12 años de esclavitud

Iniciado por reporter, 15 de Diciembre de 2013, 03:19:45 AM

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reporter

12 años de esclavitud


SINOPSIS: En los años previos a la Guerra Civil de Estados Unidos, Solomon Northup (Chiwetel Ejiofor), un hombre negro libre que vive en Nueva York, es secuestrado y vendido como esclavo. Solomon deberá luchar no sólo por continuar vivo sino también por preservar su dignidad frente a la crueldad de su amo (Michael Fassbender). Su esperanza, alimentada por inesperados gestos de amabilidad y ayuda, no le abandonará a lo largo de su odisea de doce años. La oportunidad de Solomon de conocer a un abolicionista canadiense (Brad Pitt) cambiará su vida para siempre.

CRÍTICA: Steve desencadenado

Por mucho que los festivales cinematográficos sepan vender cada vez mejor el propio producto (por supuesto, algunos lo hacen con más fortuna y conocimiento que otros); por mucho que, por lo tanto, la presencia en sus respectivos palmareses sea una meta más que apetitosa, existen unos galardones que, a pesar de su carácter a priori restrictivo, siguen estando en lo más alto de las cimas cinematográficas. El glamur es lo que tiene, que nos ciega y nos atrae hacia él con una fuerza contra la que poco o nada se puede hacer. En otras palabras, a no ser que tu apellido sea Godard, o Allen, o Brando (hay más, pero pocos más), cuando llama LA Academia (admitámoslo, la única que realmente importa más allá de sus propias fronteras), el autor, por muy auteur que sea, acude cruzando los dedos y rezando para volver a casa con la más dorada de las estatuillas.

El tío Oscar será la mayoría de veces la manifestación del mainstream más carca (va así, ¿no?), a pesar de esto, la cola de pretendientes que, año tras año, se forma en Los Angeles, es más y más kilométrica. Hay que ganarlo como sea. Porque da prestigio tanto al artista como al productor, porque al ego le sienta estupendamente, porque a la balanza de beneficios también hay que prestarle atención... Y ya que estamos hablando de balances, son tantos los pros y tan escasas (supersticiones aparte) las contras que no son pocos los que deciden tatuarse en la frente, antes de empezar la carrera, el mantra de ''Por lo civil o por lo criminal''. Lo que pasa es que las acepciones de ésta segunda vía son infinitas. Para no liar el asunto más de lo que ya lo está, decir que el trabajo sucio puede hacerse fuera del plató (en caso de duda, pregunten, por ejemplo, a los hermanos Weinstein) o dentro de él. Porque si bien los gustos de los académicos pueden cambiar dependiendo de la dirección en que sople el viento, lo cierto es que pasan los años y hay ciertas preferencias que ahí siguen, haga frío o calor; manden los demócratas o los republicanos.

Es por esto que es posible llamar la atención de los que van a conceder los premios sin andarse con tácticas que más adelante, quién sabe, puedan hacerse pesadas en la conciencia. Y es que 85 ediciones después, es fácil establecer patrones, trazar radios de actuación y apuntar directamente a las partes más sensibles. A la Academia se le ve el plumero... la gracia está en que no se le vea (demasiado) al pretendiente, y sino recuerden lo que le pasó, por citar un caso, a Stephen Daldry con su cuarta intentona. 'Tan fuerte, tan cerca' lo tenía todo a su favor: un reparto de lujo, una historia emotiva (al menos sobre el papel) y un director que aparentemente sabía lo que se hacía... sólo que no. Sin voluntad de de olvidarnos de todos los méritos (que realmente los había), aquello no fue una película, y si lo fue, lo fue en condición de esclava de su propósito, esto es, engalanarse para la alfombra roja hollywoodiense y subir una y otra vez al escenario del Kodak Tehatre (o el que fuera) para pronunciar sendos discursos de agradecimiento.


'12 años de esclavitud', analizada fríamente, desprende ''academicismo'' por todos los poros, y en este sentido, que no quepa la menor duda, es una de las grandes candidatas a arrasar (más que a triunfar) en la próxima gala de los Oscar. No obstante, y ahí se encuentra el verdadero valor de la propuesta, está por encima de éste y de cualquier otro premio. Como Mahoma y la montaña; sólo que en esta ocasión el interés para que se produzca el encuentro no es necesariamente mutuo. Es más, presenciar una nueva muestra de la maestría de esta fuerza de la naturaleza llamada Steve McQueen (empezó a decirse bien alto con la soberbia 'Shame' y puede seguir haciéndose: a este paso no va a quedar ni rastro de las confusiones homófonas / homónimas) y ponerse a hablar de Oscars es casi ofensivo. Perdón.

Y es que más allá de algún exceso con la banda sonora, no hay ningún momento en '12 años de esclavitud' (y en más de dos horas de metraje, créanme, hay tiempo de sobras para ello) en el que pueda apreciarse mala intención alguna. Sí, es dura, desagradable, puede hacer brotar más de una lágrima y, desde luego, es dolorosa (y no sólo en un plano secuencia para la historia en que el cine corporal de McQueen explota sus mejores virtudes para que los latigazos mostrados en pantalla, sin necesidad de que intervengan gafas polarizadas, acaben por afectar más a la audiencia que a los personajes), pero lo es no por voluntad, sino por pura naturaleza. No puede hacer nada al respecto. Del mismo modo, y aunque su base se halle en una novela autobiográfica, en absoluto es éste un biopic. De nuevo, está por encima de ésta y de otras muchas etiquetas. Es más bien el documento histórico de una atrocidad, de una inmensa prisión en la que todo el mundo era cómplice. Dicho de otra manera, de una monstruosa monstruosidad, valga la redundancia.

La casi-perfecta sociedad entre Steve McQueen y el guionista John Ridley tiene a bien procurar (y dicho sea de paso, conseguir) que el drama personal trascienda, sin obviedades o subrayados, en un colectivo completamente derruido. La destrucción de la comunidad afroamericana perpetrada, por puro automatismo, al apuntar ésta por separado a cada uno de sus individuos. Contado como en aquella clase de historia a la que nos hubiera encantado asistir: enseñándolo todo, pero sin lecciones. Contado como si fuera el melodrama más clásico... pero con un estilo (magistral uso del montaje) y, sobre todo, una consciencia plenamente modernos. La técnica es brillante, y la puesta en escena; también la ambientación, pero destaca por encima de todas las virtudes, el sentido de una narración nítida, sincera e implacable. El director londinense extrae una vez más lo mejor de sus actores (inmensos Chiwetel Ejiofor y Michael Fassbender, así como absolutamente todos sus acompañantes) y de paso sabe encontrar el equilibrio ideal entre el dogma del manual y la personalidad del diario íntimo. Se trata, por si había dudas, de romper cadenas; de marcar las reglas del juego... y que éstas sean universales. de El resultado es tan incontestable que uno no puede -ni debe- siquiera hacer el ademán de esquivar sus golpes. Es imposible, es hasta inmoral.

Nota: 8,4 / 10
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Yeezus

Maravilla una vez más Víctor. Qué tal Pitt?
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reporter

Thanks! Pitt está bien, pero demasiado testimonial como para analizar su actuación. Delante de las cámaras simplemente se deja ver... detrás de ellas es donde supongo que ha tenido más peso.
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Wanchope

Cita de: reporter en 15 de Diciembre de 2013, 04:30:30 PM
Thanks! Pitt está bien, pero demasiado testimonial como para analizar su actuación. Delante de las cámaras simplemente se deja ver... detrás de ellas es donde supongo que ha tenido más peso.

De hecho hay quien dice que su labor detrás de las cámaras fue "premiada" con ese pequeño papel, para entendernos (o algo parecido). De su breve aportación destacaría el cara a cara que mantiene con Fassbender, aunque más que nada por el contraste que hay entre este y los que mantienen ambos actores en 'El consejero', y que crean en sí mismos un curioso conjunto. O puede que sea sólo cosa mía, pero me resultó muy curioso comprobar los matices de una dinámica similar con otro tono, ambiente y personajes.
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Michael Myers

RETRATO DE UNA INFAMIA

Steve McQueen lleva dando golpes en la mesa desde su debut en el largometraje con 'Hunger', en 2008. Primero, por dicho debut, se mostró como un director interesante; por 'Shame' (2011) hizo que le viéramos como un realizador al que tener muy en cuenta y con '12 años de esclavitud' parece que se ha consolidado definitivamente, además de volver a hurgar en uno de los episodios más lamentables de la historia de los Estados Unidos, la esclavitud, personalizado en la historia de Solomon Northup.

Con '12 años de esclavitud', McQueen sigue mostrando una gran visión a la hora de dirigir y sigue mostrando imágenes impactantes, haciendo pasar a sus actores principales por todo tipo de situaciones para sacar su mejor versión (en 'Hunger' y en 'Shame', Michael Fassbender debía pasar una huelga de hambre y pasar por el infierno que sufre un adicto al sexo, respectivamente) como es el caso de Chiwetel Ejiofor. Además, como en 'Shame', a Steve McQueen no le importa ir un paso más allá a la hora de mostrar ciertas imágenes si eso sirve a la historia (de momento, de las 2 películas que he visto de su corta filmografía en el largo -'Shame' y ésta- no he visto ninguna imagen realmente fuerte para ser sinceros). En resumen, a pesar de que Steve McQueen parece haber abrazado el cine de grandes magnitudes, no ha perdido sus costumbres.

Es más, por su fotografía, su fantástico vestuario, una buena banda sonora y una destacable dirección, este escarceo de McQueen con un cine de producción más grande, ha sido bastante satisfactorio, para el público en general y para mi, en particular. Lamento, eso sí, no poder haber disfrutado de la película, en su versión original, porque una película así hay que verla si o sí en V.O.S.E.

¿Oscars? Tampoco me extrañaría mucho que en marzo de 2014 recojan varios hombrecillos dorados en el Dolby Theatre de Los Ángeles. Tiene argumentos para que así sea.



8
Quizá en esos últimos días, el amó la vida con más intensidad que nunca, no sólo su vida, la de cualquiera, mi vida.
Y lo único que quería eran las mismas respuestas que el resto de nosotros: ¿De dónde vengo? ¿Adónde voy? ¿Cuánto tiempo me queda?
(Blade Runner)
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AlvaroParker

Para mí es la película de este año. Se veía ya de lejos que arrasará en los Oscars, y eso espero.

Una pena que en la bso abusen de Inception, muy descarado lo de Zimmer.

Y para destacar entre todas las cosas es la forma en que McQueen explica el sufrimiento de los esclavos y el proceso en que Solomon acabó en aquel lugar. Michael Fassbender espectacular y gran respeto hacia Chiwetel Ejiofor que lo borda. Y como guinda la participación de Pitt, que aunque se sepa ya de que ese papel lo haya propuesto él supongo, es cuanto menos curioso su aparición ya que para 5 minutos que sale es de lo más esencial para la trama.
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Sullivan

Cita de: AlvaroParker en 23 de Diciembre de 2013, 09:43:24 PM
Y como guinda la participación de Pitt, que aunque se sepa ya de que ese papel lo haya propuesto él supongo, es cuanto menos curioso su aparición ya que para 5 minutos que sale es de lo más esencial para la trama.

La intervención de Pitt es lamentable y completamente prescindible. Es una forma gratuita de tratar al espectador como gilipollas y decirle en su puta cara y de forma literal lo evidente "Hola espectador, la esclavitud es una cosa muy mala, los negros también son personas y hay que tratarlos como a los blancos. Adiós". No esperaba eso de Mcqueen...

Muy decepcionante la peli. Planísima tanto en historia como en personajes, así es imposible emocionarse.
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Wanchope

Al personaje de Pitt lo que le falla es la perilla que le han puesto, por lo demás está tan correcto como siempre y es un personaje necesario para el ideario del filme.
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Michael Myers

Cita de: Sullivan en 23 de Diciembre de 2013, 10:20:28 PM
Cita de: AlvaroParker en 23 de Diciembre de 2013, 09:43:24 PM
Y como guinda la participación de Pitt, que aunque se sepa ya de que ese papel lo haya propuesto él supongo, es cuanto menos curioso su aparición ya que para 5 minutos que sale es de lo más esencial para la trama.

La intervención de Pitt es lamentable y completamente prescindible. Es una forma gratuita de tratar al espectador como gilipollas y decirle en su puta cara y de forma literal lo evidente "Hola espectador, la esclavitud es una cosa muy mala, los negros también son personas y hay que tratarlos como a los blancos. Adiós". No esperaba eso de Mcqueen...

Pues algunos de los personajes como Solomon o la señora Shaw tienen frases similares durante la película a los que dice Brad Pitt.
Quizá en esos últimos días, el amó la vida con más intensidad que nunca, no sólo su vida, la de cualquiera, mi vida.
Y lo único que quería eran las mismas respuestas que el resto de nosotros: ¿De dónde vengo? ¿Adónde voy? ¿Cuánto tiempo me queda?
(Blade Runner)
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Yeezus

Llevar un hecho verídico a la gran pantalla es un hándicap añadido a la complicada misión de realizar una película y sumado al otro hándicap de que ésta resulte convincente y que, en definitiva, sea buena. Pero cuando el hándicap se trata de representar un hecho tan terrible y tan tremendamente aberrante como fueron los 12 largos años de esclavitud que tuvo que soportar Solomon Northup, el hándicap se ve fraccionado en dos hándicaps; ya no sólo hay que hacer una buena representación gráfica de la dramática historia de Solomon, sino que hay que mediar el cuidado de aquellos tan denunciables hechos y del impacto que estos generen. Y McQueen, Ridley y todo el equipo de "12 Años de Esclavitud", tercera colaboración consecutiva del director británico con su actor fetiche, Michael Fassbender, aprueban, como les gusta a los teóricos académicos, con mucha nota este "examen".

La película fácilmente podría aprobar este "examen" en algunos de sus fantásticos añadidos; empezando por la extraordinaria fotografía de Sean Bobbitt, con un paisaje sureño, lleno de arboleda y generoso en vegetación, siguiendo por la excelente ambientación y los lugares donde tuvo lugar el rodaje, como los exteriores de las plantaciones históricas de Felicity, Bocage, Destrehan o Magnolia (esta última muy cerca de la verdadera plantación donde vivió Solomon), pasando por el escandaloso relato escrito que emanó de las manos de John Ridley o de la, en menor escala claro está, banda sonora del inconfundible Hans Zimmer, aunque decimos en menor escala porque dicha sintonía recuerda demasiado a Origen, y quizá esto le reste algo de mérito al trabajo del compositor preferido de Hollywood. Solamente por estos 4 elementos ya debería ser considerada una maravilla cinéfila, pero no es aquí donde la cinta brilla y descansa todo su esplendor.

La mano de Steve McQueen, que con 44 años se está convirtiendo en un realizador a tener muy en cuenta a pesar de su escasa pero fulgurante filmografía (es de hecho su 3er largometraje), es un punto donde el film destaca con mucha diferencia del resto de películas del año, y por consiguiente, de las que pueden ser sus competidoras en la temporada de premios y el cónclave que se celebrará allá por Febrero, los Premios Oscar. Los momentos de tensión sin narrativa están representados con crudeza y un realismo que verdaderamente asusta. McQueen, brillante, demuestra mucha firmeza en los planos y deja para el recuerdo algunas escenas como el del ahorcamiento de Solomon, una auténtica obra de arte que difícilmente se olvidará.

Pero es en el reparto donde la cinta deposita su estrella. Empezando por un inconmensurable Chiwetel Ejiofor, que encuentra en Solomon Northup el personaje de su vida, que sufre y aguanta y que nos brinda una actuación muy sobrecogedora, desde momentos en solitario como el del eterno ahorcamiento hasta el asfixiante momento del reencuentro con su libertad, que parecía que nunca iba a llegar, pasando por la maravillosa reunión de esclavos para despedir a un esclavo llamado Jordan y que, a modo de improvisado coro gospel, entonan una canción entrañable a la vez que muy rítmica en la que logramos percibir una voz grave y prodigiosa del propio Ejiofor. Un papel que sino le corona como Mejor Actor del año, le haga pelear duro por la estatuilla. Michael Fassbender, el despiadado y vil plantador Edwin Epps, Lupita Nyong'o, la valiente pero resignada esclava Patsey, y hasta el breve pero decisivo Brad Pitt como Bass, un progresista trabajador de carpinteria, deslumbran en pantalla. Un reparto que solamente es comparable en talento al de la "American Hustle" de David O´Rusell.

12 años de esclavitud es un canto a la libertad del hombre de color, una historia que acaricia nuestro corazón sin ninguno tipo de pavor y que nos retuerce por dentro hasta secarnos el mismo alma. La historia de Solomon Northup nos duele, nos llega, nos impacta y sobretodo nos acongoja. Acongoja por el hecho de reflexionar como podía haber tal grado de crueldad con otros seres humanos que lo único que tenían diferente a nosotros era el color de su piel. Acongoja porque seguramente en algún lugar del mundo esto no haya sido abolido y un hecho tan denunciable como la esclavitud (quizá no a tanta magnitud, o sí) siga vigente en estos tiempos que corren. Como historia y hecho verídico es un relato maravilloso, pero como película es un drama de unas dimensiones inolvidables. Para el recuerdo. Y allá donde estés, roll Solomon roll.

8/10



That´s what I say.
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Michael Myers

Cita de: BruceDKWayne en 24 de Diciembre de 2013, 09:16:21 PM
y que, a modo de improvisado coro gospel, entonan una canción entrañable a la vez que muy rítmica en la que logramos percibir una voz grave y prodigiosa del propio Ejiofor.

Sí, yo creo que tampoco tiene una mala voz para cantar si nos referimos a esa escena de gospel.
Quizá en esos últimos días, el amó la vida con más intensidad que nunca, no sólo su vida, la de cualquiera, mi vida.
Y lo único que quería eran las mismas respuestas que el resto de nosotros: ¿De dónde vengo? ¿Adónde voy? ¿Cuánto tiempo me queda?
(Blade Runner)
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Yeezus

Cita de: Michael Myers en 25 de Diciembre de 2013, 11:05:41 AM
Cita de: BruceDKWayne en 24 de Diciembre de 2013, 09:16:21 PM
y que, a modo de improvisado coro gospel, entonan una canción entrañable a la vez que muy rítmica en la que logramos percibir una voz grave y prodigiosa del propio Ejiofor.

Sí, yo creo que tampoco tiene una mala voz para cantar si nos referimos a esa escena de gospel.

Chico yo no puedo parar de escucharla en Spotify. Me parece un vozarrón brutal.
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Josemi19

Cita de: Sullivan en 23 de Diciembre de 2013, 10:20:28 PM
Cita de: AlvaroParker en 23 de Diciembre de 2013, 09:43:24 PM
Y como guinda la participación de Pitt, que aunque se sepa ya de que ese papel lo haya propuesto él supongo, es cuanto menos curioso su aparición ya que para 5 minutos que sale es de lo más esencial para la trama.

La intervención de Pitt es lamentable y completamente prescindible. Es una forma gratuita de tratar al espectador como gilipollas y decirle en su puta cara y de forma literal lo evidente "Hola espectador, la esclavitud es una cosa muy mala, los negros también son personas y hay que tratarlos como a los blancos. Adiós". No esperaba eso de Mcqueen...

Muy decepcionante la peli. Planísima tanto en historia como en personajes, así es imposible emocionarse.

¿Prescindible? Si te cargas al personaje de Brad Pitt destruyes el nexo entre el planteamiento y la conclusión de la película.
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Wanchope

Creo que Sulli se refiere más al cómo está hecho que a su funcionalidad en la película. A la conversación que tiene con Fassbender, supongo, que por otro lado es la que más me gusto de toda la película... aunque como ya he comentado, la vi justo al día siguiente de haber visto 'El consejero' en donde ambos tienen varios cara a cara de órdago. Y en ese sentido por cierto sí se ve que en la de Ridley Scott los disfruta de verdad, en '12 años de esclavitud' parece que Pitt esta con el piloto automático, como si sólo fuera por hacer acto de presencia. Aunque aún así Pitt siempre da el pego, por otro lado. Pero esa perilla... esa perilla...
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Ahms

La vi ayer y me pareció una película muy irregular, con una primera hora fantástica y una segunda hora mediocre y absurda. Parece como si cada hora las hubieran dirigido directores diferentes.

Todos los actores están estupendos, lo reconozco. Desde Ejiofor ( que ya apuntaba maneras en Hijos de los Hombres y, más brevemente, en Plan Oculto) hasta Fassbender pasando por Cumberbatch que  tiene un caramelo de papel también. Sorprendente la actuación de Lupita Nyong'o por ser su debut y por tener a quien tiene como compañeros.  Aunque las apariciones de Paul Dano sean acojonantes igualmente, sobretodo cuando se pone a cantar, me empieza a cansar que últimamente solo haga de tarado o chico raro. Los papeles de Giamatti y Pitt me parecieron poco más que cameos de lujo.

La fotografía también es preciosa, sobre todo las escenas nocturnas que me parecieron de un gusto exquisito.

No he visto ni Hunger ni Shame pero en esta peli he visto un director muy irregular y a ratos mediocre. Si en la primera hora de la película su labor es brillante, toda la escena del barco, en la segunda hora de película ( más o menos cuando aparece Fassbender) su labor es mediocre, mediocre, mediocre. Si la película no se llamara 12 Años de Esclavitud no sabríamos cuanto tiempo ha pasado porque salvo dos personajes secundarios que aparecen al final de la película ya creciditos ninguno cambia físicamente. Parece que transcurren meses cuando pasa, suspuestamente, un década. Ni un apunte visual ni caracterizaciones, nada de nada que no indique el tiempo transcurrido. Sangrante resulta que Ejiofor mantenga la misma constitución física al principio que al final siendo un esclavo, al cual, creo yo, no creo que le alimentarán precisamente bien.

Además el guión, o el montaje, no son demasiado elogiables. Hay personajes que aparecen y desaparecen misteriosamente ( ¿Porqué Paul Dano desaparece? ¿Por qué deja de acosar a Solomon?) y apartir de la hora el drama y la acción recaen sobre Patsy y Epps. Siendo los encontronazos de estos dos personajes más interesantes que lo que le ocurre a Solomon, al cual practicamente no le ocurre nada. De hecho, aún estando basada en hechos reales me cuestra creer que Solomon se niegue a cumplir ordenes o se enzarze con su amo sin recibir ni un solo golpe y más teniendo en cuenta que antes de llegar al sur le dan una somante de palos porque sí.

Tampoco entiendo porque dicen que se trata de una película dura. Salvo la paliza que he mencionado antes y la angustiosa secuencia en el barco y uno latigazos al final de la pelicula poca violencia física vemos más. Me cuesta creer que los espectadores de hoy en día se impresionen por cosas como estas.

No puedo evitar comparar esta pelicula con Django Desencadenado. Creo, aún sin saber demasiado del Esclavismo, que mostraba una realiadad más dura, cruel sádica y terrorífica seguramente más cercana a la realidad que la que McQueen nos enseña aquí.

Lo Mejor: Los actores, la fotografía y los primeros sesenta minutos de metraje.

Lo Peor: La irregular labor de McQueen y lo inverosímil y absurda que resulta la película pasada la hora de metraje.
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