La Celda (2000)

[Sacri94]

La Celda (The Cell)

SINOPSIS:

Catherine Deane es una psicoterapeuta que aplica un revolucionario tratamiento que le permite literalmente introducir su mente en la de sus pacientes. Sus experiencias con este método experimentan un peligroso giro cuando un agente del FBI le pide que se introduzca en la mente de un asesino en serie, que, tras haber secuestrado a una mujer, se encuentra en estado de coma. Si no consiguen averiguar dónde está la mujer, su vida correrá un gran peligro.


CRÍTICA: El odio injustificado

Cualquier persona que busque información sobre esta película se dará cuenta de que no está, precisamente, valorada de forma positiva. Cuesta encontrar alguna página en la que su nota media esté por encima del 5, lo que da a entender que no es una buena película, ni siquiera una pasable. El porcentaje de unos, doses y treses dentro de esas medias es enorme y, aunque ya sabemos que Tarsem Singh no es un director para todos los públicos, choca encontrarse con esto tras buscar un poco de información sobre la cinta tras visionarla. He de decir que siendo mi primera película del director hindú, sabía de sobra que no me iba a encontrar un producto convencional. ¿Qué esperaban de esta película los que la vieron en su día para que esté tan mal valorada? Esta pregunta que no tendrá respuesta jamás me hace plantearme el porqué del odio, aún más cuando es injustificado. Lo diferente, asusta. Bueno, asusta o impacta, cualquiera de las dos expresiones es valida. Cuando, de vez en cuando, irrumpe alguien como Tarsem en las carteleras, no se le suele tratar como se merece hasta el paso de los años. 'La Celda' no se verá dentro de unos años como una obra maestra pero si debería revalorizarse como lo que es.

El inicio no deja lugar a dudas: estamos ante una idea salida directamente de la cabeza del creador del filme. No bebe de nadie en este aspecto. Su firma está ahí, como ya se pudo ver en los siguientes filmes. Sigue su estilo a toda costa y eso es arriesgado. La presentación de esta idea resulta tan bella como intrigante. Ese infinito desierto, ese ficticio caballo y esa combinación de planos ya deja claro que el punto fuerte del director reside en la belleza de lo que rueda y en lo imaginativo de ello. Ante este aspecto creo que nadie debería discutir, pues hay momentos de un empaque visual enorme. Todas las escenas que ocurren dentro de la mente de alguien son geniales, tienen una fuerza increíble, especialmente a medida que van pasando los minutos. Nada que reprocharle a la película en ese aspecto, que cuenta con una premisa, una fotografía y una dirección fuera de lo común. Luego, unos cuantos años más tarde, Christopher Nolan le cogería la idea y rodaría una película mucho mejor llamada 'Origen'.

El problema con el que cuenta la cinta es que su historia es el típico thriller policíaco en el que hay un asesino en serie y tienen que encontrarlo e interrogarlo, solo que con la posibilidad de que se pueden meter directamente en su mente y averiguar donde está la chica secuestrada. Lo bueno es que esto la hace entretenida, y lo malo es que hace que solo sea eso. Con un guión mucho más ambicioso podría haber llegado a ser algo más, pero es muy superior a un 80% de las películas de este estilo que salen hoy en día y me atrevería a decir que también lo es de las que salieron desde que se estrenó en el año 2.000. También hay que decir que el nivel de este género suele ser bastante bajo por desgracia. Además de lo comentado, tenemos elementos muy típicos que empañan el resultado global aunque no impidan el goce de este largometraje.

Para ir acabando, tenemos un reparto cumplidor. Ninguno chirría y destacan dos cosas. Destaca y sorprende ver a Jennifer Lopez en una interpretación correcta y a un Vince Vaughn que se deja de comedia y acaba siendo el mejor de todos. Lo que destaca, y no es sorpresa, es la genial actuación de Vincent D'Onofrio. Coge el mismo peluquin que Javier Bardem en 'No es país para viejos' y consigue aterrorizar al público materializando a un asesino en serie enfermizo. Roza esa fina línea que separa lo ridículo de lo genial, pero la bordea con mucho estilo.

Sin ser ninguna maravilla se la ha tratado injustamente. Ese es otro de los muchos casos de odio injustificado en el cine. Una pena que la gente no pueda disfrutar de este atípico thriller.

Nota: 6