Trumbo: La lista negra de Hollywood

Iniciado por reporter, 01 de Mayo de 2016, 09:10:45 PM

Tema anterior - Siguiente tema

0 Miembros y 1 Visitante están viendo este tema.

reporter

Trumbo: La lista negra de Hollywood


SINOPSIS: Trumbo es el biopic del famoso guionista Dalton Trumbo, autor del libreto de títulos tan emblemáticos en la historia del cine como "Vacaciones en Roma" o "Espartaco". Su carrera casi llegó a su fin en 1940 tras ser incluido en la lista negra acusado de comunista. A partir de ese momento toda su vida dará un giro radical y tendrá que utilizar todo su talento para sobrevivir en una sociedad que le ha vuelto la espalda.

CRÍTICA: Dalton cogió su máquina de escribir

Entonces, quedamos en que la Guerra Fría, más o menos, fue así. Eran, básicamente, dos bandos enfrentados: los Estados Unidos y la Unión Soviética; el capitalismo contra el comunismo; el libre (es un decir) mercado contra la economía planificada; la democracia contra... bueno, contra aquello otro. Lo que fuera. El caso es que el conflicto estuvo marcado por la tensión; por esa insoportable y continua angustia ante la posibilidad, más que palpable, de que el planeta al completo fuera a estallar, literalmente, en un abrir y cerrar de ojos. Todo lo demás, fue consecuencia más o menos directa de estas circunstancias. Cuba, Corea, Vietnam, Afganistán, Checoslovaquia, Egipto, Camboya, Alemania... El mapa-mundi se quedaba sin rincones por marcar a cada día que pasaba, y el miedo, mientras, iba confirmándose como la única manera de entender el mundo. Llegados a este punto, y sin final a la vista en el proceso de encadenado de cimas (a cada cual más alta) en la escalada, era el momento de demostrar que cobarde no era quien sintiera pánico, sino quien se dejara dominar por él.

Así de gordos eran los nubarrones atómicos. Tanto que hasta llegaron a tapar las siempre resplandecientes colinas de Hollywood. Ni rastro del sol de California, ni allí estábamos a salvo. Es más, especialmente en la llamada meca del cine, las alarmas por bomba sonaban más fuerte que en ningún otro sitio. De la imagen, principalmente, vivía el negocio, de modo que tocaba evitar sospechas, y más que ser ''americano'', uno tenía que esforzarse en aparentarlo. La diferencia entre una cosa y la otra era tan sutil como compleja y, a la postre, crucial para librarse del fuego, que no era otro que el de la hoguera inquisitorial. La caza de brujas había vuelto, y con ella, las listas negras, y con ellas, los vetos, y con ellos, la desesperación. Tanto por parte de los señalados como, más adelante, del arte al que daban forma... Y a todo esto, perdón por la poesía barata, por la versión (mal-) resumida del asunto y por la falta de profundidad en el análisis, pero es que manda el formato del texto, el hambre de quien escribe, su agotamiento psico-físico y todas las demás excusas de quiero-no-puedo que puedan venir a la cabeza.


Total, son las dos de la madrugada, me estoy helando porque la ventana del comedor ha decidido no cerrarse, la conexión inalámbrica del albergue es tan asquerosa como el café de la máquina de la recepción, y las probabilidades de cobrar algo (lo que sea) por estas palabras es tan remota como el triunfo de los principios básicos de la ética (laboral, al menos esto) en esto del periodismo cinematográfico. En fin, que ¿a quién le importa? Exacto. Esto mismo... El problema, es que nos debemos a una(s) persona(s) que sin duda merece(n) mucho más. Pero así están las cosas, ni peor ni mejor que antes, sino exactamente igual de mal, y claro está, con unas formas bastante diferentes. De apariencias va el asunto, no hay dudas al respecto. Con esto, y con poco más, se entiende hasta dónde llega (o mejor dicho, dónde se queda) 'Trumbo', biopic dedicado al mítico guionista de cuyo nombre, por alguna razón u otra razón (¿incultura cinéfila?), no nos queremos acordar. Por suerte, ahí están las coletillas a la española para aclarar un poco las ideas. ''La lista negra de Hollywood'' facilita las presentaciones con conceptos mucho más familiares, y de paso, nos da pistas sobre la -poca- sutileza del producto.

Empaquetado con el oficio típico de la (buena) TV movie, el nuevo trabajo de Jay Roach se apoya en el retrato personal (a veces, incluso íntimo) para trascender hasta la radiografía de época. Es, para entendernos, una lección de historia que no pierde nunca de vista el factor humano. Los resultados no son para nada magistrales, pero sí amenos; a ratos mucho, tanto que la (son)risa logra reivindicarse como el más reconfortante y lícito de los contraataques. Como quien usaba la escritura para demostrar aquello de que la pluma es más fuerte que la espada. En estas intenciones es donde el alegato (si es que así podemos llamarlo) gana enteros... para más tarde perderlos (al menos, gran parte de ellos) a causa de una ejecución a medio camino entre la complacencia y la indulgencia, mostrándose ambos defectos en todo su reflexivo esplendor. Y que el Altísimo nos pille confesados: Mediocres del mundo, absolvámonos los unos a los otros, pues a la hora de la verdad, pocos reproches podemos ponerle a la ''dramedie'' de manual. En esta ocasión, la combinación entre la injusticia y la posterior réplica ingeniosa (formulada, ésta última, con la valentía que otorga el casi impenetrable escudo del paso del tiempo) sorprende tan poco como la satisfacción con la que se acaba saldando la experiencia.

Jay Roach, a pesar de la imagen que pueda llegar a transmitir, es un director que acostumbra a saber muy bien de lo que habla (véase la infravalorada 'En campaña todo vale'). Su homenaje a Dalton Trumbo no carece de esta base fundamental, pero por el contrario, le falta esa capacidad de incisión que llegaba a distinguir sus anteriores trabajos. Si bien sabe identificar (y aprovechar) los momentos más contundentes / ilustrativos de la historia que tiene en mente, falla a la hora de ligarlos para darles así auténtica consistencia narrativa. Nos instalamos, así pues, en un agradable ejercicio de mínimos que entretiene (y hasta instruye) con la misma facilidad con la que cae en la paradoja de la corrección. ¿Puede ser ésta algo ofensivo? Desde luego, porque en determinadas ocasiones, con cumplir, no vale. O no debería. Pero claro, nos topamos, de nuevo, con unas expectativas acordes a nuestras propias capacidades. Toca bajar el listón y conformarse con lo que hay. Así está la cosa, y así nos va. Por suerte, y ojo, que no es poco, ahí queda el cine (y su intra-historia como fiel y condenado reflejo de ese guión que nos marcó) como consuelo no tan menor. El reflejo, muy apagado, deja en evidencia la brillantez del original. Ya es algo. Puede que ni Bryan Cranston (algo demasiado afectado por una serie de tics mal empleados), ni Helen Mirren sean ni Kirk Douglas, ni John Wayne; puede que Jay Roach no llegue ni a la suela de Otto Perminger; puede que Dalton Trumbo se enfurruñara ante el trabajo de su homólogo John McNamara... Y ahora mismo, podríamos no estar pasándonoslo bien a su costa. De algún modo (bastante rancio, que quede claro), se ha hecho justicia.

Nota: 6 / 10
  •  

Beyond

Dejo por aquí lo que escribí en su día en el hilo de "¿Qué película viste hoy?":

CitarTransformación total de Bryan Cranston en una interpretación que le ha valido una muy merecida nominación al Oscar. Eso sí, la película me ha resultado un poco aburrida, supongo que por su temática tan centrada en la política. El guión y los diálogos están bastante bien, así como los secundarios, pero no es una película que me haya apasionado.

Le doy un 6.
  •  

Wanchope

Cita de: reporter en 01 de Mayo de 2016, 09:10:45 PM
un agradable ejercicio de mínimos que entretiene (y hasta instruye) con la misma facilidad con la que cae en la paradoja de la corrección

Lo resumo en esta frase. Y es que la película me gusta más con el corazón que con la cabeza. En cualquier caso es un filme de lo más satisfactorio que cumple de sobra y deja un buen sabor de boca.
  •  

Soprano

Siendo exigente creo que es una película que si dejase de lado esa corrección que comentáis podría incluso haber sido mejor, porque trata un tema y personajes que a mi al menos me parecen muy interesantes pero no llega a aportar nada novedoso al respecto, a pesar de ello cumple como buen entretenimiento y nos regala una notable actuación de Cranston por lo que merece la pena darle una oportunidad.
  •  

JColl14

El periodo conocido como "la caza de brujas" es uno de los más oscuros de los Estados Unidos, donde el FBI tenía una obsesión por perseguir a todos los comunistas, especialmente los que trabajaban en Hollywood. Por este hecho, grandes figuras cinematográficas como Charlie Chaplin fueron expulsados del país. Por su parte, Dalton Trumbo, uno de los grandes guionistas que ha dado el mundo del cine con grandes textos bajos pseudónimo como el de Vacaciones en Roma, también fue tachado de comunista y puesto en la lista negra. De eso trata Trumbo: La lista negra de Hollywood, un muy buen biopic sobre el célebre guionista que no fue tratado de la mejor forma.
Trumbo: La lista negra de Hollywood nos vuelve a los viejos años de Hollywood, pudiendo ver personajes tan conocidos como Kirk Douglas, Otto Preminger o John Wayne. Además, en algunas ocasiones se pueden ver imágenes en blanco y negro que recuerdan a aquellas películas de antaño. Estos cambios de blanco y negro a color son muy buenos. Por encima de todo, sin embargo, debemos destacar las interpretaciones. Ponerse en la piel de un personaje famoso que ya ha existido no es cosa fácil porque se han de imitar muchos de sus gestos. Bryan Cranston, que interpreta a Trumbo, lo hace de manera muy natural, con una actuación muy sensible y totalmente convincente. Además, todos los secundarios también hacen un magnífico papel.
Otro aspecto a destacar de la película es el guión, que no tiene demasiada acción, pero está cuidado al detalle. Aunque se trata de una cinta dramática, a menudo podemos ver escenas muy cómicas que hacen que la película sea más entretenida. Por el contrario, a pesar de que gran parte de la banda sonora está muy bien elegida, a veces desentona un poco con la escena que estamos viendo en la pantalla.
En definitiva, Trumbo: La lista negra de Hollywood es una notable película que tiene dos objetivos. En primer lugar, y la más evidente, entretener al espectador. Y, en segundo lugar, informar al público de lo que tuvieron que vivir algunos personajes del mundo del cine entre los años cincuenta y sesenta por ser comunistas. No se pierdan este biopic, que no es brillante del todo, pero sí muy entretenido e inteligente.

NOTA: 7
  •  

cicely

Aunque esperaba ver más cine dentro de cine, me ha gustado. Aunque hay momentos en que me pareció que bajaba un poco el ritmo. Eso si, la actuación de Cranston es soberbia, impresionante, sólo por verle merece la pena verla, es que te deja con la boca abierta. Y Goodman que se sale cuando aparece en pantalla, el momento más divertido corre a cargo de él.
No es malo el guión, aunque a veces me pareció ver algún pequeño vacío. Había historia para contar y se ha contado bastante bien.
Lo dicho, buena película, actuacion insuperable.
6,5/10


Un día sin sonrisa,es un día perdido.
  •  

Amélie Poulain

Está muy bien el trabajo de los actores, pero la película en sí pse. Un 6.
  •  

LeonElGatito

Definitivamente Cranston es el que salva a la película del desastre supremo... Como dije en una crítica es una peli que huele más a postureo que no a otra cosa, es demasiado superficial
Si te gusta el cine y te gustan los gatos sexys...

¡Sígueme en mi canal de YouTube!
http://bit.ly/LeonGatitoYT
  •  

Turbolover1984

Se le acusa de ser un relato convencional que cuenta muy superficialmente aspectos ya conocidos de Trumbo. A mi personalmente me ha fascinado mucho la historia, me ha enganchado la forma en la que se me ha contado y como no conocía mucho de Trumbo (y menos toda la parte de la lista negra) no he podido tener la sensación de que me contaban cosas que ya sabía. Desde que descubrí el personaje de Andy Kaufman en la fabulosa 'Man on the moon', no sentía tanta pasión por alguien y tantas ganas de saber todo sobre él como con Trumbo. Me siento incluso un poco sucio e indigno releyendo mi crítica a Espartaco donde me permito el lujo de ponerme tiquismiquis con el guión.

Un film notable y un recital soberbio de Bryan Cranston.

Nota: 7'3
  •