Titanic (1943)

[Michael Myers]

TITANIC

SINOPSIS: La construcción del Titanic, ha sido un esfuerzo enorme para la naviera White Star Line. Su presidente Sir Bruce Ismay, intenta sin atender a razones batir el record de velocidad en el viaje inaugural para obtener la confianza de los inversores. Pronto hay señales de peligro. Film de propaganda nazi que adapta libremente los populares hechos de 1912, en los que el Titanic se hundió en las aguas del Atlántico.


TRAGEDIA MEZCLADA CON PROPAGANDA

Película realizada mientras la banda de la esvástica funcionaba a todo trapo, era de esperar que tomase claramente partido en contra de los ingleses, retorciendo el relato hasta hacerlos parecer como demonios vendidos al dinero, especialmente J. Bruce Ismay (presidente de la White Star Line), de quien se le pone como culpable principal del naufragio cuando en la vida real parece que no fue tal. Irónicamente, el primer director de la película, Herbert Selpin, murió en la cárcel después de haber criticado a las fuerzas armadas alemanas; completó el filme el director Werner Klingler.

Cosas de nazis aparte, estamos ante una película que tiene sus aciertos sin contar con las licencias que se toma en el relato. Casi 81 años desde su estreno (10/11/1943) han pasado y para haber pasado ocho décadas luce con bastante soltura. Los planos de exteriores del barco es evidente que canta como Freddie Mercury, pero en los interiores, muchos de los lugares del barco están realizados bastante bien; desde la sala de máquinas, pasando por el lugar para la gente de tercera clase y los lugares que ocupaban la clase más pudiente. En este apartado estuvieron inspirados y dieron un buen resultado.

En lo que respecta a los trabajadores y sus pasajeros, tenemos las esperadas historias románticas y dramáticas; en este caso, entre dos trabajadores del barco, un triángulo amoroso o una pareja que se mantienen juntos incluso en medio del caos. En mi opinión personal, la historia de amor de los trabajadores es la más bonita con ese amor a primera vista después de un encontronazo fortuito.

También tenemos a un personaje alemán que queda como el ángel que se preocupa por los pasajeros por encima del Satanás venido a la tierra al que retratan a Ismay por la gracia de la propaganda como es el Primer Oficial Petersen, al que el guion le hace prácticamente merecedor de un premio humanitario por tanto desinterés. Un poco más descarado y no se nota nada; como digo, las licencias y soflamas a favor de la madre patria germana son algo que hay que dejar de lado para disfrutar mejor el largometraje.

Después de que en 1997 James Cameron sacase su versión de la historia del transatlántico, ganase un montón de pasta y un montón de oscars, la mayoría de producciones anteriores han quedado en un segundo plano; sin embargo, habrá los cuales merezcan la pena darles el beneficio de la duda como es este caso.

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