que refleja todo lo que él nos ha querido presentar.

Randy 'The Ram' Robinson (Mickey Rourke) es un luchador en sus últimos días como profesional. Ya han pasado 20 años desde que brilló en el cuadrilátero. Ahora, al borde del retiro se da cuenta de lo que ha hecho con su vida y emprende una travesía pro recuperar todo lo que ha perdido y que lo tiene sumido en una soledad absoluta. La historia como podemos observar no nos trae ninguna novedad. Ya se han hecho muchas historias dónde los sueños se rompen dejando a los soñadores enfrentados a una realidad que han evitado toda su vida. Segundas oportunidades, redención y búsqueda del amor es lo que se espera y es lo que obtenemos. Pero a pesar de todos los lugares comunes que se visitan, el viaje se torna por demás interesante. No sólo nos encontramos con un aire nostálgico por lo que fue y ya no es, sino nos encontramos con todo lo que rodea al personaje, la simulación.

 

No es casualidad la incursión de Marissa Tomei (My Cousin Vinny) que representa a esa chica que ya ha interpretado en muchas ocasiones; pero los acercamientos denotan que sus mejores tiempos ya pasaron. Y es así como toda la película nos va llevando. The Ram, vive del recuerdo, de los tiempos de gloria y de los videos que vende a los pocos aficionados que aún lo recuerdan. Es hasta conmovedor ver que en plena era de la tecnología, su única consola de videojuegos es un Nintendo de 8-bits que igual vivió sus mejores días en esta época. El aire de los ochenta nos inunda y hasta la banda sonora denota esos éxitos que ya pasaron.

Pero dónde la película de verdad entrega su valor es en la simulación en la que vive "The Ram". La evasión de la realidad llega al extremo cuando no puede ni siquiera ver su verdadero nombre inscrito en una identificación, y se ve confrontada con ese mundo que lo golpea en cuanto se baja del ring. Aunado a todo esto, tenemos de igual manera el espectáculo del que son parte los luchadores, poniéndose de acuerdo en lo que habrán de hacer sobre el cuadrilátero y siendo amigos fuera del campo de batalla. Todo es una fachada. Se trata de hacer creer a los aficionados que es real, pero lo más importante es que ellos mismos se lo crean.

Y como es de imaginarse, todo esto era imposible de lograr sin un gran actor (que igual vivió sus mejores momentos en los 80) como Mickey Rourke (Barfly) que nos entrega todo lo que una actuación nos puede entregar. Su incursión es impecable y sólo queda aplaudirle de pié.

"The Wrestler" una historia común realizada e interpretada de manera soberbia.


** Agradecimiento a Angel por animarme a escribir la crítica.
You take the blue pill - the story ends, you wake up in your bed and believe whatever you want to believe. You take the red pill - you stay in Wonderland and I show you how deep the rabbit-hole goes.
Morpheus - The Matrix


:palomitas :palomitas :palomitas :palomitas :palomitas

Algo parecido sucede al apreciar una película.
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reporter

#1
Viejos rockeros...

Los días felices de Randy "The Ram" Robinson quedan ya muy lejos. El que en la década de los ochenta fuera una de las mayores estrellas del wrestling, ahora es un hombre solitario, con el cuerpo magullado y que hace lo imposible para llegar a fin de mes. Cuando las heridas que ha ido acumulando a lo largo de su vida empiecen a ser insoportables, intentará cambiar el rumbo de su triste existencia alejándose del ring, buscando un empleo estable, conquistando un amor imposible y acercándose a la hija que abandonó hace tiempo.

Faltaba poco para que concluyera una de las ediciones del Festival de Venecia más flojas en lo que a calidad se refiere. En aquellos momentos el maestro Hayao Miyazaki se frotaba las manos. Estaba apunto de repetir el milagro de la Berlinale del año 2002. A falta de mejores títulos, no eran pocos los que señalaban a la simpática 'Ponyo en el acantilado del mar' como una clara favorita para llevarse el León de Oro. Pero como si de un combate amañado de pressing catch se tratara, apareció Darren Aronofsky en el último suspiro para asestar con 'The Wrestler' un certero guantazo sobre el jurado. Aquel que hace dos años abandonó el mismo escenario entre pitidos y abucheos por la presentación de 'La fuente de la vida', lo hacía ahora entre aplausos y con el máximo galardón de La Mostra bajo el brazo.

Reconciliación pues de este joven cineasta neoyorquino con el público veneciano. Pero no fue el único que obtuvo el divino perdón de público y crítica. En el año en que Robert Downey Jr. se enfundó en un traje metálico y se cambió de color la piel para hacer las paces con la Academia; en el año en que un emotivo Jean Claude Van Damme se confesaba entre bastidores, Mickey Rourke no podía ser menos, y emprende su particular redención. Para ello se disfraza de Randy Robinson, una vieja gloria de la lucha libre que desde hace ya tiempo está sumido en un vertiginoso descenso a los infiernos. Un hombre torturado no sólo por un cuerpo castigado por las drogas y otros pecados, sino también por el remordimiento debido a las vidas que en su día se encargó de destrozar.

Como pez en el agua. Era la ocasión para que este entrañable outsider resurgiera de sus cenizas. Y no la desperdicia. Lo de Rourke en 'The Wrestler' sólo puede definirse como auténtico recital. Ya puede estar dejándose la piel en el ring, como tomándose unas copas en un bar de striptease, como vendiendo embutidos en la charcutería de un supermercado. No importa. Haga lo que haga desborda tanta naturalidad que es imposible no prestar suma atención a cada palabra que pronuncia; a cada gesto que esboza. Se enfurece, estalla de alegría, apunto está en más de una ocasión de derrumbarse y echarse a llorar... emociones extremas típicas de un hombre que vive perpetuamente al borde del abismo. Emociones que incitan peligrosamente a la sobreactuación. Lejos de caer en esta trampa, Rourke transmite todo esto con una contención digna de elogio.

Precisamente creo que es la contención la clave del éxito de 'The Wrestler'. Aronofsky por fin se distancia de sus tan características tendencias videocliperas y pseudo-filosóficas (¿cosas de dejar el guión en manos de otra persona?) y permite que las imágenes hablen por sí solas. Sin llegar a dejar de lado su innegable modernidad, consigue establecer un diálogo directo con los clásicos y así nos recuerda el inmenso poder que tienen cada fotograma para narrar por sí solo. Durante la hora y media de metraje la cámara se comporta como un ente inquieto pero siempre atento. Un narrador externo perfecto, que está siempre donde le se requiere y lo más importante, no roba un ápice de protagonismo a las estrellas del espectáculo, esas almas en pena que deambulan por un universo sórdido, decadente y raramente bello.

Pero lo mejor del filme es que sale ileso del repaso exhaustivo de su recorrido. Hago memoria tratando de recordar algún resquicio; alguna brecha, pero no lo consigo. Por su sencillez me creo los vínculos que establece Randy con la gente que le rodea. Por su sinceridad sigo con mucho interés la historia de amor entre el protagonista y Cassidy, enésima e interesante revisión de la Bella y la Bestia. Por su sentido del espectáculo me quedo boquiabierto con el retrato que ofrece Aronofsky del mundo del wrestling, esa burbuja autodestructiva, casposa pero a la vez deslumbrante. Desde el inicio con tintes nostálgicos hasta el inmejorable final (no por sorprendente, sino por estar contado de una manera simplemente perfecta), 'The Wrestler' acierta con todos sus golpes. Es un programa completísimo para una velada que debería tardar mucho en desaparecer de nuestras memorias. Es una indiscutible obra maestra.


http://www.goear.com/files/external.swf?file=592d60e
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ZesT

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ÁngelNeg

Sólo queda esperar!!! Aronofsky es la onda :guay Esta es una de esas dos películas que más me llaman la atención de las que se comentan hoy por hoy... ya que la vea... comento...

Grax por la críticas... :si
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IsMAeL

#4
crítica movida  :ko


La acabo de ver y es una buena película, cumplió con las espectativas :correr

Bien como dices en la crítica no habia otro actor que le quedara mejor este personaje, Mickey Rourke muy bien con su cuerpo exajerado en vitaminas, sus rayitos en el pelo y su cara llena de botox jajja todo un luchador metrosexual veterano. :risa

La película te engancha al pasar de los minutos cuando vas viendo mas a fondo la vida real de el luchador.

Una vida dura en la que se nota que a hechado a perder todo su éxito como a pasado con muchos deportistas en la vida real.

Llega el momento en que quiere arreglar las cosas y es ahi cuando conmueve mas la película  :obacion
       
                        :palomitas      9/10

"Si perdemos seguiremos siendo los mejores y si ganamos seremos eternos"...Pep Guardiola
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rekeseke

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ZesT

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reporter

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Matia

crítica movida del otro post  :nuse

No hay palabras, muy muy buena, de hace tiempo no veía una pelicula asi. Está a otro nivel sinceramente. Una película verdadera, sincera, sientes los sentimientos del personaje principal, te desgarra, te conmueve.
Mickey Rourke un 10, lo mejor. No hay actor que pudiera haber hecho mejor este papel. Un gran acierto. La BSO con música de los '80 un 10 tambien.
Aronofsky, director de Pi, y Requiem for a Dream, encontré que se había caído con The Fountain, y había perdido el rumbo, pero no, ahora ha vuelto al más alto nivel con una gran dirección. Que más decir, una película "must see" (hay que ver).

Nota: 9/10


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ZesT

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Matia

#10
por cierto una de las buenas escenas, muy bien dirigida, es cuando muestran la cara de Rourke asombrada mirando a su alrededor a otros viejos luchadores que están firmando autógrafos y sacándose fotos con sus fans, todos ellos prácticamente con sus cuerpos destruidos, y todo se refleja en el rostro, en la mirada de Rourke que debe estar pensando: así es la vida de las viejas y acabadas leyendas de la lucha libre, en eso me estoy convirtiendo... no dice nada, su rostro es quien transmite todo eso al espectador, muy bien dirigida esa escena, y muy buena interpretación de Rourke.

a uno cuando pequeño le encantaba ser luchador y jugar con los amigos a personificar a sus luchadores favoritos, pero esta película muestra la realidad de un luchador, de fuera se ve bien, pero por dentro, una vida sufrida, sacrificada, y la caracterización que hace Rourke de aquello, es realmente notable, merece el Oscar.


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jescri

Duro por fuera, blando por dentro...

Gran corazón el de Randy, por mucho que le fallase. En una crítica anterior alguien se refería a que uno de los éxitos de esta película era su sencillez, y en este punto quiero dejar claro que no podría estar más de acuerdo. Todo ello llevado por una gran actuación de Rourke hace que la historia esté viva desde el primer instante; un historia sin contemplaciones que desnuda la vida del personaje sin ningún tipo de tabú, con sus grandezas y con sus miserias.

Respecto a Marisa Tomei, está en su papel, pero al igual que Pé no creo que la cosa sea como para una nominación al Oscar. Casi me quedo con la pequeña actuación de Rachel Wood como hija del protagonista antes que con la suya   :sonreir

Ya estoy deseando ver subir a Rourke para recoger su merecido premio. Seguro estoy que si en esta vida hay justicia, subirá   :si

Nota: 9
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Drek

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Schillinger

Bueno, pues ayer la vi por segunda vez en V.O y la verdad es que mi opinión ha cambiado bastante, ya que la primera vez me pareció una buena película, sin más. Me dio la sensación de que la historia estaba ya muy vista y que tenía bastantes tópicos. Puede que sea así, sí, pero está bien contada... y bien rodada. Los travellings que hace Aranofsky cuando M.R va a entrar en el cuadrilatero son para quitarse el sombrero, al igual que las actuaciones de los tres protagoistas, que son excelentes, cada uno en un papel totalmente diferente al otro.
Y un gran acierto del director es no haber incluido a megaestrellas del mundo del wrestling, lo que le da más credibilidad a la película y a la historia que se cuenta.
Mi nota aumenta de un 7 a un 9.
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Scott

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