La clínica (The clinic)

Iniciado por ÁngelNeg, 21 de Mayo de 2011, 02:48:54 AM

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ÁngelNeg

LA CLÍNICA


El lugar de los abortos

¿Que tanto piden los jovenes estadounidenses en una película de horror? ¿qué tanto se les puede ofrecer? ¿qué tanto están dispuestos a pagar? ¿qué tanto les gustará? ¿y qué tanto importan tales preguntas? Después de una larga odisea de visionados de cintas con casi la misma temática, uno llega a cierto punto en el que cree tener la o las respuestas del porque se hace un cine adolescente-juvenil de terror/horror/gore con mínimos esfuerzos en su acabado y con los mismos lugares comunes.

Para que existan las películas desde luego debe haber una productora detrás, y cuando estas son nuevas o desconocidas es prudente apostarle a ejercicios pequeños que puedan dar la sorpresa en algunos de los casos, generando más dividendos de los que se tenían contemplados. Si para hacer una cinta de esta oleada de grupitos de amigos que se pierden en bosque, carretera, pueblo fantasma, casa embrujada; y de pronto son acechados por piscóticos, asesinos, monstruos, animales, o fantasmas, se invierten un promedio de entre 5 millones de dólares más o menos; tenemos que pueden invertir hasta para hacer diez cintas suponiendo que una ya de un decente presupuesto hollywoodense fuesen 50mdd.

Eso sin contar que hay cintas de terror con similares temáticas que cuestan menos del millón, y que algunas incluso se han hecho con miles (dólares) solamente; pero bueno, abriendo la expectativa, podemos decir que una productora tendrá hasta diez probabilidades de anotar un hit con algunas de las producciones para lo cual no invierte mucho: tiene actores desconocidos algunas veces lidereados por el protagonista medio perdido  en el estrellato que puede jalar algo de gente a las salas de cine, se siguen del fenómeno del vox populli apostándole al de boca en boca -ahora a las redes sociales-, y entonces una campaña de promoción estará saldada de a gratis toda vez que puedan aunto-invitarse a múltiples festivales de cine del género de terror o fantástico, lo cual no indica que sean buenas películas, pues estos festivales no tienen muchas restricciones en cuanto a lo que aceptan en su programación.

Ahora bien, habrá que decir que aunque no generalizamos, el público segmento de las cintas de las que hablamos, no es precisamente un público que quiera ver arte en los planos secuencias, ni magistrales notas en la música, mucho menos validar ahíncamente el guión planteado. Es cine para pasar el rato y nada más; pero para eso también hay que ser exigente, pero para eso se necesita otro tipo de público -que también hay que decir que esto sucede en varias cinematografías con diferentes géneros-. Los jóvenes no le repelen, puede que guste o no guste, pero es un cine cómodo que permite solamente pasar dos horas de la vida por un camino donde no hay porque utilizar neuronas.


Risibles los argumentos como su desarrollo, conforme avanzan dejan una estela de dinero que bien o mal puede quedarse casi siempre cerca, dentro, arriba o muy por encima del coste de filmación, por lo que ya la compañía sale ganando, el director asegura su siguiente cinta, y los jóvenes y adolescentes tendrán dos cintas más similares que ver el próximo año que entonces podrán ser ya veinte, y seguimos con un conteo muy disimulado, porque ni estamos contando productoras, ni las estamos ubicando en una época del año -esto último ya no es impedimento-.

Entonces el circulo vicioso sigue y sigue y sigue, y entonces el cine estadounidense, -muy últimamente el australiano, canadiense y holandés- está géstando una broma al casi simbolizar una especie de género asimilable a la serie B de terror -advirtiendo que el de antaño tenía su gracia, era un cine lleno de carisma y de ganas de ser. Ahora este nuevo engendro de género motivado por el slasher y el gore de la mano del road movie es gris, cansino, y bastante predecible. Lleno de lugares tan comunes como obvios donde los personajes más patéticos (prostitutas, engreídos, groseros, pedantes) moriran, y el estereotipo (voluptuosos, deportistas, gordos, virgenes, nerds, traumadas) ayudará para que sobrevivan o sean el primer muertito.

Por cierto, esta se suponía la crítica de una película llamada La clínica (The clinic, EUA/Australia-2010), una cinta de horror con thriller con guión y dirección de James Rabbitts quien muestra su incipiente experiencia con este su primer ejercicio en donde cuenta como una pareja de novios emprende un viaje para visitar a los padres de ella, que está embarazada. Se detienen a pasar la noche en un motel y al día siguiente, ella se despierta sola, en un lugar extraño y con una cicatriz en el vientre... Un ejercicio mal parido con un resultado mal nacido.
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